El tripartito compromete inversiones de 6.400 millones sin aclarar su financiaci¨®n

Las industrias, los agricultores y parte de los Ayuntamientos catalanes, mayoritariamente los gobernados por CiU, se alzaron ayer en contra del plan de gesti¨®n del agua, hoja de ruta sobre la pol¨ªtica que Catalu?a debe seguir en relaci¨®n con los recursos h¨ªdricos en los pr¨®ximos cinco a?os. La escenificaci¨®n de su rebeli¨®n fue el consejo de administraci¨®n de la Agencia Catalana del Agua (ACA), en el que tienen mayor¨ªa los representantes de la Generalitat. As¨ª, el consejo logr¨® sacar adelante dicho plan con 19 votos a favor y siete en contra, pero la resistencia de buena parte de los usuarios del agua fue llamativa. La principal raz¨®n que esgrimieron para votar en contra fue "el desacuerdo con la aprobaci¨®n de un proyecto con elevadas inversiones sin que se garantice soluciones econ¨®micas para afrontarlas", explicaron fuentes empresariales representadas en la ACA.

El Gobierno catal¨¢n ha avanzado 2.300 millones en inversi¨®n en infraestructuras

Las inversiones del plan entre 2010 y 2015 ascend¨ªan a 9.400 millones, pero esta cifra ha encogido a 8.700 millones por el recorte de inversiones del plan de regad¨ªos. A esa cifra hay que restarle los 2.300 millones de euros de inversi¨®n ya ejecutada que el tripartito ha avanzado para aumentar la disponibilidad de agua en 122 hect¨®metros c¨²bicos en los ¨²ltimos dos a?os. Pero quedan 6.400 millones que, si el Gobierno catal¨¢n da luz verde al plan justo antes de las elecciones, heredar¨¢ como compromiso el siguiente ejecutivo sin que est¨¦ decidido c¨®mo ni qui¨¦n pagar¨¢ esa factura, m¨¢xime teniendo en cuenta la situaci¨®n l¨ªmite en la que se encuentran las entidades que conforman la Administraci¨®n hidr¨¢ulica de Catalu?a (la ACA y Aguas Ter Llobregat). En total, finalizar¨¢n este a?o con una deuda de 2.200 millones de euros.

Todos los grupos pol¨ªticos, incluidos los que gobiernan, admiten que la situaci¨®n financiera es explosiva. CiU reclam¨® ayer al Gobierno catal¨¢n que no apruebe el plan y que permita que lo retome el que salga de las elecciones auton¨®micas del 28 de noviembre, al no estar garantizada la financiaci¨®n.Pero, m¨¢s all¨¢ del horizonte electoral del 28-N, el diputado de CiU Ramon Espadaler esgrimi¨® otros dos motivos para exigir al Gobierno de Jos¨¦ Montilla que congele el plan del agua: el mencionado voto en contra de una parte importante de usuarios del agua, "que deber¨ªa hacer reflexionar al Gobierno catal¨¢n", y la situaci¨®n financiera de la Agencia Catalana del Agua, de Aguas Ter-Llobregat (ATLL) y de los propios ayuntamientos, "ya que una parte de la factura tambi¨¦n recaer¨¢ en ellos". Para Espadaler, la prioridad debe ser "el saneamiento de la ACA, sin el que el plan sea papel mojado".

En contra del plan se pronunciaron las patronales Pimec y Fomento del Trabajo, y el Consejo de C¨¢maras, adem¨¢s de los representantes de los usos agrarios Uni¨® de Pagesos y JARC, y los de la Asociaci¨®n Catalana de Municipios, que re¨²ne a la mayor¨ªa de las localidades gobernadas por los nacionalistas. La Federaci¨®n Catalana de Municipios, mayoritariamente de izquierdas, se pronunci¨® a favor del plan, como las asociaciones de vecinos.

El Departamento de Medio Ambiente y Vivienda explic¨® que el plan fue votado despu¨¦s de encajar 144 alegaciones. El consejero Francesc Baltasar consider¨® la elevada cifra "un indicador positivo que pone de manifiesto que el pa¨ªs se interesa por el agua y no ha olvidado la sequ¨ªa". Su departamento admiti¨® que una de las alegaciones m¨¢s reiteradas se resume en "la preocupaci¨®n por hacer posible la inversi¨®n del programa [de actuaciones que acompa?a al plan] y por que la repercusi¨®n de los costes asociados a la gesti¨®n de las infraestructuras del ciclo del agua se haga de forma razonable e implique responsablemente a las administraciones y a los usuarios". Es decir, que los costes se repartan bien.

Por lo que respecta a las inversiones -de los citados 6.400 millones, 3.100 le corresponden a la Generalitat y el resto a los distintos usuarios del agua, como payeses, industrias, ayuntamientos y consumidores-, el plan plantea dos v¨ªas posibles de financiaci¨®n. Por una parte, dinero procedente de la disposici¨®n adicional tercera del Estatuto, la que en siete a?os debe permitir que el Estado compense su d¨¦ficit inversor hist¨®rico con Catalu?a blindando que, de todos los recursos estatales para infraestructuras, se destine a la comunidad catalana el equivalente al 18,7% (el peso de la econom¨ªa catalana en la espa?ola). El Gobierno central se ha comprometido a cumplir con esta disposici¨®n pese a la crisis, pero la tarta de los recursos que repartir menguar¨¢ por causa de ella y est¨¢ por ver cu¨¢nto dinero llega.

La otra v¨ªa es un nuevo contrato programa entre la ACA y el futuro Gobierno de la Generalitat. El que existe data de 2006 y cubre hasta el pr¨®ximo diciembre. Adem¨¢s, se ha incumplido por los recortes presupuestarios.

El plan de gesti¨®n del agua considera "insostenible" el actual modelo de financiaci¨®n y reclama "nuevos instrumentos". Lo que cuesta explotar el ciclo del agua solo se cubre en un 68% con los ingresos por las tarifas que pagan los consumidores. La ACA estima que estos costes se situar¨¢n al menos en 3,02 euros por metro c¨²bico en 2015, el 77% m¨¢s que ahora. Eso no significa que el recibo vaya a subir el 77%. Pero en la revisi¨®n global del modelo de financiaci¨®n se avecina una subida del agua "de forma gradual y consensuada".

La moci¨®n de CiU aprobada por todos los grupos excepto el PP antes del verano, que ayer hizo suya Baltasar, recoge la necesidad de un plan para contener la deuda, un nuevo programa, m¨¢s dinero del Estatuto y "una recuperaci¨®n de costes gradual" para el usuario sin que afecte a las econom¨ªas dom¨¦sticas ni la competitividad empresarial. La cuadratura del c¨ªrculo.