Nutrici¨®n para prevenir enfermedades

La Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) define salud como "un estado de bienestar f¨ªsico, ps¨ªquico y social" que, en el caso de la nutrici¨®n, une la alimentaci¨®n con un hecho tan social como la comida alrededor de una mesa. Nuestros h¨¢bitos alimentarios, adem¨¢s, pueden evitar que suframos dolencias cardiovasculares, distintos tipos de c¨¢ncer o diabetes, entre otros problemas asociados a la mala alimentaci¨®n.

Las investigaciones realizadas hasta ahora han demostrado que las enfermedades cardiovasculares, la principal causa de muerte evitable en el mundo desarrollado, van ligadas a elevados niveles de colesterol en sangre -del colesterol llamado malo o LDL y del colesterol total, suma del LDL y el colesterol bueno-. Este riesgo afecta especialmente a quienes abusan de las grasas saturadas y puede prevenirse si se sustituyen por pescados grasos -como el salm¨®n, pescado azul, que previene el accidente cerebrovascular-, aceite de oliva -rico en ¨¢cidos grasos monoinsaturados-, los vegetales y los aceites vegetales, con su ¨¢cido alfa-linol¨¦nico.

Asimismo, las llamadas grasas trans se vinculan al incremento de problemas cardiovasculares. Son las que encontramos en la boller¨ªa industrial, los productos precocinados y las margarinas, aunque algunas industrias se han comprometido a eliminarlas o reducirlas en sus productos.

Otro nutriente que ha demostrado su efecto protector contra estas dolencias es la fibra, que mantiene los niveles del colesterol bueno o HDL y reduce los niveles de triglic¨¦ridos, mejora la sensibilidad a la insulina, previniendo la aparici¨®n de diabetes. Podemos encontrarla en cereales sin refinar, frutos secos, frutas y verduras, que tambi¨¦n son ricos en antioxidantes -vitamina C, E, carotenoides y compuestos fen¨®licos- y vitaminas B12 y B6.

Los estudios que relacionan la nutrici¨®n con distintos tipos de c¨¢ncer ofrecen, asimismo, resultados interesantes. As¨ª, el c¨¢ncer de mama se asocia con un consumo excesivo de calor¨ªas (energ¨ªa) y el abuso de las carnes rojas es un factor de riesgo para el c¨¢ncer de colon. Al igual que una dieta rica en frutas y verduras constituye una defensa frente a los c¨¢nceres del tubo digestivo en general y de colon y recto en particular. En estos dos casos sabemos ya que la fibra desempe?a un papel muy positivo. Al contrario sucede con el alcohol. En general, este aumenta el riesgo de c¨¢ncer de es¨®fago y laringe, y podr¨ªa desempe?ar un rol de riesgo en el tumor de mama.

Sin embargo, las ¨²ltimas investigaciones se orientan no tanto hacia el an¨¢lisis de ciertos alimentos o nutrientes aislados como al conjunto de alimentos que ingerimos regularmente. Aqu¨ª entran con fuerza los alimentos funcionales, aquellos a los que incorporamos o restamos nutrientes para que mejoren nuestra salud. Un espacio prometedor donde hay que confirmar si los nutrientes a?adidos pueden ejercer los mismos beneficios que su ingesta en un producto natural.

Marta Cuervo es doctora en Nutrici¨®n Humana y Diet¨¦tica de la Universidad de Navarra.