Cuba impulsa el trabajo aut¨®nomo y las cooperativas para salir de la crisis

La apertura de Cuba a la iniciativa privada parece ir en serio. Cada d¨ªa se conoce un poco m¨¢s de los planes del Gobierno de Ra¨²l Castro para reactivar la econom¨ªa y aligerar la carga de un Estado mastod¨®ntico e ineficiente, que controla m¨¢s del 80% del empleo y que en el plazo de tres a?os ha de despedir a un mill¨®n de trabajadores (el 25% de los empleados estatales), la mitad de ellos en 2011. Seg¨²n varios documentos a los que ha tenido acceso EL PA?S, el plan es conceder el a?o pr¨®ximo 250.000 licencias para ejercer el trabajo por cuenta propia y se prev¨¦ que otras 215.000 personas pasen al "sector no estatal" y creen cooperativas o microempresas. Las autoridades contemplan conceder cr¨¦ditos bancarios a los cuentapropistas y tambi¨¦n que estos puedan "comercializar sus productos y servicios a las entidades estatales". Toda una novedad.

Se crear¨¢ todo un sistema fiscal para gravar las nuevas actividades

Es pronto para saber c¨®mo funcionar¨¢ en la pr¨¢ctica esta apertura a la iniciativa privada y cu¨¢les ser¨¢n sus limitaciones, que sin duda las habr¨¢. Hay muchas inc¨®gnitas, por ejemplo qu¨¦ har¨¢ el Estado para garantizar a los nuevos aut¨®nomos y cooperativistas los suministros de materias primas, ya sea un simple tinte de pelo o la tela para hacer un pantal¨®n. ?Se encargar¨¢ el Estado con su sistema de distribuci¨®n ineficiente? ?Lo har¨¢ a precios minoristas, como ahora, o mayoristas, como la gente pide? ?Los particulares podr¨¢n importar?

Las preguntas son muchas. Tantas como la urgencia de poner el plan en marcha por la gravedad de la situaci¨®n econ¨®mica y para combatir el desempleo masivo que se avecina. El "proceso de inscripci¨®n" de los nuevos aut¨®nomos comenzar¨¢ en octubre, seg¨²n los documentos. Hasta ayer, en Cuba, con una poblaci¨®n de 11 millones de habitantes, ejerc¨ªan el autoempleo unas 140.000 personas. No hab¨ªa m¨¢s porque el Estado restringi¨® durante a?os la entrega de licencias por considerar esta iniciativa privada un "mal necesario". Ahora la pretensi¨®n es llegar a 400.000 en 2011.

Todav¨ªa m¨¢s novedosa es la apertura al sector cooperativo no agr¨ªcola y, en menor escala, a las microempresas. El Gobierno se plantea permitir el trabajo asalariado y que los cubanos creen cooperativas de diversos tipos, tanto en el sector de la construcci¨®n -con la posibilidad de trabajar en obras p¨²blicas-, como establecer carpinter¨ªas, f¨¢bricas de conservas y de producci¨®n de alimentos, tintorer¨ªas y servicios funerarios.

Se introducir¨¢ un nuevo sistema fiscal para regular y gravar todas estas nuevas actividades. Est¨¢ previsto un impuesto progresivo sobre los ingresos personales, otro sobre las ventas o los servicios, impuestos por la utilizaci¨®n de la fuerza de trabajo, por la contribuci¨®n a la Seguridad Social (que ser¨¢ del 25%) y hasta una tasa "por la radicaci¨®n de anuncios y propaganda comercial". Preocupa el impacto social que tendr¨¢ la eliminaci¨®n de medio mill¨®n de empleos estatales en los pr¨®ximos meses. El Estado pr¨¢cticamente no tiene empleo que ofrecer, y a quienes no acepten ofertas en los sectores como la agricultura o la construcci¨®n, solo les garantizar¨¢ un mes de salario por cada 10 a?os trabajados.