"Aburrir en las primeras p¨¢ginas est¨¢ prohibido"
La relaci¨®n por correo electr¨®nico entre un hombre y una mujer, ¨¢gil, divertida y plagada de suspense, vertebra Contra el viento del Norte, un fen¨®meno editorial de cuyo alcance su autor, el vien¨¦s Daniel Glattauer, se declara "soprendido". Glattauer, de 50 a?os, durante 20 a?os periodista especializado en temas de Justicia en el diario austriaco Der Standard, profesi¨®n que dej¨® el a?o pasado, dice ser un "chico con suerte". "No cont¨¦ con semejante ¨¦xito cuando lo escrib¨ª y ahora incluso se ha traducido al espa?ol, algo fant¨¢stico. No puedo decir que he logrado la meta de mi vida porque nunca me la marqu¨¦. No he buscado el ¨¦xito y quiz¨¢ por ello lo he tenido".
Del libro -publicado en espa?ol por Alfaguara y en catal¨¢n por La campana- se han vendido 850.000 ejemplares en Austria y en Alemania desde su publicaci¨®n en alem¨¢n en 2006. Tambi¨¦n es un superventas en Francia e Italia y cuenta con derechos de traducci¨®n a 33 lenguas.
"El lenguaje gana importancia con los correos electr¨®nicos"
"A trav¨¦s de Internet la fantas¨ªa cobra un papel muy relevante"
Pregunta. ?A qu¨¦ cree que se debe el ¨¦xito de su obra?
Respuesta. Creo que se adecua a los tiempos que vivimos. Mucha gente usa los correos electr¨®nicos, se identifica con este intercambio epistolar. El libro es f¨¢cil de leer y muy positivo, aunque algunos aspectos sean tristes, pero, en su totalidad, motiva a aquellos que no han encontrado al compa?ero de su vida y les anima a entablar una relaci¨®n.
P. ?De d¨®nde sale este argumento?
R. La iniciativa de una relaci¨®n por correo electr¨®nico se me ocurri¨® cuando ya estaba escribi¨¦ndola. Comenc¨¦ a escribir una historia de amor de la que no ten¨ªa idea en qu¨¦ sentido ir¨ªa, pero s¨ª sab¨ªa que ser¨ªa un triangulo amoroso con marido. Ide¨¦ que podr¨ªan haberse conocido por casualidad debido al env¨ªo de un correo electr¨®nico a una direcci¨®n err¨®nea y luego, abandonar ese formato por el relato cl¨¢sico. Pero llegu¨¦ al final sin la sensaci¨®n de que deb¨ªa abandonar esa estructura... adem¨¢s, me lo pasaba muy bien escribiendo y me interesaba tanto lo que suced¨ªa que sent¨ª que el lector iba a experimentar lo mismo.
P. ?Cree usted, como Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez, que las primeras l¨ªneas de un relato son esenciales para enganchar al lector?
R. S¨ª. Un libro no puede aburrir y est¨¢ prohibido hacerlo en las dos primeras p¨¢ginas.
P. ?Por qu¨¦ pens¨® en una forma tan innovadora, en un g¨¦nero epistolar contempor¨¢neo, como es el de los correos electr¨®nicos?
R. Me gusta la comunicaci¨®n muy corta y muy clara, y eso lo permiten los correos. Por mi labor de periodista, hace mucho tiempo que los utilizo. El desaf¨ªo y lo interesante para m¨ª era que ambos protagonistas valoraran un estilo de lenguaje cuidado.
P. Ha cambiado Internet nuestra forma de comunicarnos?
R. Creo que s¨ª. Antes se escrib¨ªan cartas, que exig¨ªan mucho esfuerzo y tiempo, y no se centraban en la manera de expresarse, pero con los correos electr¨®nicos el lenguaje ha adquirido una importancia mayor y si, adem¨¢s, los que se escriben no se conocen, la fantas¨ªa pasa a ejercer un papel relevante y se puede ser emocional en la expresi¨®n.
P. ?Qu¨¦ tal se maneja usted con Internet?
R. Me doy por satisfecho con dominar el programa Word para escribir.
P. La historia parece transcurrir en Viena o en cualquier caso en Austria, donde apenas hay viento del Norte, en comparaci¨®n al viento procedente del Oeste. ?Por qu¨¦ lo eligi¨® entonces? ?Tienen Leo, el protagonista, y sus correos un efecto calmante frente ese viento del Norte que no deja dormir a Emmi, la protagonista?
R. Es una pregunta que, curiosamente, nunca me han hecho. El t¨ªtulo lo eleg¨ª leyendo el manuscrito mientras buscaba un t¨ªtulo sonoro que tuviera que ver con el sentido de la obra y hab¨ªa una corta escena en la que Emmi se refiere a su dificultad para conciliar el sue?o cuando azota ese viento. Viento del Norte es un nombre bonito, sonoro, y evoca el fr¨ªo. Cuando alguien tiene un efecto positivo contra el viento del Norte es que puede dar calor. Consider¨¦ que era una met¨¢fora de que Leo era realmente bueno contra ¨¦l [el t¨ªtulo original, en alem¨¢n, Gut gegen Nordwind es Bueno contra el viento del norte].
P. Algunos cr¨ªticos y lectores le reprochan el abrupto final, ?por qu¨¦ lo escribi¨® as¨ª?
R. Porque encaja en el desarrollo de la novela y no ser¨ªa as¨ª si Leo y Emmi se hubieran conocido personalmente. Despu¨¦s de tantas quejas, decid¨ª hacer la segunda parte, Cada siete olas [m¨¢s de 350.000 ejemplares vendidos hasta febrero en alem¨¢n y que se publicar¨¢ en espa?ol en noviembre].
P. Despu¨¦s de este libro y de su continuaci¨®n, escrito en el mismo estilo que el primero, ser¨¢ dif¨ªcil hacer algo diferente?
R. S¨ª, lo es. El formato de los correos electr¨®nicos est¨¢ descartado porque no se puede repetir hasta la saciedad una idea, aunque haya sido buena. Estoy a¨²n tan involucrado mentalmente con estas dos novelas construidas a base de correos que todav¨ªa no he comenzado a escribir una obra nueva, pero planeo hacerlo este verano. Ser¨¢ seria y entretenida. Versar¨¢ sobre las relaciones humanas, las relaciones de amor. En oto?o publicar¨¦ un libro de car¨¢cter pedag¨®gico, Theo, Antworten aus dem Kinderzimmer (Theo, respuestas de la habitaci¨®n infantil) que trata de las vivencias de un descarado ni?o de tres a?os. Lo escrib¨ª en 1997, y ahora lo he reescrito ahora y hemos introducido algunos cambios de presentaci¨®n.
![El novelista vien¨¦s Daniel Glattauer.](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/3ZP54QZ4B73ZBZCOTDJK5AH3B4.jpg?auth=910a61b2c8ae1dfa38b71d3f6201940f9dd4ab73c9a530f2ae13fe4a45b3fd11&width=414)
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