Un incendio obliga a cortar la autov¨ªa de las R¨ªas Baixas

Los fuegos rodearon una jornada m¨¢s la provincia de Ourense. Las llamas obligaron ayer a cortar la A-52 en direcci¨®n a Celanova, a la altura del municipio de Taboadela, y regresaron adem¨¢s a Chandrexa de Queixa, en donde la semana pasada ardieron zonas naturales protegidas, y continuaron devastando el monte en direcci¨®n a la estaci¨®n de monta?a de Cabeza de Manzaneda.

El incendio de Chandrexa, en el l¨ªmite con el municipio de Poboa de Trives, se inici¨® ya el mi¨¦rcoles pr¨¢cticamente en el mismo punto en el que se extingui¨® el de la semana pasada en donde las llamas calcinaron zonas del Macizo Central, espacio protegido de la Red Natura y Lugar de Inter¨¦s Comunitario. En esta ocasi¨®n, el fuego, que calcin¨® 60 hect¨¢reas de monte raso, seg¨²n datos oficiales de la Xunta, inici¨® un camino ascendente por la carretera que lleva a la estaci¨®n de monta?a, en una zona pr¨®xima al punto de repoblaci¨®n de pinos al que no lleg¨® a alcanzar. La Conseller¨ªa de Medio Rural dio por extinguido el incendio a mediod¨ªa de ayer.

Feij¨®o "sigue instalado en la manguerita", denuncia el PSdeG

En el caso de Taboadela, la extensi¨®n devastada ayer por las llamas fue de menos de 20 hect¨¢reas de monte raso, a la altura de Mes¨®n de Calvos, en el Val da Rabeda aunque invadi¨® la autov¨ªa, por lo que fue necesario mantenerla cerrada al tr¨¢fico durante la tarde. Aunque las superficies quemadas no superaron en su mayor¨ªa las 20 hect¨¢reas -extensi¨®n a partir de la cual informa la Xunta-, la provincia de Ourense estuvo ayer rodeada por numerosos focos. Brigadistas y medios a¨¦reos se emplearon, adem¨¢s de en los mencionados, en la extinci¨®n de otros incendios que mantuvieron en vilo a vecinos de Ribadavia (en el l¨ªmite con Carballeda de Avia) en donde el fuego arras¨® zonas arboladas pero no se acerc¨® a las viviendas; Cualedro, Xunqueira de Amb¨ªa y Coles, entre otros.

El conselleiro de Medio Rural, de visita en el Parque Natural de Corrubedo, explic¨® que su departamento est¨¢ analizando posibilidades para regenerar algunas zonas de monte arrasado y evitar problemas como los de 2006, cuando, con la llegada de las lluvias oto?ales, las cenizas acabaron siendo arrastradas al fondo de las r¨ªas. Para evitar ese da?o, "se est¨¢n estudiando alternativas" y averiguando cu¨¢les son las "acciones realmente ¨²tiles", informa Europa Press. Ju¨¢rez recalc¨® que, pese a posibles efectos perniciosos, los problemas son de "magnitudes totalmente diferentes", ya que en los peores d¨ªas de 2006 ardieron "unas 80.000 hect¨¢reas", mientras que la superficie quemada en el mes de agosto de este a?o ronda las 5.000 hect¨¢reas.

El PSdeG, en boca de su portavoz de Medio Ambiente, Carmen Gallego, critic¨® de nuevo la calificaci¨®n de campa?a "¨®ptima" que hizo el presidente de la Xunta, Alberto N¨²?ez Feij¨®o. "Sigue gobernando como gan¨®: con la mentira y sin ponerse colorado. Sigue instalado en la manguerita", comenz¨® la socialista. Gallego censur¨® la "falta de respeto" del presidente para aclarar a continuaci¨®n que, seg¨²n el criterio de su partido, no se puede comparar este a?o con 2006. "Primero, porque no hay el mismo n¨²mero de incendiarios, eso es evidente" y lo justific¨® alegando que este a?o hay una media de ocho fuegos diarios frente a los 150 de hace cuatro a?os. "Entonces, la responsabilidad de que ardiera el monte era del Gobierno, ahora es de los incendiarios". "Que se pongan de acuerdo", pidi¨®.

Esta campa?a es muy distinta tambi¨¦n por el dispositivo antiincendios, antes "heredado de Fraga", y por el comportamiento de la oposici¨®n, dijo. "Ahora hay una oposici¨®n responsable que va a esperar para exigir las responsabilidades pol¨ªticas oportunas" frente a la "carro?era y demag¨®gica" del PP en 2006.

El portavoz del PP, Antonio Rodr¨ªguez Miranda, ataj¨® las cr¨ªticas del PSdeG asegurando que s¨®lo pretenden "hacer olvidar el fracaso del bipartito, cuando el Gobierno del que ellos formaban parte fue incapaz de gestionar con eficacia la lucha contraincendios".