El calvario de la 'canarinha'
Dunga, Melo y Kak¨¢ personifican el fracaso de Brasil
El ej¨¦rcito del comandante Dunga regres¨® ayer rendido a Brasil. No tiene quien le quiera y no ha dejado un solo buen recuerdo de su paso por ?frica, nada que ver con su progenitor, el equipo de Parreira en la Copa de 1994, rematado por Bebeto y el genial Romario. La actual canarinha solo se explica cuando va armada y al frente del pelot¨®n avanza Melo mientras Kak¨¢ cierra la fila con la Biblia en la mano pidiendo perd¨®n por sus pecados. "Lo siento, pero me esforc¨¦ mucho para defender a mi pa¨ªs en el Mundial y no se me ha reconocido", dijo Kak¨¢, que dej¨® en el aire su continuidad como internacional a los 28 a?os. Lloran como ni?os los soldados de Dunga mientras la hinchada les abuchea a su paso.
"Me esforc¨¦ mucho por mi pa¨ªs y no se me ha reconocido", se queja el madridista
"?Burro, burro, burro!", le cantaban los aficionados a Dunga a su entrada en el hotel de concentraci¨®n de Brasil. Ni siquiera su adi¨®s le ha eximido de la cr¨ªtica despu¨¦s del mal humor que ha mostrado siempre en la sala de prensa y el banquillo, como si solo se pudiera jugar al f¨²tbol con mala leche y perdonando la vida a los esc¨¦pticos que siempre dudaron de la canarinha desde que se supo la lista de convocados y no viajaban jugadores como Pato, Ganso y hasta El Gaucho Ronaldinho. A rey muerto, rey puesto. Luis Filipe Scolari, conocido como Felip?o; Mano Menezes, el entrenador del Corinthians, e incluso Leonardo se barajan ya como los m¨¢ximos candidatos a sustituir a Dunga.
El seleccionador solo ha encontrado consuelo en sus futbolistas. Julio C¨¦sar le dirigi¨® unas palabras de agradecimiento en la cena de despedida de la Copa en nombre de los internacionales: "Usted consigui¨® armar un equipo de amigos y hermanos. Gracias". "Nunca hab¨ªa ejercido de t¨¦cnico", respondi¨® Dunga, "y agradezco que me hayan dejado trabajar con ustedes. Me siento muy orgulloso". Julio C¨¦sar fall¨® a la salida de un c¨®rner y sus dudas arrastraron al equipo en el partido contra Holanda. Brasil se qued¨® paralizada despu¨¦s de que el mejor portero y la mejor zaga del mundo tomaran un gol tan tonto.
Los muchachos de Dunga se sent¨ªan invencibles, convencidos de su victoria, como si fueran unos templarios a los que la cr¨ªtica fortalec¨ªa y la victoria alimentaba, hasta que Melo cabece¨® hacia el marco de Julio C¨¦sar -la FIFA dio el tanto a Sneijder, que sac¨® la falta-. El gol anunci¨® la tragedia de Brasil. Sneijder marc¨® el segundo de cabeza, ahora con Melo de espectador, y La Naranja Mec¨¢nica pudo contar alguno m¨¢s en las muchas ocasiones que tuvo. La ¨²nica reacci¨®n de la canarinha fue protagonizada obviamente por Melo. El volante, asistente tambi¨¦n en el gol de Robinho, pate¨® a Robben y fue expulsado mientras Kak¨¢ se mostraba impotente ante el marco de Holanda.
Brasil, un colectivo con solo un menor de 25 a?os -Ramires (23)-, era una selecci¨®n concebida solo para obedecer y contragolpear y ahora se le exig¨ªa atacar. Una empresa imposible para un grupo militarizado como el de Dunga, abatido a bal¨®n parado, justo la suerte que supuestamente mejor defend¨ªan.
Holanda, un equipo din¨¢mico, hab¨ªa triunfado a bal¨®n parado contra uno de los gigantes f¨ªsicos del torneo. La selecci¨®n oranje descubri¨® sin querer que los corpulentos zagueros brasile?os ten¨ªan cosquillas.
As¨ª que los m¨¢s valientes, Dunga y Melo, fueron los m¨¢s vulnerables. Al t¨¦cnico le perdi¨® su car¨¢cter cuartelario y al jugador monopolizar la derrota: un pase de gol, un tanto en propia puerta y una expulsi¨®n, lo nunca visto en un Mundial. El calvario lo complet¨® Kak¨¢, representante del jogo bonito con Robinho. Mermado por las lesiones, el madridista pen¨® por el campeonato despu¨¦s de acumular m¨¢s sanciones que goles.
Al igual que en Alemania con Ronaldinho, Brasil acab¨® la segunda Copa del Mundo consecutiva sin un 10. El 10 era Kak¨¢ y el 11 Robinho. Mejor no preguntar por el 9, Luis Fabiano, sustituido por Nilmar. La canarinha no ten¨ªa remedio.
"Ha acabado un ciclo y no precisamente de la manera que habr¨ªamos querido", concluy¨® Silva. La Copa Am¨¦rica y la Copa Confederaciones son poco bot¨ªn para las aspiraciones del pentacampe¨®n mundial.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.