Revivir ?frica a trav¨¦s de la escuela
Una regi¨®n de Burkina Faso hace del colegio el pilar social - Unos 36 millones de ni?os del continente no tienen acceso a la educaci¨®n primaria
Ganame Yacouba tiene 13 a?os y emplea tres horas al d¨ªa para ir y volver al colegio, hasta el poblado de Saya, en la regi¨®n de Yatenga, al norte de Burkina Faso, el pa¨ªs de ?frica Occidental que fue Alto Volta y que est¨¢ considerado uno de los m¨¢s pobres del planeta. Ganame no regresa a mediod¨ªa a su casa de adobe en el poblado de Boboro desde hace m¨¢s de dos a?os, cuando la ONG Intervida empez¨® a aplicar un programa de escolarizaci¨®n que ha convertido la escuela en la espina dorsal de la sociedad y de la infancia, que en el idioma d¨¢gara se dice bibir y que es como se conoce all¨ª a la ONG.
Desde entonces la escuela es mucho m¨¢s que el centro en el que se ense?a franc¨¦s, matem¨¢ticas, ciencias de la vida y de la tierra, historia y geograf¨ªa. Es tambi¨¦n el comedor, el lugar en el que se aprenden h¨¢bitos alimentarios e higiene y adonde acuden una vez por trimestre los equipos sanitarios de Intervida a revisar la salud de los escolares en presencia de sus madres. A partir de octubre tambi¨¦n habr¨¢ un huerto escolar en el que se ense?ar¨¢n t¨¦cnicas agr¨ªcolas a los ni?os.
El pa¨ªs est¨¢ lejos del Objetivo del Milenio de la ONU en cuanto a ense?anza
El colegio tambi¨¦n es el comedor. Ense?a higiene y alimentaci¨®n
La poblaci¨®n de Burkina Faso es de 15 millones de habitantes y la superficie viene a ser la mitad de la de Espa?a. La ministra de Ense?anza Primaria y de Alfabetizaci¨®n del pa¨ªs, Marie Odiole Bonkougou, explica que la tasa de escolarizaci¨®n de ni?os en el conjunto del pa¨ªs es del 67% y de las ni?as, del 60%, unas cifras muy lejanas a las de 2002, en que los porcentajes eran del 40% y del 20%, respectivamente. La proporci¨®n de ni?os que acaban la primaria se sit¨²a actualmente en el 60%, algo que la ministra considera un logro tras la aplicaci¨®n del plan nacional de educaci¨®n de 2002. Hace tan solo ocho a?os hab¨ªa en el pa¨ªs unos 900 colegios, casi todos hechos de paja y ahora son 4.000.
Pese la satisfacci¨®n de la ministra, ser¨¢ imposible que Burkina Faso cumpla uno de los objetivos de desarrollo del Milenio que se marcaron las Naciones Unidas, la universalizaci¨®n de la ense?anza primaria en 2015.
"En el ?frica subsahariana la salud de los ni?os y la asistencia a la escuela primaria han registrado mejoras enormes durante los ¨²ltimos 20 a?os [...] Sin embargo, los progresos han sido dispares y, si no se hacen esfuerzos adicionales, es probable que en muchos pa¨ªses no se alcancen varios objetivos", dice un informe de la secretar¨ªa general de la ONU del pasado febrero sobre el cumplimiento de las metas. Su secretario general, Ban Ki-moon, ha hecho un llamamiento a los l¨ªderes mundiales para que asistan a la cumbre que se celebrar¨¢ en septiembre en Nueva York, ya que la crisis est¨¢ poniendo en peligro esos objetivos. En lo que toca a la escolarizaci¨®n universal, se ha superado en todo el mundo el umbral del 90%. Pero en el ?frica subsahariana ha pasado del 58% en 2000 al 74% en 2007. Adem¨¢s, la mitad de los 72 millones de ni?os en edad escolar de todo el mundo que no van al colegio est¨¢n en esa regi¨®n del planeta, seg¨²n ese informe de febrero. El pr¨®ximo mi¨¦rcoles, la ONU publica el informe de progreso del programa correspondiente a 2010.
Mientras tanto, ONG como Intervida siguen poniendo su granito de arena. Sus representantes aseguran que en la regi¨®n de Yatenga act¨²an sobre 14.000 ni?os en 49 escuelas de 45 poblados, y estiman que la tasa de escolarizaci¨®n ha aumentado un 150%.
En el poblado de Saya, la energ¨ªa solar ha permitido electrificar la escuela y se ha pasado de tres a seis aulas. Muy destartaladas, con bancos en los que las maderas que hacen de pupitre o de asiento se tambalean con facilidad y es f¨¢cil que se caigan, con techos de chapa que explican las temperaturas de 40 grados en las aulas en pleno verano y unas paredes muy deterioradas.
"Hemos conseguido motivar a los padres porque ven que ha mejorado la alimentaci¨®n y la sanidad de sus hijos", explica V¨ªctor Ruibal, desde hace dos a?os y medio director en Burkina Faso de Intervida, la ONG que en 2007 fue intervenida por la justicia por la supuesta estafa que protagonizaron sus directivos, todos ellos destituidos por los nuevos administradores que nombr¨® la Generalitat catalana.
La ONG trata de introducir otros mensajes en la sociedad. Por ejemplo, la necesidad de escolarizar a las ni?as, algo con lo que las familias siempre se han mostrado muy reacias porque entienden que lo que les corresponde es ocuparse del cuidado de los animales y los hermanos peque?os, as¨ª como ayuda en los cultivos (los tres primeros objetivos del milenio est¨¢n muy ligados: erradicar el hambre, la escolarizaci¨®n universal y la igualdad de g¨¦nero).
Badini Idrissas es uno de los seis profesores que dan clase en el poblado de Saya y explica que las ni?as son mucho mejores estudiantes que los ni?os. Ganane Auli, de 13 a?os, ha podido huir, aunque tarde, de la losa que le supon¨ªa su g¨¦nero, y est¨¢ contenta de poder acudir al colegio, aunque tenga que andar una hora diaria para ir y otra para volver.
"Cuando un ni?o falta a la escuela, pedimos a la asociaci¨®n de padres que pida explicaciones a los adultos. Y a los ni?os tambi¨¦n les pedimos que nos digan si sus padres no les hacen lavarse las manos antes de comer", a?ade Ruibal. Una de las canciones que se ense?a en clase en la lengua local mor¨¦ se refiere precisamente a los h¨¢bitos de limpieza.
En el poblado de Saya los padres piden a los profesores que peguen a los ni?os, porque eso es lo que se hace en casa, pero los maestros les explican que ese no es el camino. Acabado el curso, los ni?os pasan el d¨ªa cavando la tierra para preparar la siembra. En octubre, cuando las lluvias torrenciales hayan cambiado por completo el paisaje y se hayan recogido las cosechas, casi todos volver¨¢n a la escuela.
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