Wikileaks y su fundador, contra las cuerdas
El Pent¨¢gono investiga a Assange por espionaje, y Suecia, por acoso sexual
Julian Assange, fundador del portal web de publicaci¨®n de documentos clasificados Wikileaks, est¨¢ bajo asedio. Mientras el Pent¨¢gono investiga la filtraci¨®n de miles de informes secretos sobre la guerra de Afganist¨¢n y prepara una demanda por espionaje, Assange est¨¢ desde ayer en la mira de la polic¨ªa sueca por una acusaci¨®n de acoso sexual. La fiscal¨ªa de ese pa¨ªs lleg¨® incluso a emitir una orden de captura contra el periodista por un cargo de violaci¨®n, que fue retirada horas despu¨¦s. El caso, envuelto en la bruma, sigue abierto.
Dos mujeres hab¨ªan demandado a Assange por dos incidentes separados ocurridos esta semana, cuando Assange se hallaba en Estocolmo, donde anunci¨® la colaboraci¨®n de su organizaci¨®n con el Partido Pirata, que aboga por liberalizar las leyes sobre derechos de autor. En pocas horas se retir¨® la orden de detenci¨®n. "La fiscal jefe Eva Finn¨¦ ha llegado a la conclusi¨®n de que Julian Assange no es sospechoso de violaci¨®n", dijo sucintamente la fiscal¨ªa sueca en su p¨¢gina web. La investigaci¨®n por acoso contin¨²a.
"Se nos advirti¨® que esper¨¢ramos juegos sucios", asegura la web de filtraciones
EE UU sostiene que la difusi¨®n de los papeles afecta a la seguridad nacional
Assange rechaz¨® tajantemente las acusaciones. Sus colaboradores tacharon las demandas de "campa?a de desprestigio", sin identificar qui¨¦n podr¨ªa hallarse detr¨¢s de ella. En el perfil de Twitter de Wikileaks, publicaron: "Se nos advirti¨® para que esper¨¢ramos juegos sucios. Aqu¨ª tenemos el primero". Posteriormente a?adieron en su blog oficial: "Estamos muy preocupados por la gravedad de estas alegaciones. Tenemos una buena opini¨®n de Julian y ¨¦l tiene nuestro total apoyo".
La que no va a desaparecer es la posibilidad de una demanda en EE UU contra Assange y sus colaboradores por la filtraci¨®n de informaci¨®n militar clasificada. Fuentes del Pent¨¢gono confirmaron esta semana que est¨¢n investigando si Assange incit¨® al soldado Bradley Manning a que, aprovechando su posici¨®n de analista de inteligencia del Ej¨¦rcito en Irak, robara miles de documentos clasificados de Defensa y del Departamento de Estado.
Una de las personas que est¨¢ colaborando en la investigaci¨®n, el hacker Adri¨¢n Lamo, que delat¨® a Manning, inform¨® a este diario de que, en una serie de conversaciones online, el soldado le hab¨ªa revelado que ten¨ªa contacto permanente con Assange y que ¨¦ste le hab¨ªa indicado qu¨¦ documentos podr¨ªa ser interesante sustraerle al Gobierno norteamericano. Seg¨²n esta versi¨®n, Assange le habr¨ªa facilitado adem¨¢s a Manning un acceso prioritario a los servidores de Wikileaks.
Para los abogados del Pent¨¢gono, que mantiene a Manning bajo arresto, este testimonio ser¨ªa suficiente para acusar a los gestores de la p¨¢gina web de conspiraci¨®n o espionaje. Contactados por este diario, diversos portavoces de Wikileaks han rechazado hacer comentarios, alegando que es pol¨ªtica de esa organizaci¨®n no ofrecer ning¨²n tipo de informaci¨®n sobre sus supuestas fuentes.
Wikileaks public¨® en julio 76.000 documentos clasificados, en su mayor¨ªa informes detallados de operaciones de combate e informes de inteligencia, que, seg¨²n el Gobierno de Barack Obama, han puesto en riesgo las vidas de cientos de informantes del Pent¨¢gono en Afganist¨¢n. Varias ONG tambi¨¦n ha deplorado que la p¨¢gina web haya publicado nombres de colaboradores locales cuyas vidas ahora est¨¢n en peligro por las probables represalias de los talibanes y Al Qaeda. "Assange puede tener ya sangre en sus manos", dijo en julio el jefe del Estado Mayor Conjunto, almirante Mike Mullen.
El secretario de Defensa, Robert Gates, pidi¨® entonces ayuda al FBI en la investigaci¨®n del caso. El 16 de agosto el abogado del Pent¨¢gono Jeb Charles Johnson envi¨® una carta a un representante legal de Wikileaks en EE UU, Timothy Matusheski, en la que se?alaba que el Gobierno considera que la organizaci¨®n ha violado la legislaci¨®n vigente.
"Wikileaks est¨¢ en posesi¨®n de parte de la propiedad del Gobierno de EE UU, incluidos documentos clasificados e informaci¨®n valiosa para la seguridad nacional cuya publicaci¨®n no ha sido autorizada", se asegura en la carta. "Es m¨¢s, en opini¨®n del Departamento de Defensa, Wikileaks obtuvo ese material en circunstancias que constituyen una violaci¨®n de la legislaci¨®n de EE UU, y mientras Wikileaks siga en posesi¨®n de ese material, la violaci¨®n de la ley sigue produci¨¦ndose".
Wikileaks ha advertido de que tiene la intenci¨®n de publicar otros 15.000 informes en los pr¨®ximos d¨ªas. En la carta enviada por el abogado del Pent¨¢gono al letrado de Wikileaks se revela, adem¨¢s, que los gestores de la p¨¢gina web le han ofrecido al Ej¨¦rcito revisar los documentos conjuntamente para evitar revelaciones peligrosas para los confidentes afganos. Pero el Departamento de Defensa se ha negado.
Papeles peligrosos
- 76.000 documentos. Wikileaks difundi¨® el 25 de julio casi 76.000 documentos, filtrados por un soldado estadounidense, que revelan la colaboraci¨®n entre los servicios secretos de Pakist¨¢n y de Ir¨¢n con los talibanes, las operaciones encubiertas de la OTAN y los ataques en los que murieron centenares de civiles afganos. Tambi¨¦n hay comunicaciones oficiales de EE UU sobre diplom¨¢ticos y gobernantes extranjeros.
- Confidentes. En los informes aparecen los nombres de colaboradores afganos de las tropas internacionales, con gran peligro para sus vidas.
- Investigaci¨®n. El Pent¨¢gono abri¨® una investigaci¨®n criminal horas despu¨¦s de publicarse los documentos en Wikileaks.
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