Los cient¨ªficos alertan de la crisis sanitaria por c¨¢ncer en pa¨ªses pobres

Cuando llegar a los 50 a?os es un logro, como en muchos pa¨ªses del ?frica subsahariana, una t¨ªpica enfermedad de viejos puede pasar desapercibida para la poblaci¨®n y los responsables sanitarios. Pero el c¨¢ncer -o, mejor dicho, los c¨¢nceres- no es un desconocido para los m¨¢s pobres. De los 12 millones de casos que se producen cada a?o en el mundo, seg¨²n la Agencia Internacional para la Investigaci¨®n en C¨¢ncer (IARC, por sus siglas en ingl¨¦s), el 60% de los diagn¨®sticos se dan en las regiones de ingresos medios o bajos. Y el porcentaje de fallecimientos es superior: el 64% de los ocho millones de muertes que ocurren en el mundo por tumores.

No hay infraestructuras, planes, ni medios t¨¦cnicos ni humanos para prevenir y tratar la enfermedad. Entre otras cosas, porque solo el 5% del dinero que se emplea en el c¨¢ncer se destina a los pa¨ªses que re¨²nen el 80% de los casos, seg¨²n Julio Frenk, autor de un art¨ªculo publicado esta semana en The Lancet. "Necesitamos centros para el diagn¨®stico temprano, doctores y enfermeras preparados y mecanismos de seguimiento", alerta el doctor Josep Saba, del grupo CanTreat.

Los programas de ayuda internacional no incluyen fondos para oncolog¨ªa

Los tratamientos antitumorales son a¨²n m¨¢s caros que los del sida

La situaci¨®n, de crisis sanitaria, adem¨¢s, solo va a empeorar, advierten los expertos de la Uni¨®n Internacional Contra el C¨¢ncer (UICC), que est¨¢ reunidos en la ciudad china de Shenzhen.

Porque, al contrario que otras dolencias, el c¨¢ncer va a ir a m¨¢s. As¨ª, se calcula que en 2020 los pa¨ªses pobres sufrir¨¢n el 70% de la carga sanitaria del c¨¢ncer (un indicador que combina casos, muertes y a?os de enfermedad) frente a aproximadamente el 50% del principio del siglo XXI. Y que, en 2050, en ellos se d¨¦ el 75% de las muertes por esta enfermedad, seg¨²n un informe del grupo CanTreat, una coalici¨®n de sociedades cient¨ªficas y universidades, y que cuenta con el apoyo de la fundaci¨®n de Lance Armstrong.

El presidente de la Sociedad espa?ola de Oncolog¨ªa M¨¦dica (SEOM), Emilio Alba, explica por qu¨¦ se va a producir ese aumento del c¨¢ncer: "Antes, en los pa¨ªses pobres la gente se mor¨ªa por enfermedades infecciosas, pero en cuanto se separa el agua de beber de la fecal, y llegan las vacunas, esta situaci¨®n cambia. Se evitan muertes de personas j¨®venes, y el c¨¢ncer es una enfermedad de mayores, sobre todo a partir de los 50 a?os".

Adem¨¢s, hay dos factores que est¨¢n en auge en los pa¨ªses pobres que son causa directa del c¨¢ncer: "El tabaquismo y la obesidad". Con esta combinaci¨®n, el incremento est¨¢ servido.

L¨®gicamente, lo que CanTreat pretende no es asustar, sino que haya una reacci¨®n. Y ponen el ejemplo de c¨®mo la ONU ha afrontado el sida, con una agencia (Onusida) y financiaci¨®n (el Fondo Mundial). La situaci¨®n de partida es tan mala que recuerda a la de hace 10 a?os con respecto al VIH, cuando en los pa¨ªses ricos se hablaba ya de enfermedad cr¨®nica y en los dem¨¢s no hab¨ªa tratamientos. Por ejemplo, mientras en EE UU la tasa de curaci¨®n del c¨¢ncer de mama es del 84%, en Gambia es del 12%. O que el 85% de los ni?os con un tumor se recupera en el mundo rico, frente al 15% en los otros pa¨ªses. El resultado es que en los pa¨ªses desarrollados m¨¢s del 50% de los pacientes con c¨¢ncer se cura. En el resto, el 80% es diagnosticado cuando nada se puede hacer. La soluci¨®n pasa por un abrodaje mundial. "Este tema tiene que ser tratado en la ONU", ha dicho el asesor de la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS), Andreas Ullrich.

La primera batalla es la falta de fondos. De los 21.000 millones de d¨®lares (m¨¢s de 16.000 millones de euros) de ayuda exterior dedicada a programas sanitarios cada a?o, seg¨²n la OMS, no hay ni una partida espec¨ªfica para c¨¢ncer. Y, adem¨¢s, si la hubiera ser¨ªa dif¨ªcil de usar: en ?frica y en menor medida en Latinoam¨¦rica y el sudeste asi¨¢tico no hay planes estatales contra la enfermedad.

Otro de los futuros caballos de batalla para dar una respuesta al c¨¢ncer es -de nuevo la situaci¨®n se parece a la del sida- el acceso a los medicamentos. Con la diferencia de que estos son todav¨ªa m¨¢s onerosos y que no bastan. Contra el VIH se ha llegado a una soluci¨®n en la que tres pastillas al d¨ªa sirven para empezar. En el c¨¢ncer muchas terapias no son orales, sino que hay que ponerlas por v¨ªa intravenosa, como la quimioterapia. O, m¨¢s dif¨ªcil y costoso a¨²n, las suministran complicadas m¨¢quinas de radioterapia.