Salm¨®n transg¨¦nico
Quiero hacer una serie de apreciaciones al art¨ªculo de Javier Sampedro del d¨ªa 4 de julio titulado ?Ummm..., qu¨¦ rico gen!
El salm¨®n transg¨¦nico que pretenden comercializar supone una inmensa incertidumbre cient¨ªfica. Existen abundantes datos sobre los efectos en el medio ambiente de la industria acu¨ªcola; es frecuente que un determinado n¨²mero de individuos escape y se cruce con poblaciones naturales, con el riesgo de desplazamiento de estas ¨²ltimas. La esterilidad nunca es efectiva al 100% en las condiciones comerciales. Con los animales modificados gen¨¦ticamente (MG), estos riesgos se multiplicar¨ªan. La sobreexplotaci¨®n de los stocks pesqueros, adem¨¢s de ser causa del incremento de la industria acu¨ªcola, es tambi¨¦n su consecuencia. Muchas de las especies de piscifactor¨ªa se alimentan, directa o indirectamente, con prote¨ªnas producidas a partir de la destrucci¨®n de los bosques del planeta o del expolio de los oc¨¦anos.
La biotecnolog¨ªa en manos de las grandes empresas es una de las peores armas de destrucci¨®n masiva de la soberan¨ªa alimentaria. Una de las herramientas m¨¢s predilectas para su control geoestrat¨¦gico de la alimentaci¨®n. Los organismos MG que ya han sido autorizados est¨¢n causando desastres sociales y econ¨®micos, contaminaciones, da?os a la salud y desaparici¨®n de los modelos de agricultura sostenibles. Por tanto, la soluci¨®n no es crear monstruos voraces capaces de devastar la biodiversidad, sino cambiar los modelos alimentarios de unas sociedades que consumen un exceso de prote¨ªna animal.
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