El rescate de la ciudad del hierro
La Junta declara Lugar de Inter¨¦s Industrial el poblado de Alquife
En 1996, tras el derrumbe del d¨®lar y la baja rentabilidad del hierro, cerraban las Minas de Alquife, el motor econ¨®mico de la zona norte de la provincia de Granada. Se trataba de la mayor explotaci¨®n de este tipo en Espa?a, que se hab¨ªa convertido en la principal exportadora de hierro desde el pa¨ªs en los siglos XIX y XX.
Hoy las instalaciones de las minas, despu¨¦s de 14 a?os de abandono, se asemejan a un paisaje tras una tragedia nuclear. Apenas el viento acaricia las casas de lo que fuera un pueblo rico convertido en un fantasma, tomado por los perros y por los roedores, que campan por las antiguas v¨ªas del tren y la vieja estaci¨®n.
La Junta, ante la situaci¨®n de abandono del complejo, visitado de manera furtiva por cientos de curiosos que lo consideran un lugar de culto, ha decidido inscribirlo en el Cat¨¢logo General del Patrimonio Hist¨®rico Andaluz, con la tipolog¨ªa de Lugar de Inter¨¦s Industrial.
Un grupo alem¨¢n pretende desarrollar proyectos de ocio en la zona
La historia de la comarca est¨¢ estrechamente ligada a la historia de las minas. Ya en 1916 en la localidad de Alquife figura un barrio de las minas en el que se alojaban algunos de los empleados de la Blairds Mining y sus familias. A comienzos del siglo XX, como explica el investigador Francisco Jos¨¦ S¨¢nchez, "existi¨® escasez de viviendas y carest¨ªa de lugares para alquilar en la localidad, como recogen las actas de la corporaci¨®n municipal". A mediados de los a?os cincuenta del pasado siglo, en pleno auge de la exportaci¨®n del hierro, la Compa?¨ªa Andaluza de Minas construy¨® junto a la explotaci¨®n un poblado. Cientos de viviendas, una iglesia, una escuela y una estaci¨®n de ferrocarril que llegaba hasta el centro de la localidad lo convert¨ªan en uno de los lugares m¨¢s pr¨®speros y con mejores expectativas del norte de Granada. Despu¨¦s lleg¨® una gran crisis y el desplome del d¨®lar acab¨® con la fiebre del hierro. El poblado qued¨® abandonado al igual que muchas localidades de la comarca, que sufrieron una despoblaci¨®n sin precedentes.
"Aquello supuso un palo enorme para Alquife, que se qued¨® vac¨ªo. El d¨®lar estaba muy bajo y no paraban de acumularse los problemas. Las instituciones no quisieron seguir apostando por las minas, que resultaban muy deficitarias. De un d¨ªa para otro un pueblo entero se qued¨® vac¨ªo, abandonado. Visitarlo hoy sigue siendo sobrecogedor, como si el tiempo se hubiera parado mucho antes", explic¨® el alcalde de Alquife, Benito Ruiz, que no se atreve a celebrar la declaraci¨®n de las minas por las consecuencias que pueda tener para el futuro del municipio. "Aqu¨ª llevamos muchos a?os de promesas incumplidas. Ahora las minas las han comprado unos alemanes que tienen diferentes proyectos. Algunos de ellos generar¨ªan muchos puestos de trabajo. Esperemos que esta declaraci¨®n no haya llegado en el peor momento", sentenci¨®.
Lo cierto es que el proyecto de los empresarios alemanes tiene diferentes vertientes. Aunque se niegan a hablar de ¨¦l de manera oficial, incluye una zona de ocio que podr¨ªa utilizar las minas como reclamo. Tambi¨¦n se plante¨® un campo de golf y la conversi¨®n de algunos edificios del poblado en hoteles. Sin embargo, en el pueblo siguen teniendo la esperanza de que salga adelante un proyecto de embotelladora de agua mineral en la explotaci¨®n minera, donde existe una laguna de aguas subterr¨¢neas de valor medicinal.
"Es muy importante que se hayan protegido las minas y el poblado. Se trata de un lugar valios¨ªsimo que puede y tiene que ser un importante reclamo tur¨ªstico para la zona. Los proyectos que hay presentados se podr¨¢n llevar a cabo siempre que sean respetuosos con un lugar que es patrimonio hist¨®rico andaluz", explic¨® Pedro Benzal, delegado de Cultura de la Junta.
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