El metro llega, por fin, al Carmel

Hoy los vecinos del Carmel y el consejero de Pol¨ªtica Territorial, Joaquim Nadal, podr¨¢n decir, como Robert Graves: "Adi¨®s a todo eso". "Eso" es la obra m¨¢s compleja que se ha vivido en Barcelona: la prolongaci¨®n de la l¨ªnea 5 desde Horta hasta Vall d'Hebron. Compleja por los hechos ocurridos en la noche del 27 de enero de 2005. Ese d¨ªa, cedi¨® el terreno y acab¨® por engullir un edificio entero. No hubo v¨ªctimas, en el sentido de heridos o muertos, pero s¨ª una cantidad considerable de heridas morales: gentes que se quedaron sin casa y, al perderla, perdieron tambi¨¦n sus recuerdos: fotograf¨ªas, elementos f¨ªsicos que refuerzan la memoria personal y familiar. Otros, se vieron amenazados en su propio domicilio, el ¨²ltimo reducto de la intimidad, hasta el punto de tener que abandonarlo durante d¨ªas y semanas para recalar en hoteles m¨¢s o menos acondicionados, pero impersonales y, sobre todo, provisionales. Aquella provisionalidad acaba ahora de modo definitivo: la obra que les expuls¨® de su casa, su calle, su barrio ha terminado. Y ahora el barrio, la calle, la casa est¨¢n m¨¢s integrados en la ciudad que antes del hundimiento.

Algunos puntos del trazado bajan hasta 104 metros de profundidad

Los t¨¦cnicos del Departamento de Pol¨ªtica Territorial han entregado esta semana a Joaquim Nadal el informe n¨²mero 172 sobre la evoluci¨®n de las obras del t¨²nel del Carmel. Uno por semana y sin fallar. "No nos ha quitado ojo de encima", comentaba no hace mucho el ge¨®logo Jordi Jubany, que ha pasado horas y horas analizando el subsuelo y la evoluci¨®n de los trabajos y las hipot¨¦ticas repercusiones en la superficie y hablando con vecinos para despejar sus preocupaciones.Las cifras para la historia del socav¨®n de las obras del metro en el Carmel son las que son: 1.241 vecinos tuvieron que ser realojados en hoteles; 241 comercios se vieron afectados y alguno de ellos no reabri¨® tras el desastre. El coste de las indemnizaciones sum¨® 67 millones de euros, de los que el Gobierno catal¨¢n ha conseguido que 51 millones los abonaran las aseguradoras. La aportaci¨®n del Gobierno central fue de 2,3 millones. El importe de la obra ha terminado por costar 310 millones de euros (206 millones m¨¢s de los 104 millones presupuestados).

La longitud de la obra es de 2,1 kil¨®metros, m¨¢s otros 476 metros de instalaciones para mantenimiento (dep¨®sito de Sant Gen¨ªs, 365 metros) y cola de maniobras (en Vall d'Hebron, 11,76 metros). El trazado discurre siempre bajo suelo a una profundidad que oscila entre los 15 y los 104 metros. Esto se debe a la orograf¨ªa del terreno: el Carmel y la Teixonera se elevan muy por encima del punto de partida de esta l¨ªnea: la plaza de Ibiza, en Horta. Pero los trenes no pueden circular con grandes pendientes (salvo los de monta?a, para los que construyen anclajes tipo cremallera). El resultado es que se mantiene la cota en la que se instalan las v¨ªas, pero la profundidad aumenta cuando se cruza, como en este caso, por las estribaciones monta?osas de la ladera de Collserola.

La prolongaci¨®n de la l¨ªnea incluye tres nuevas estaciones: El Carmel, El Coll/La Teixonera y Vall d'Hebron. En esta ¨²ltima se produce la interconexi¨®n entre la l¨ªnea 5 y la 3. La estaci¨®n del Carmel, contigua al lugar donde se produjo el hundimiento se halla a una profundidad de 43 metros. Tiene accesos por la plaza de Pastrana y la calle de Llobreg¨®s. Dispone de ascensores, cintas transportadoras y escaleras mec¨¢nicas. La de El Coll/ La Teixonera es la m¨¢s profunda: 73,53 metros desde la superficie en la calle de Batet. Los usuarios podr¨¢n entrar y salir de ella con ascensores de gran capacidad como los que ya funcionan en el tramo operativo de la l¨ªnea 9. La estaci¨®n de Vall d'Hebron, la m¨¢s compleja ya que la l¨ªnea discurre bajo la 3 preexistente, se halla a 42 metros bajo la superficie y tiene accesos por los dos lados de las rondas. La previsi¨®n es que este nuevo tramo sea utilizado por unas 30.000 personas al d¨ªa.

El consejero de Pol¨ªtica Territorial, Joaquim Nadal, recuerda que el metro es una demanda muy antigua del Carmel: "Estamos hablando de una de las reivindicaciones hist¨®ricas en un barrio nacido de la autoconstrucci¨®n y con fuertes componentes de clase obrera. Desde ahora, tienen m¨¢s razones para considerarse vecinos de pleno derecho de Barcelona".

Nadal reconoce que el hundimiento del t¨²nel fue, para ¨¦l personal y pol¨ªticamente, "uno de los momentos m¨¢s dif¨ªciles de mi vida. Pero aguant¨¦ al pie del ca?¨®n y ahora me siento reconfortado".