El Rey telefonea a Mohamed VI para rebajar la tensi¨®n con Rabat

Don Juan Carlos ha querido apagar el fuego entre Espa?a y Marruecos antes de que vaya a m¨¢s. Por eso llam¨® ayer al rey Mohamed VI para desactivar la tensi¨®n en la relaci¨®n bilateral que surgi¨® hace casi un mes.

Ambos coincidieron, durante la conversaci¨®n, en que los "malentendidos o peque?os problemas" entre los dos pa¨ªses no deben "perturbar el excelente clima" de la relaci¨®n, seg¨²n indicaron fuentes de la Casa del Rey.

Poco despu¨¦s, la agencia de prensa oficial marroqu¨ª MAP corrobor¨® la informaci¨®n en t¨¦rminos muy parecidos aunque Rabat prefiere hablar de "incidentes" en lugar de "malentendidos". Se?ala adem¨¢s que ambos jefes de Estado "han acordado reunirse pr¨®ximamente de manera informal".

El Gobierno espa?ol tem¨ªa que la tirantez fuese a m¨¢s durante el mes del Ramad¨¢n

Don Juan Carlos se ofreci¨®, el martes, a Jos¨¦ Lu¨ªs Rodr¨ªguez Zapatero a hacer una gesti¨®n para tratar de abortar la incipiente crisis con Marruecos y su hu¨¦sped acept¨® con agrado. El Rey recibi¨® al presidente en el palacio de Marivent (Mallorca).

Tras la cascada de comunicados -cinco en 24 d¨ªas- del Ministerio de Exteriores marroqu¨ª en protesta por las supuestas agresiones racistas de las fuerzas de seguridad espa?olas en las fronteras de Ceuta y, sobre todo, de Melilla, el Gobierno espa?ol tem¨ªa que la tirantez fuese a m¨¢s durante el mes del Ramad¨¢n (ayuno isl¨¢mico) que empieza hoy en Marruecos.

A¨²n as¨ª, el Ejecutivo no acababa de comprender, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, lo que de verdad subyac¨ªa tras los reproches de Rabat. Los incidentes fronterizos no son nuevos, especialmente en Melilla, pero ahora revest¨ªan especial importancia a ojos de Marruecos.

Los Gobiernos socialistas -no as¨ª los que encabez¨® Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar (entre 1996 y 2004)- han recurrido con cierta frecuencia al monarca para que haga llegar mensajes o que ayude a "apagar incendios" con Hassan II y, desde 1999, con su hijo Mohamed VI.

Pero lo han hecho generalmente cuando el fuego estaba adquiriendo "grandes proporciones y no cuando era embrionario, como sucedi¨® ayer", recuerda un diplom¨¢tico.

Habr¨¢ que ver ahora qu¨¦ consecuencias pr¨¢cticas tiene sobre el terreno la buena sinton¨ªa telef¨®nica de ambos monarcas. Esta madrugada empieza, en principio, el boicoteo comercial de Melilla por parte de varias asociaciones de Nador y del Comit¨¦ Nacional para la Liberaci¨®n de Ceuta y Melilla con sede en Tetu¨¢n.

Mounaim Chaouki, que encabeza la coordinadora que agrupa a esas asociaciones, reiter¨® que sobre las seis de la madrugada (hora peninsular espa?ola) ¨¦l y unos 60 o 70 militantes se apostar¨¢n en Beni Enzar, el puesto fronterizo, para "impedir la entrada en Melilla del pescado fresco" procedente de Marruecos. A partir del lunes su boicoteo abarcar¨¢ a los materiales de construcci¨®n.

En otros puntos de Marruecos estaban tambi¨¦n en preparaci¨®n concentraciones ante edificios diplom¨¢ticos o culturales espa?oles "en repulsa por las actuaciones racistas".

La tensi¨®n con Marruecos ha puesto de manifiesto el talante muy distinto del Partido Popular (PP) en las dos ciudades aut¨®nomas. El vicepresidente de Melilla, Miguel Mar¨ªn, record¨® que su Ayuntamiento llevaba a?os denunciando los incidentes en la frontera. "El principal responsable" de lo que all¨ª sucede es Zapatero que ha sido incapaz de atajarlo.

En Ceuta, en cambio, Yolanda Bel, la portavoz del Ayuntamiento que dirige Juan Jes¨²s Vivas, expres¨®, en declaraciones a la agencia Europa Press, su apoyo a la "intachable labor" de las fuerzas de seguridad, pero tambi¨¦n la "confianza" que le inspiran las gestiones que efect¨²a el Gobierno espa?ol. "Lealtad institucional", recalc¨®.

Ignacio Cosid¨®, portavoz del Grupo Popular en el Congreso para temas relacionados con el Ministerio del Interior, pidi¨® ayer la comparecencia del titular de esa cartera, Alfredo P¨¦rez Rubalcaba. Pretende que el ministro explique las "agresiones" que han padecido en Melilla los polic¨ªas espa?oles, especialmente las "agentes femeninas".