Guardiola recupera la iniciativa

Pep Guardiola pidi¨® dos cosas a la directiva presidida por Sandro Rosell desde junio: el fichaje de Cesc o, de lo contrario, que no se traspasara a Tour¨¦ Yaya y, por otra parte, que se solucionara la situaci¨®n de Ibrahimovic, circunstancia que significaba ceder o traspasar al sueco, salvo que el Barcelona encontrara una tercera v¨ªa. Cuando faltan ocho d¨ªas para que se cierre el mercado, Cesc contin¨²a en el Arsenal, Tour¨¦ ha debutado con el Manchester City e Ibra sigue en el Camp Nou.

El Bar?a ha ingresado a cambio 30 millones de euros por Tour¨¦, se ha ahorrado los 40 que ofreci¨® por Cesc y percibi¨® 15 por devolver a Chigrinski al Shakthar Donetsk con el argumento de que entonces necesitaba liquidez para pagar la n¨®mina de los jugadores, decisi¨®n que fue asumida de mala gana por el t¨¦cnico.

Mascherano es la alternativa a Tour¨¦, pero el Liverpool lo tasa muy alto

El club asume que el ariete se quede si cambia de papel y acepta ser uno m¨¢s

As¨ª las cosas, una vez cumplimentada la concesi¨®n de un cr¨¦dito de 150 millones y de que el balance econ¨®mico de altas y bajas le es favorable, el Bar?a dispone ahora de dinero para apostar por una contrataci¨®n importante, al margen de las dos ya formalizadas: la de Adriano, que cost¨® 9,5, millones, y la de Villa, 40, cuya operaci¨®n fue cerrada por el anterior presidente, Joan Laporta.

Desde la incorporaci¨®n de Andoni Zubizarreta como director deportivo, a Guardiola le han ofrecido varias opciones desde el club. La m¨¢s medi¨¢tica fue la de ?zil, contratado finalmente por el Madrid. Ocurre que entonces no se hab¨ªa cerrado a¨²n la de Cesc, prioritaria para ¨¦l.

A la directiva le ha faltado operatividad y jerarqu¨ªa para cerrar la carpeta de la plantilla o, al menos, para zanjar el debate medi¨¢tico y dejar clara la posici¨®n del club. El Bar?a ha perdido la batalla de la propaganda y ha dado la sensaci¨®n de que exist¨ªan diferencias entre Guardiola y Rosell. Al equipo del presidente le ha costado m¨¢s arrancar que al del entrenador y el club no siempre ha protegido al conjunto o se ha excedido como espectador. Interlocutores de una y otra parte intentan reconducir la situaci¨®n generada porque la mayor¨ªa de los cargos de la entidad son nuevos y procuran recobrar tambi¨¦n la iniciativa que se le supone al campe¨®n de Liga.

El propio Guardiola ha recuperado la iniciativa despu¨¦s de que el equipo ganara la Supercopa al Sevilla en un partido espectacular. En un momento de duda, el t¨¦cnico ha reafirmado su confianza en la plantilla del curso pasado, reforzada con Villa, y tambi¨¦n en el filial, cuyo protagonismo variar¨¢ seg¨²n la situaci¨®n de los profesionales: el s¨¢bado pasado no actu¨® ning¨²n jugador del Bar?a B.

Guardiola ha vuelto al punto inicial. Una vez que no tiene a Cesc ni a Tour¨¦, ha pedido un mediocentro y recordado la necesidad de solucionar el futuro de Ibrahimovic. Mascherano, argentino del Liverpool, es la alternativa como volante central. El jugador, amigo de Messi, ha expresado a representantes del club su inter¨¦s para recalar en el Camp Nou. El problema son las pretensiones econ¨®micas del equipo ingl¨¦s, superiores a los 15 millones que ofrece el Bar?a.

M¨¢s complicada es la salida de Ibrahimovic, relegado a la suplencia desde que Messi se convirti¨® en febrero en el delantero centro. La Pulga ha marcado 27 goles en 22 partidos desde entonces y se ha convertido en el s¨¦ptimo m¨¢ximo goleador del club, con 130 tantos. Su nueva posici¨®n exige la presencia en las bandas de dos jugadores vers¨¢tiles, como Villa o Bojan y Pedro, diferentes de Ibra, que funciona como un 9 cl¨¢sico. La ficha anual del sueco, que ronda los 10 millones, complica, sin embargo, cualquier salida. Guardiola asume que se quede Ibra siempre que cambie su papel y acepte ser uno m¨¢s.