Los grupos tensan el discurso contra Zapatero ante su debate m¨¢s dif¨ªcil

Todos los grupos parlamentarios tensaron ayer sus discursos en la v¨ªspera del cuarto debate del estado de la naci¨®n de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero como presidente del Gobierno. El m¨¢s dif¨ªcil para ¨¦l, porque llega solo, porque tiene imposible sorprender con nuevos planes y propuestas que eclipsen el fondo del debate y porque en el ¨²ltimo momento se le ha colado con virulencia un invitado inc¨®modo: el Estatuto de Catalu?a.

Que la crisis econ¨®mica y sus consecuencias iban a monopolizar el debate estaba en el gui¨®n desde hace meses. Que ning¨²n grupo apoya global e incondicionalmente la pol¨ªtica econ¨®mica del Gobierno, tambi¨¦n. Y, por supuesto, estaba escrito que el presidente del Gobierno tendr¨ªa que enfrentarse al desgaste que le provoca el giro que en los ¨²ltimos meses ha dado, enterrando promesas como no tocar prestaciones sociales o no acometer reformas impopulares.

Erkoreka dej¨® ayer la puerta abierta a un acuerdo sobre los Presupuestos

"Lo que tiene que hacer Zapatero es no apelar al esfuerzo de los m¨¢s d¨¦biles, no hablar de reformas de pensiones, de reformas laborales, de que los dependientes paguen la crisis o que sean los trabajadores los que se aprietan el cintur¨®n. Lo que tiene que hacer Zapatero es ver qu¨¦ exige a los que m¨¢s tienen, porque hasta ahora el esfuerzo que les ha pedido es cero", asegur¨® ayer Joan Herrera (ICV), poniendo voz al divorcio irreparable del PSOE con la izquierda minoritaria.

Con esos peque?os grupos de la izquierda Zapatero no puede contar, porque hoy volver¨¢n a esgrimir la pancarta de la huelga general del 29 de septiembre y la cr¨ªtica a todas las medidas de recorte impulsadas por el presidente en los ¨²ltimos meses.

El ¨²nico alivio para el presidente es que hoy y ma?ana no habr¨¢ votaciones. Hasta la pr¨®xima semana no se someten al Pleno las propuestas de resoluci¨®n y, en todo caso, no tienen m¨¢s valor que el simb¨®lico y pol¨ªtico. A Zapatero le puede socorrer su capacidad acreditada para sobreponerse en las r¨¦plicas, pero no las propuestas, porque no hay posibilidad de incrementar ni un euro el gasto y porque ha perdido parte de su credibilidad. Por ejemplo, Joan Ridao (ERC) se mostr¨® ayer "esc¨¦ptico" ante la voluntad de pacto de Zapatero, porque ha demostrado que "promete mucho y cumple muy poco".

El presidente puede mirar a los partidos nacionalistas, pero tampoco le ser¨¢ f¨¢cil. As¨ª, el PNV se encarg¨® de tensar su discurso y elevar el precio de su apoyo. Su portavoz, Josu Erkoreka, asegur¨®: "El Gobierno de Zapatero nos genera desconfianza y falta de credibilidad". "La inacci¨®n, la ausencia de decisiones en momentos clave o el uso y el abuso de la geometr¨ªa variable a costa de una mayor¨ªa estable, han marcado esta etapa", a?adi¨®.

No obstante, Erkoreka dej¨® ayer mismo la puerta abierta a un acuerdo sobre los Presupuestos, aunque sea con el alto precio que lleva aparejado ser la ¨²nica opci¨®n posible despu¨¦s de que CiU comunicara a Zapatero que no puede contar con ellos. "Siempre estamos dispuestos a dialogar y, si es posible, a pactar. Y somos conscientes de la gravedad de la situaci¨®n econ¨®mica. En ocasiones, tenemos la sensaci¨®n de que incluso somos m¨¢s conscientes que el propio presidente del Gobierno", dijo.

Con los partidos catalanes, las posibilidades de entendimiento han disminuido porque en el debate ha irrumpido con fuerza su malestar por la sentencia del Estatuto. El malestar se ha hinchado por la proximidad de las elecciones auton¨®micas catalanas y Zapatero deber¨¢ lidiar hoy con las cr¨ªticas de CiU, ERC e ICV por la sentencia del Constitucional, la exigencia de recuperar por otra v¨ªa lo mutilado en la sentencia y la incomodidad de los 25 diputados del PSC. Estos ¨²ltimos est¨¢n entre la exigencia de Jos¨¦ Montilla y su inter¨¦s por capitalizar el malestar contra la sentencia, la estrategia electoral en Catalu?a, su obligada fidelidad en el Congreso al proyecto de Zapatero y hasta la presencia destacada de ministros del PSC.

En el ¨²ltimo debate en el pleno, Josep Antoni Duran (CiU) ya pidi¨® a Zapatero que, una vez que culmine las reformas, convoque elecciones. Y ahora, con la sentencia del Estatuto ya conocida, su distancia ser¨¢ a¨²n mayor. Los tres partidos catalanes se tantean para negociar una propuesta de resoluci¨®n com¨²n sobre el Estatuto, aunque a favor de Zapatero juega la divisi¨®n de las tres formaciones por el tacticismo electoral. El Estatuto ha alterado el gui¨®n del debate y lo ha hecho en contra de Zapatero.

Y el PP, a lo suyo, ya se esforz¨® ayer en poner el foco en Zapatero, evitando que la controversia final del debate sean las propuestas que pudiera presentar Mariano Rajoy. Si las presenta, porque el PSOE tambi¨¦n le est¨¢ esperando para arremeter contra ¨¦l por su falta de alternativa.