El peregrino que predijo al Papa

Cuando Benedicto XVI llegue en noviembre a Santiago, las tiendas de recuerdos de la ciudad estar¨¢n pobladas de merchandising con la efigie del romano pont¨ªfice, como lo est¨¢n los puestos de souvenirs de la V¨ªa de la Conciliaci¨®n que lleva al Vaticano desde la fumata blanca del 19 de abril del 2005. Antes de aquel d¨ªa, la apariencia del cardenal Ratzinger no era tan familiar al com¨²n de los cat¨®licos. Y es por eso que Alfredo ?lvarez, el hospitalero de Molinaseca (Le¨®n), nunca estar¨¢ seguro del todo de si estuvo alojado en su albergue como peregrino, y si la postal que recibi¨® en el verano del a?o 2000 es de verdad de "Louis Joseph, futuro papa Benedicto XVI", como aventuraba la firma de la misiva.

?lvarez critica que se condene a los caminantes a hacer cola con los turistas

Va a ir a Jap¨®n para promocionar una peregrinaci¨®n budista

La carta vaticina que habr¨¢ un Benedicto XVI cinco a?os antes de su elecci¨®n

El hostelero guarda el documento en la caja de seguridad de un banco

Postal tan singular no podr¨¢ adquirirse en Compostela este oto?o, y por eso su propietario la guarda a buen recaudo en la caja de seguridad de un banco. Sea o no de pu?o y letra del vicario de Cristo, nadie cuestiona el valor prof¨¦tico de un documento que un lustro antes del "habemus Papam" adelantaba el nombre del relevo de Juan Pablo II al frente de la Iglesia de Roma. Cal¨ªgrafos y expertos ling¨¹¨ªsticos aseguran que la fecha y el lugar de procedencia son reales y que, por la construcci¨®n de las frases, fue escrita en espa?ol por un remitente que ten¨ªa el alem¨¢n como lengua materna. Sobre los trazos escritos, los informes no son concluyentes, a falta de muestras de la escritura papal para establecer una comparaci¨®n. Alfredo no quiere pelearse por esta cuesti¨®n. Pero el asunto salta a la palestra cada vez que Benedicto XVI es actualidad.

Podr¨ªa haber sido cierto que, en su peregrinaci¨®n a Santiago, el entonces Joseph Ratzinger se detuvo en tierras leonesas del Bierzo en el albergue de Molinaseca. De ser as¨ª, se habr¨ªa encontrado con un hospitalero singular. Alfredo es un entregado a su profesi¨®n. Desde que en 1993 se hizo cargo de la gesti¨®n del albergue municipal y a?os despu¨¦s del suyo propio de Santa Marina, ha hecho del conocimiento de la peregrinaci¨®n a Compostela toda una carrera. Caballero de la Orden del Camino de Santiago, cuando despegaba el Xacobeo estuvo asesorando a alcaldes de municipios de paso de la senda francesa para optimizar la Ruta en todos sus puntos. Por aprender, aprendi¨® hasta a hacer masajes para ayudar a los cansados peregrinos.

Por eso, no es extra?o que amontone por millares postales de caminantes agradecidos. Al tal Joseph, "futuro Benedicto XVI", tampoco se le olvid¨® la personalidad del hospitalero. "Debi¨® de estar presente en la tertulia que cada noche se organiza en el albergue para compartir experiencias con los peregrinos que llegan a Molinaseca y all¨ª debi¨® de escuchar mis opiniones", piensa Alfredo. De hecho, el remitente le anima a abandonar el escepticismo en alguna de sus reflexiones con respecto a los dogmas de la fe, dejando para las ¨²ltimas l¨ªneas la promesa de rezar por su alma, un discurso apropiado para quien por aquel entonces era el guardi¨¢n de la doctrina de la Iglesia.

Alfredo es un hombre esc¨¦ptico no s¨®lo en ciertas cuestiones religiosas. Con respecto a este A?o Santo, se cuestiona las grandes nuevas que difunden las instituciones: "No comparto los resultados triunfalistas que nos venden, porque a mi puerta han llegado un 40% menos de peregrinos que en 2004". La culpa, en su opini¨®n, no es de la crisis, sino de la propaganda: "Se dec¨ªa que recorrer¨ªan la ruta millones de personas y, claro, la gente se asusta pensando que no va a haber sitio y opta por no venir". Refuta las estad¨ªsticas con un hecho: "Si este a?o no est¨¢ el Ej¨¦rcito con tiendas de campa?a, ser¨¢ porque no han hecho falta".

No es su ¨²nica cr¨ªtica. Dice que son muchos los que al llegar a Santiago se sienten defraudados: "Deber¨ªa d¨¢rseles un trato especial a los peregrinos, no amontonarlos en colas junto a los turistas". Y a?ade que es por ese descontento que algunos deciden continuar a Fisterra para ver si all¨ª encuentran mayor espiritualidad.

Tambi¨¦n Alfredo opt¨® por seguir caminando tras sellar su d¨¦cimosegunda Compostela. En el finis terrae tampoco hall¨® grandes verdades, pero s¨ª un nuevo camino para buscarlas, cuando un japon¨¦s le habl¨® del Camino de Shikow, una ruta budista de 1.200 kil¨®metros que pasa por 88 templos. En noviembre, el hospitalero viajar¨¢ a Jap¨®n para asesorar en la potenciaci¨®n y proyecci¨®n de este camino: "Me gustar¨ªa hacer un centro de documentaci¨®n y divulgaci¨®n sobre los caminos de peregrinaci¨®n espiritual que existen en el mundo". No dice Alfredo si se acercar¨¢ a Santiago en oto?o para esperar a Benedicto XVI. Quien sabe si el Papa aprovechar¨¢ para desvelar el enigma de una postal que va camino de generar tantas especulaciones como el tercer misterio de F¨¢tima.