El m¨¢s grande y el m¨¢s pol¨¦mico

La leyenda negra de Michael Schumacher sigue creciendo. Desde su regreso a las pistas, esta temporada, el alem¨¢n, de 41 a?os, ha sido investigado y sancionado en varias ocasiones, sumando nuevos episodios al largo historial de infracciones que han convertido al piloto m¨¢s laureado en el m¨¢s pol¨¦mico tambi¨¦n. Sus siete t¨ªtulos mundiales en la f¨®rmula 1 le colocan en un pedestal como uno de los mejores de siempre, si no como el mejor. Pero su agresiva actitud, muchas veces incluso antirreglamentaria, obliga a cuestionar esta premisa porque a lo largo de su carrera se ha acreditado tambi¨¦n como uno de los competidores m¨¢s peligrosos.

Aunque en este campeonato fue denunciado en la segunda carrera por Red Bull por haber seguido marcando tiempo con banderas rojas en la pista y fue sancionado en Montecarlo por adelantar a Fernando Alonso en la ¨²ltima curva cuando el coche de seguridad acababa de abandonar la pista, la peor maniobra la realiz¨® el pasado domingo en Hungr¨ªa.

Schumacher ocupaba la d¨¦cima posici¨®n y era acosado por su ex compa?ero de equipo Rubens Barrichello, al que Ferrari releg¨® siempre a la condici¨®n de segund¨®n y escudero suyo. El brasile?o intent¨® adelantarle, pero en la recta lanz¨® su ataque definitivo y su Williams igual¨® y super¨® la posici¨®n del Mercedes del alem¨¢n. Entonces, Schumacher comenz¨® a obstruirle el paso, encerr¨¢ndole contra el muro. Barrichello pudo concluir su maniobra solo cuando se acab¨® el muro y encontr¨® espacio fuera de la pista. Aquello pudo ser una tragedia.

Los comisarios asumieron la peligrosidad de la irregular maniobra de Schumacher y le sancionaron con 10 puestos en la parrilla de salida de la pr¨®xima carrera. "Si pas¨®, ten¨ªa espacio. Yo no voy a regalar nada a nadie", dijo despu¨¦s en una actitud chulesca. Pero ayer rectific¨®: "A¨²n ten¨ªa el fuego de la acci¨®n. Tras ver las im¨¢genes, creo que los comisarios llevaban raz¨®n. La maniobra fue demasiado dura. Quer¨ªa pon¨¦rselo dif¨ªcil, pero no pretend¨ªa ponerle en peligro". Una declaraci¨®n contra su voluntad, para calmar los ¨¢nimos, pero que no enga?a a nadie. El Schumacher real lo defini¨® ayer el diario Bild afirmando: "Michael es una verg¨¹enza para la naci¨®n".

Cuando se retir¨®, en 2006, parecieron olvidarse algunos de sus episodios m¨¢s oscuros. Pero hoy el recuerdo de lo que ocurri¨® en 1994 y 1997 es inevitable. En Adelaida, en la ¨²ltima carrera del 94, Schumacher sufri¨® un despiste del que sali¨® con el coche tocado, pero luego volvi¨® a la pista y arroll¨® literalmente en una curva a Damon Hill, causando una colisi¨®n que oblig¨® al abandono de los dos coches. El alem¨¢n se asegur¨® as¨ª el t¨ªtulo por un punto. En 1997, el Mundial acab¨® en Jerez y el t¨ªtulo se lo jugaban Schumacher y Jacques Villeneuve. El germano intent¨® echar de la pista a su rival, pero no solo no lo consigui¨®, sino que tuvo que abandonar y perdi¨® la corona. El Consejo Mundial resolvi¨® que hab¨ªa causado el accidente de forma deliberada y le excluy¨® del campeonato.