Una gran redada destapa los secretos de la nueva Cosa Nostra: chats de capos y la inevitable cita de ¡®El Padrino¡¯

La mafia siciliana entr¨® en una fase de invisibilidad despu¨¦s de ser derrotada en los a?os noventa, con cientos de arrestos, y tras la ca¨ªda del clan de los Corleoneses, que hab¨ªa entablado una aut¨¦ntica guerra con el Estado. Desde entonces no es lo que era, pero ah¨ª sigue. De vez en cuando recibe golpes policiales, pero siempre vuelve a empezar: una nueva operaci¨®n de la Fiscal¨ªa de Palermo y los Carabinieri ha revelado que otra vez hab¨ªa vuelto a reorganizarse.

Hac¨ªa m¨¢s de 40 a?os, desde la gran redada del juez Giovanni Falcone en 1984 con 366 arrestos, que dio lugar al gran proceso contra la mafia, que Cosa Nostra no sufr¨ªa un golpe de tales dimensiones: m¨¢s de 1.200 agentes han detenido a 183 personas en la noche de hoy martes, acusados de pertenecer a varias de las m¨¢s importantes familias mafiosas de Palermo, como Porta Nuova, Tommaso Natale-San Lorenzo, Bagheria, Terrasini, Pagliarelli, y Santa Maria di Ges¨´.

Lo m¨¢s interesante es el caudal de informaci¨®n que ha salido a la luz, con numerosas escuchas telef¨®nicas, que permite hacerse una idea de c¨®mo es la nueva Cosa Nostra. Es una combinaci¨®n de lo tradicional y lo m¨¢s moderno: los capos hacen cumbres mafiosas por chat con videollamada, protegidos por programas de encriptaci¨®n, incluso desde prisi¨®n con m¨®viles diminutos, uno de los descubrimientos m¨¢s alarmantes de la investigaci¨®n. De hecho, 33 de las ¨®rdenes de arresto han sido para mafiosos que ya estaban en la c¨¢rcel. Es m¨¢s: el capo de Porta Nuova, Calogero LoPresti, orden¨® castigar a alguien, desde su celda y a trav¨¦s de su m¨®vil encriptado, y luego asisti¨® a la paliza en directo, por videollamada. Los clanes tambi¨¦n compran armas en la dark web y est¨¢n metidos en el negocio las apuestas por internet.

El azar fue decisivo en la investigaci¨®n, pues los Carabinieri descubrieron el chat secreto a trav¨¦s de micr¨®fonos colocados en la casa y en los coches de un capo, Nunzio Serio, reggente de la zona de Tommaso Natale. Resulta que el chat que hab¨ªa utilizado hasta ese momento no funcionaba, y tuvo que poner en marcha uno nuevo. Para ello fue dictando a uno de sus hombres los integrantes del chat original, para que los fuera a?adiendo; de este modo los agentes conocieron qui¨¦nes formaban el grupo. En ese momento organizaban un env¨ªo de droga desde Calabria. El narcotr¨¢fico sigue siendo el gran negocio mafioso, y en ese campo mantiene relaciones de colaboraci¨®n con la ¡®Ndrangheta, la mafia calabresa, que desde hace a?os sustituy¨® a Cosa Nostra como la organizaci¨®n criminal m¨¢s importante y peligrosa.

Lo dem¨¢s es lo de siempre, que resiste asombrosamente: clanes organizados en mandamenti por zonas de la ciudad, s¨®lidas jerarqu¨ªas, reglas de honor, capos que siguen dando ¨®rdenes desde la c¨¢rcel, lecciones a los j¨®venes que empiezan, topos en los tribunales, extorsi¨®n... Los clanes siguen exigiendo el pizzo, el impuesto mafioso a los comerciantes de su zona, y poqu¨ªsimos denuncian. Tambi¨¦n se ha detectado la imposici¨®n de distribuidores de pescado fresco en restaurantes de Sferracavallo, barrio junto al mar, y Mondello, la famosa playa de Palermo.

Por ese apego a la tradici¨®n, en algunas conversaciones se percibe la nostalgia de los buenos tiempos. El capo de Brancaccio, Giancarlo Romano, se lamenta con uno de sus afiliados j¨®venes: ¡°El nivel hoy es bajo, arrestan a uno y se hace arrepentido, arrestan a otro, un nivel m¨ªsero¡­¡±. Le aconseja estudiar para conocer gente importante y hacerse relaciones (¡°conocer¨¢s m¨¦dicos, abogados, los que han mandado en Italia y en Europa¡±), y asombra, aunque no tanto, comprobar como el estereotipo es tan fuerte como la realidad, porque le cita El Padrino como escuela de vida: ¡°Si ves El Padrino ves las relaciones que ten¨ªa, no era el capo absoluto, ¨¦l es muy influyente por el poder que se ha construido a nivel pol¨ªtico en ambientes importantes¡±. Luego sigue un desahogo, porque los actuales clanes han perdido contactos y relevancia, pero nunca pierden la esperanza de volverse a adue?ar de la ciudad de Palermo.

Los particulares valores de los uomini d¡¯onore aparecen en m¨¢s de una conversaci¨®n, como esta asombrosa frase de Gioacchino Badagliacca: ¡°Nunca he cre¨ªdo en una Cosa Nostra con fines de lucro, siempre he pensado que es por nobles principios, para m¨ª esto es Cosa Nostra. Siempre lo he cre¨ªdo desde lo profundo de mi coraz¨®n, y he pasado diez a?os en la c¨¢rcel¡±.

Lo que impresiona, seg¨²n la informaci¨®n facilitada por la Fiscal¨ªa italiana, es la capacidad de resistencia de los clanes frente a la adversidad, y la fidelidad de los mafiosos a su forma de vida. Incluso despu¨¦s de salir de prisi¨®n, tras largas condenas, vuelven a lo que han hecho siempre. De hecho, en los ¨²ltimos a?os hab¨ªan quedado en libertad pesos pesados de Cosa Nostra y su regreso a las calles era visto con inquietud por los investigadores. Ahora se ha confirmado que ten¨ªan motivos para ello.

Tras la ca¨ªda de los Corleoneses no se volvi¨® a reunir la llamada Comisi¨®n provincial, una especie de consejo de administraci¨®n de los grandes clanes, que se dio por definitivamente disuelta. Pero en 2018 una operaci¨®n policial desbarat¨® un nuevo intento de restaurarla. El esquema que ahora emerge es el del reparto tradicional por territorios de cada familia, pero con una colaboraci¨®n de clanes en los grandes negocios y un papel de autoridad superior de los clanes de Palermo sobre los del resto de la provincia. Y dentro de Palermo, los investigadores han constatado que tiene un papel preminente el capo de Porta Nuova, que tendr¨ªa la potestad de dar ¨®rdenes incluso fuera de su territorio.

Rituales y reglas r¨ªgidas

De este modo emerge de nuevo la importancia de los rituales y lo que podr¨ªa llamarse la burocracia mafiosa. Por ejemplo, se ha conocido el caso de un mafioso que dice haber sufrido una afrenta de un individuo de Siracusa, y antes de castigarlo pide permiso al capo de la familia local, que no obstante le responde que tiene que seguir la jerarqu¨ªa, haciendo la solicitud primero en Palermo.

Puede parecer sorprendente, pero un r¨ªgido sistema de reglas es una garant¨ªa frente a las divisiones y las terribles guerras del pasado, que causaron cientos de muertos en los a?os ochenta. En varias conversaciones, los capos son conscientes de que la unidad es esencial. Y para ello se deben resolver los problemas sin que haya tiros, para mantener siempre un perfil bajo.

Para seguir la tradici¨®n un factor importante es formar a los j¨®venes mafiosos, continua fuente de preocupaci¨®n de los veteranos. No parece ser un problema el n¨²mero de candidatos, pues la investigaci¨®n se?ala que Cosa Nostra sigue teniendo un alarmante magnetismo entre los j¨®venes de cada zona que quieren hacer carrera en el crimen. El problema es, m¨¢s bien, formarlos adecuadamente y educarlos en el respeto de las reglas. Se ha reconstruido un caso significativo en el mandamento de Pagliarelli, donde a un joven se le impartieron aut¨¦nticas lecciones de mafia, a cargo de un mafioso experto que se habr¨ªa encargado de ense?arle el oficio, como el modo de exigir y cobrar el pizzo y c¨®mo comportarse en las reuniones con otros mafiosos.

¡°Cosa Nostra sigue ejerciendo su encanto en ciertos ambientes, como en los barrios perif¨¦ricos, donde los j¨®venes tienen pocas alternativas de vida y se identifican con la imagen de poder que a¨²n transmite la mafia¡±, ha explicado el fiscal de Palermo, Maurizio de Lucia, en una rueda de prensa.