Espa?a comienza a perforar su gran almac¨¦n submarino de gas
La reserva estrat¨¦gica frente al Ebro almacenar¨¢ el combustible que consume el pa¨ªs en 12 d¨ªas - La obra, de 1.300 millones, llenar¨¢ un pozo vac¨ªo de crudo
Espa?a ha puesto en marcha la construcci¨®n de su gran reserva estrat¨¦gica de gas para evitar apagones en caso de que haya problema en el gasoducto de Argelia o en los buques que traen el combustible. La empresa ACS lidera el consorcio que la semana que viene empezar¨¢ a perforar el lecho marino a 21 kil¨®metros del delta del Ebro con una inversi¨®n de 1.300 millones de euros.
Las perforaciones submarinas convertir¨¢n el yacimiento petrol¨ªfero de Amposta, abandonado a mediados de los ochenta, en el flamante dep¨®sito de gas Castor. Los trabajos aprovechar¨¢n la formaci¨®n geol¨®gica que contuvo el crudo para reconvertir esa cavidad en un tanque de gas natural con capacidad para 1.300 millones de metros c¨²bicos -lo que Espa?a tarda cerca de 12 d¨ªas en consumir-, ubicado unos 1.750 metros bajo el lecho marino.
Industria quiere elevar la seguridad de suministro para evitar apagones
El acondicionamiento bajo el mar convierte esta infraestructura en la m¨¢s cara de los dep¨®sitos construidos hasta el momento -unos 1.300 millones de euros- y tan compleja que el promotor del proyecto, Escal UGS -participada por el grupo espa?ol ACS (66%) y la sociedad canadiense CPL (33%)-, ha contratado la segunda gr¨²a flotante m¨¢s grande del mundo para ensamblar la plataforma de perforaci¨®n. Un gigante de casi cien metros de altura que a las seis de la ma?ana de ayer qued¨® acoplado al suelo marino, a 92 metros de profundidad, y dispuesto sobre el antiguo yacimiento. Todo listo para horadar.
La localizaci¨®n del dep¨®sito viene condicionada por la formaci¨®n geol¨®gica del antiguo yacimiento, del que ya se extrajeron unos 56 millones de barriles de crudo y que supone un recinto ideal y seguro -pese a los recelos de los ecologistas- para acumular gas, seg¨²n los expertos. "Como hubo petr¨®leo all¨ª se conoce muy bien la geolog¨ªa del terreno y no debe haber fugas", se?ala Jos¨¦ Luis Larrea, vicepresidente del Colegio de Ge¨®logos.
El presidente de Escal UGS, Recaredo del Potro, insiste en que no hay peligro en el almac¨¦n: "Hemos cumplido todos los tr¨¢mites ambientales que ha reclamado la Administraci¨®n". "El otro dep¨®sito submarino de Espa?a [frente a las costas de Vizcaya] se encuentra en una zona designada reserva de la biosfera. Y no ha habido problemas", pone como ejemplo.
La plataforma emplear¨¢ 18 meses para perforar ocho pozos que ejercer¨¢n de nudo umbilical con que el dep¨®sito recibir¨¢ y bombear¨¢ gas. Tambi¨¦n abrir¨¢ otros cuatro pozos destinados a tareas de control. Estos quedar¨¢n unidos a tierra a trav¨¦s de un gasoducto de 30 kil¨®metros de longitud, ocho de ellos subterr¨¢neos hasta alcanzar el almac¨¦n ubicado en Vinar¨®s (Castell¨®n). Desde all¨ª se inyectar¨¢ o captar¨¢ suministro procedente de cualquiera de los gasoductos del pa¨ªs. La previsi¨®n es que entre en funcionamiento en primavera de 2012.
Los dep¨®sitos de gas son una prioridad en toda Europa. El Castor fue declarado de urgencia por el Consejo de Ministros en 2006. Espa?a importa pr¨¢cticamente el 100% del gas que consume y con ese gas se genera un tercio de la electricidad. Aunque Espa?a tiene diversificado su abastecimiento -el 21% viene por el gasoducto de Argelia y el resto en barcos desde Noruega, Nigeria o Libia- toda Europa intenta aumentar su seguridad de suministro para evitar apagones.
En diciembre de 2004, una aver¨ªa en el gasoducto desde Argelia, unida a un temporal que imped¨ªa llegar a los buques metaneros, puso a Espa?a al borde del apag¨®n y Enagas tuvo que cortar el suministro a las grandes empresas para que no se cayera la red. La ley obliga a contar con reservas para 35 d¨ªas, pero Industria quiere elevar ese umbral.
Adem¨¢s del yacimiento Castor y la ampliaci¨®n de La Gaviota, est¨¢ en proyecto un almac¨¦n en Yela (Guadalajara). En este caso el gas se almacenar¨¢ en un acu¨ªfero, lo que requiere m¨¢s complejidad. La ventaja es que est¨¢ cerca de Madrid.
El gas ha sido, junto con las renovables, la gran apuesta el¨¦ctrica de Espa?a. Desde 2002 se han instalado 22.370 megavatios de centrales de gas, la potencia de 22 reactores nucleares. Pero con la ca¨ªda de la demanda el¨¦ctrica, las centrales funcionan mucho menos de lo calculado (3.500 horas en 2009 frente a una previsi¨®n de 5.000. Y el tiempo va en descenso por el auge de las renovables).
Por eso el diputado de ICV, Joan Herrera, critica. "Es un error. Habr¨ªa que reconsiderar este tipo de instalaciones porque la previsi¨®n de consumo de gas est¨¢ por encima de la realidad. No considera factores como el descenso de consumo por la crisis", razona. "Instalarla tan cerca del delta, una zona protegida, tampoco parece razonable. Los estudios ambientales se han hecho demasiado deprisa", a?ade Herrera.
Bajo el casco de Berl¨ªn
El almac¨¦n de gas Castor ha generado protestas en los municipios vecinos. Josep Manel Mart¨ª, concejal de Urbanismo de Alcanar (Tarragona, 11.000 habitantes) critica: "El almac¨¦n queda a tiro de piedra de la escuela del pueblo y Vinar¨®s estar¨¢ a m¨¢s de ocho kil¨®metros de donde se emitir¨¢n gases". Sin embargo, la t¨¦cnica de los almacenes de gas es muy conocida. Seg¨²n Enagas, "existen 6.267 almacenamientos subterr¨¢neos en el mundo; 81 de los cuales son en acu¨ªferos salados profundos, incluido uno bajo el casco urbano de Berl¨ªn".
El vicepresidente del Colegio de Ge¨®logos, Jos¨¦ Luis Larrea, destaca que "no se conoce ning¨²n incidente en los cientos de almacenes que existen". Se suelen usar yacimientos vac¨ªos de hidrocarburos por un l¨®gico razonamiento: si la formaci¨®n geol¨®gica atrap¨® all¨ª el gas o el petr¨®leo durante milenios, lo seguir¨¢ haciendo.
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