"La liberaci¨®n de la mujer es una falacia"
Hace siete a?os que Achero Ma?as estren¨® Noviembre. Hace 10 desde que debut¨® con El Bola. Ha sido un tiempo largo. "El cine no es lo m¨¢s importante en mi vida, y no he rodado porque no era el momento". Ma?as (Madrid, 1966) vivi¨® en Barcelona, hizo el curso de acceso a la universidad para mayores, empez¨® Filosof¨ªa, se mud¨® cuatro a?os a Nueva York porque su principal objetivo era pasar m¨¢s tiempo con su hija mayor... All¨ª escribi¨® varias historias, y una de ellas, Todo lo que t¨² quieras, se estrena el viernes que viene. Y tal vez por eso, le comen algo los nervios. La entrevista tiene lugar despu¨¦s de un pase de la pel¨ªcula para acad¨¦micos, que estos d¨ªas deciden los tres filmes espa?oles que son preseleccionados para los Oscar. "Hac¨ªa mucho tiempo que yo no viv¨ªa algo as¨ª, ense?ar tu trabajo a la gente, y adem¨¢s en la sala hab¨ªa familiares, amigos...".
El cineasta vuelve ocho a?os despu¨¦s con 'Todo lo que t¨² quieras'
"Nunca hay que darle un texto a un ni?o. Es matarle"
Ma?as no ha cambiado ni f¨ªsicamente -est¨¢ igual que en el rodaje de El Bola- ni de car¨¢cter -sigue con las cosas bastante claras-. En realidad, s¨ª ha habido una variaci¨®n: Ma?as ha vuelto a ser padre -su segunda hija cumple ahora 10 meses- y lo vive defendiendo una pel¨ªcula sobre la paternidad asumida con todas sus consecuencias. En Todo lo que t¨² quieras, Leo (Juan Diego Botto) es un abogado algo conservador de ideas que tras la muerte de su esposa no dudar¨¢ en proteger a su hija de cuatro a?os de cualquier forma. Y si eso incluye travestirse y convertirse en madre, lo har¨¢. "Por amor hace justo lo que m¨¢s le incomoda". Con la ayuda de un transformista, encarnado por Jos¨¦ Luis G¨®mez, que suelta con fuerza al final de la trama: "Los heteros no ten¨¦is el patrimonio de la paternidad". Con tanta rotundidad como el mensaje de cambio social que transmite el filme: "En los tribunales, los padres salen peor parados que las madres. Pero no por una situaci¨®n feminista, sino machista. La liberaci¨®n de la mujer es una falacia. Al final, ellas contin¨²an criando a los hijos, encarg¨¢ndose de la casa y yendo a trabajar. Para m¨ª es machista esa determinaci¨®n de los jueces de que las mujeres sigan cumpliendo el rol de educaci¨®n y crianza. Tambi¨¦n creo que tendr¨ªa que erradicarse el t¨¦rmino guardiacustodia, porque las custodias deben compartirse. Esos t¨¦rminos apuntan a un ganador y a un perdedor en los juicios". Y Achero Ma?as milita en el bando de la igualdad.
"No es una pel¨ªcula autobiogr¨¢fica, pero hay muchas cosas que nacen de mi paternidad. Es l¨®gico, todo el mundo saca de sus recuerdos material art¨ªstico". ?Incluido el personaje del transformista? "No. Esta historia llevaba 10 a?os rondando por mi cabeza: un padre que se queda solo con su hija. Porque como progenitor, a veces te planteas ?qu¨¦ har¨ªa yo con la criatura? De repente una noche en Nueva York a las cuatro de la ma?ana, desvelado, se me apareci¨® el personaje del transformista. Pens¨¦ que simbolizaba muy bien la ruptura de estereotipos, que es el germen del filme. A las cinco y media ya hab¨ªa acabado la estructura del gui¨®n".
Ma?as siempre ha tenido buena mano con los ni?os, esos monstruos que pueden desquiciar un rodaje, desde sus cortometrajes -Metro, Cazadores- hasta su consagraci¨®n con el descubrimiento de Juan Jos¨¦ Ballesta -"Un ser muy especial"- en El Bola. "Nunca hay que darle un texto a un ni?o. Es matarle. Recitar¨¢ el texto sin naturalidad. Yo lo hago jugando. Creo estados de ¨¢nimo y ah¨ª incluyo elementos narrativos y di¨¢logos necesarios. La ni?a no se sab¨ªa los di¨¢logos y yo se los iba diciendo. Agradezco la concentraci¨®n inmensa de Juan Diego, que actuaba durante horas mientras yo recitaba los di¨¢logos a la ni?a". ?Obsesi¨®n por el mundo infantil? "Puede, porque tiene algo fundamental, y es que una circunstancia puede variar la visi¨®n del mundo de un ni?o. Son muy susceptibles de cambios. Cosa que no ocurre tanto con los adultos. Nuestra personalidad est¨¢ m¨¢s cerrada. Ellos en cambio est¨¢n en plena construcci¨®n, y eso en realidad es el cine: contar un cambio en una persona o en un grupo de personas".
En la distancia, Ma?as ha visto con perspectiva el cine espa?ol: "Se hace mucho tipo de cine, e incre¨ªblemente tiene mucha m¨¢s repercusi¨®n fuera que en Espa?a. Si esto sucediera en otra disciplina, estar¨ªamos volcados con ella. La sociedad debe reflexionar sobre esto".
Pasada la dureza de producir ¨¦l mismo su filme -"Tu trayectoria profesional y cero es lo mismo. Terrible. De algo deber¨ªa servir tu bagaje en cualquier profesi¨®n"-, Ma?as descansa con la obra acabada y agradece -est¨¢n en los t¨ªtulos de cr¨¦dito- a los actores que le han ayudado. "No ten¨ªa claro Leo. Y no hice pruebas, sino que ped¨ª a algunos amigos que lo interpretaran para que yo ajustara a Leo. Al final, qued¨® Juan Diego, pero es obra de muchos".
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