Industria ordena el cierre inmediato de la pol¨¦mica cantera de Zallobenta

La pol¨¦mica cantera de Zallobenta, en litigios judiciales desde hace 12 a?os y reprobada por las instituciones vascas, ya no funcionar¨¢ m¨¢s. El Departamento de Industria comunic¨® ayer a los propietarios de la explotaci¨®n ubicada en Ma?aria, junto al parque natural de Urkiola, la "inmediata paralizaci¨®n de la actividad extractiva". La consejer¨ªa se basa en la sentencia definitiva del Tribunal Supremo que, el pasado 9 de junio, declar¨® ilegal la ¨²ltima autorizaci¨®n concedida por el Ejecutivo vasco. Pese a esta decisi¨®n inmediata, ayer por la tarde la empresa estaba trabajando "a todo meter", tras una voladura realizada el mi¨¦rcoles, "cuya intensidad hace tiempo que no recordamos", se?al¨® un vecino.

Pese a la orden, la empresa trabaj¨® ayer a "todo meter", dice un vecino

El Gobierno insta a que le presente en un mes un plan de desmantelamiento

El director de Energ¨ªa y Minas del Gobierno, Oskar Zabala, se reuni¨® en la ma?ana de ayer con los due?os, Canteras y Hormigones Zalloventa, para trasladarse personalmente la decisi¨®n del cierre de la cantera y la obligatoriedad de que presenten en un mes un plan de abandono y desmantelamiento de las instalaciones. Industria argumenta que se limita a ejecutar la sentencia del Supremo, que resuelve definitivamente los litigios iniciados en 1998, al anular las autorizaciones concedidas por la consejer¨ªa cuando estaba dirigida por el PNV.

Ese a?o, el Departamento de Industria concedi¨® una autorizaci¨®n de explotaci¨®n, pese a las dudas que exist¨ªan al ubicarse en el l¨ªmite del parque natural de Urkiola. El Tribunal Superior de Justicia del Pa¨ªs Vasco anul¨® la autorizaci¨®n en 2001, un fallo confirmado por el Supremo en 2005. Pero, al prever que la justicia pod¨ªa tomar estas decisiones contrarias, en 2003 Canteras y Hormigones Zalloventa pidi¨® otro permiso de explotaci¨®n (el llamado Secci¨®n C), que fue aprobado por el entonces equipo de Industria en 2004. En la zona para explotar que fue autorizada entonces, estaba la superficie que precisamente hab¨ªa sido declarado ilegal por los tribunales en 2001 y 2005. De nuevo, en 2007 el Superior volvi¨® a anular esta segunda autorizaci¨®n, fallo confirmado ahora por el Supremo.

Pese a todos estos reveses, los due?os de Zalloventa hab¨ªan vuelto a solicitar la ampliaci¨®n de su actividad al Gobierno y el expediente estaba sin resolverse desde 2002. El consejero de Industria Bernab¨¦ Unda inform¨® hace un mes en el Parlamento que se denegaba la ampliaci¨®n tras la reciente modificaci¨®n de la ley de conservaci¨®n de la naturaleza que proh¨ªbe las explotaciones mineras dentro de espacios naturales protegidos. Se trataba del primer caso afectado por la normativa aprobada el pasado 11 de marzo. Entonces se calculaba que a Zallobenta le quedaba un a?o de explotaci¨®n.

La resoluci¨®n del cierre, que fue firmada el lunes por el director de Minas, obliga, adem¨¢s del plan de abandono, a adaptar el proyecto de restauraci¨®n del ¨¢rea que estaba explotando. La ley de canteras obliga a la regeneraci¨®n de estas instalaciones cuando se acerca el final de la explotaci¨®n para mitigar el impacto paisaj¨ªstico.

Zallobenta, con cerca de 113.000 toneladas anuales de producci¨®n, ha visto reprobada su actividad en los ¨²ltimos a?os por las instituciones vascas. Las Juntas Generales de Vizcaya pidieron en 2007 su cierre inmediato y la paralizaci¨®n de la actividad. El Parlamento tambi¨¦n adopt¨® en 2008 un acuerdo de cierre solamente con el rechazo de PNV y EA. La actividad de la cantera ha provocado un gran rechazo social entre los vecinos de la comarca del Duranguesado, que presentaron la ¨²ltima denuncia judicial y han denunciado que "con subterfugios legales ha estado trabajando m¨¢s de 12 a?os", en los que ha extraido entre tres y cuatro millones de piedra caliza de la pe?a Eskubaratz, dentro del parque de Urkiola.

Los vecinos se?alan que ha habido hasta ahora una "colaboraci¨®n total" entre el Gobierno vasco y Canteras y Hormigones Zallobenta para permitir su actividad y "el da?o causado ha sido irreversible".