Respeto

Cuando comienzan a arreciar las especulaciones sobre posibles cambios en el Gobierno de Zapatero, conviene dejar bien sentado que cualquier modificaci¨®n que se realice ha de estar regida, desde el punto de vista territorial, por un elemental respeto a Andaluc¨ªa y lo que pol¨ªticamente significa en el proyecto de Zapatero.

Su mayor exponente, hasta ahora, ha sido la presencia en el Ejecutivo de Manuel Chaves como vicepresidente tercero. En la mayor¨ªa de las quinielas se da por segura la continuidad del presidente del partido con una cartera de mayor contenido competencial, tal vez, Defensa, extremo ¨¦ste que se ha manejado en varias ocasiones. Sea lo que sea, lo cierto es que habr¨¢ que estar atentos tanto al equipo del que se rodee Zapatero en su nueva etapa, tras concluir la presidencia europea por parte de Espa?a, como al trato que ha de recibir nuestra tierra en relaci¨®n al anunciado de inversiones en infraestructuras.

Nada ha aflorado a¨²n pero es de suponer que el pulso con el ministro de Fomento, Jos¨¦ Blanco, tiene que ser de envergadura. Tanto que, a d¨ªa de hoy, a¨²n se desconoce por d¨®nde se va a meter la tijera tanto por parte de Fomento como por la propia Junta. Aunque en los ¨²ltimos d¨ªas algo hemos sabido al respecto. El presidente Gri?an ya ha fijado un criterio, como es su apuesta clara por el ferrocarril en detrimento de las autov¨ªas, buena parte de las cuales van a ser incluidas en ese amplio cap¨ªtulo de colaboraci¨®n p¨²blica-privada. En todo caso, no hay que olvidar la obligaci¨®n del Estado de destinar el 17,8% de sus inversiones a esta comunidad, tal y como marca el Estatuto conforme al peso de la poblaci¨®n andaluza sobre el conjunto del pa¨ªs para un periodo de siete a?os. Hacer valer este principio debe ser una de las principales obsesiones de los gobernantes andaluces frente a Madrid.

Pero lo cierto es que poco se ha desvelado sobre el alcance real de esos ajustes. En lo que se refiere a la Junta, el presidente se comprometi¨® en el pasado debate de la comunidad a aplicar un recorte, reprogramar, lo llama Gri?¨¢n, por valor de 846 millones de euros. Ser¨¢ en la sesi¨®n de control de esta semana en el Parlamento, donde la consejera de Hacienda, Carmen Mart¨ªnez Aguayo, tendr¨¢ que aportar detalles, aunque podr¨ªa pasar de puntillas a la espera de lo que decida Fomento. Donde no lo podr¨¢ hacer es en relaci¨®n al plan para reestructurar el sector p¨²blico y sobre la pol¨ªtica fiscal. Eso es lo que figura en el gui¨®n, en el orden del d¨ªa, sin rastro alguno, por tanto, del dichoso copago en la sanidad p¨²blica.