Algo raro est¨¢ pasando

"Esto ha sido lo m¨¢s grande de la vida", resum¨ªa el domingo un joven cubano con la exageraci¨®n proverbial de esta isla del Caribe, que en este caso no lo era. Se limitaba a expresar lo vivido momentos antes en el cine Yara de La Habana, donde cientos de personas con las caras pintadas de rojo y gualda vieron el partido como si fuera la mejor pel¨ªcula. La sala estall¨® cuando en el minuto 116 marc¨® el gol Iniesta. El 99% de los cubanos all¨ª presentes iban con Espa?a. "Al principio quer¨ªa la victoria de samba, pero he acabado entusiasmado con los gallegos", dec¨ªa otro asistente al espect¨¢culo.

En varios cines de la capital, habilitados desde la segunda fase del Mundial para ver en directo los partidos, se repitieron escenas similares. Entusiasmo y j¨²bilo a raudales, delirio en muchos casos, casi como si se tratara de un ¨¦xito de un equipo deportivo cubano.

La primera impresi¨®n de que algo extra?o y extraordinario estaba sucediendo le lleg¨® a este corresponsal una hora antes del comienzo del partido, cuando recibi¨® la llamada del realizador Juan Carlos Tab¨ªo, codirector de Fresa y Chocolate junto a Tom¨¢s Guti¨¦rrez Al¨¦a. "Oye, esto no es normal: la gente va por la calle con banderas espa?olas y las caras pintadas". Tab¨ªo, que vive en el c¨¦ntrico barrio del Vedado, aplic¨® el mismo sentido del humor de sus pel¨ªculas. "Lo primero que hay que preguntarse es de d¨®nde han sacado las banderas". En fin, mucha alegr¨ªa. Horas despu¨¦s, al hacer balance del ¨¦xito espa?ol en el Mundial de Sud¨¢frica, un locutor de Radio Rebelde opinaba: "Lo m¨¢s relevante es que El Bigot¨®n ha logrado unificar a los de Barcelona y Madrid, que siempre est¨¢n peleaos". Vicente del Bosque quedaba as¨ª inmortalizado como El pacificador.

Gran parte de la comunidad espa?ola en La Habana vio el partido en el hotel Occidental de Miramar. Tambi¨¦n hab¨ªa all¨ª alg¨²n diplom¨¢tico y funcionarios espa?oles, que en estos momentos tramitan a toda prisa los documentos para facilitar la salida hacia Espa?a de un grupo de 52 presos pol¨ªticos cubanos. Como todos los dem¨¢s, sudaron de lo lindo y cuando Espa?a marc¨® el gol de la victoria y el ¨¢rbitro pit¨® el final del partido, uno de ellos coment¨®: "Ahora me voy corriendo a dar los visados".