Un lago que ni pintado
Villas y 'dolce far niente' al norte de Italia. George Clooney y Robert de Niro se han dejado seducir por la elegancia del lago de Como. Con parada en la ciudad para admirar la arquitectura de Terragni
Hay que navegarlo en zigzag para descubrir todos los secretos de este lago, que ejerce una atracci¨®n fatal, sembrado de poblaciones medievales colonizadas por estrellas del capital, el cine y el bel canto. A diez minutos de Suiza, a menos de una hora de Mil¨¢n y de Lugano, y media m¨¢s hasta Saint Moritz, todos los caminos llevan a Como (www.turismo.como.it).
9.00 Arte blanco, camisas negras
Entre 1927 y hasta el filo de la II Guerra Mundial, el movimiento racionalista llev¨® a cabo una renovaci¨®n arquitect¨®nica que hoy forma parte importante del rico patrimonio de este territorio. Su m¨¢ximo exponente es Giuseppe Terragni, arquitecto genial y fascista convencido que, entre otras obras en la capital, particip¨® en la construcci¨®n del Monumento a los Ca¨ªdos. Subiendo los 140 escalones que conducen de la cripta a la azotea, esta torre blanca que juega con el vac¨ªo y lo lleno es el mejor mirador, con una visi¨®n de 360 grados del lago y la ciudad de Como. Su obra maestra es la Casa del Fascio - A, hoy sede de la Guardia di Finanza, un paralelep¨ªpedo con cuatro fachadas diferentes. El patio central, cubierto y lleno de luz, y la logia que, a trav¨¦s de la mirada, se relaciona con la catedral y el casco hist¨®rico, son dos de las muestras m¨¢s expresivas de su avanzada visi¨®n. Otra obra fascinante, el Asilo de Sant'Elia (2), es una escuela infantil a la que uno querr¨ªa llevar a sus hijos, solo con ver los trabajos que actualmente hacen los cr¨ªos. Un modelo a imitar por su concepto de escuela al aire libre, con aulas panelables y clases en el jard¨ªn, e incluso por la funcionalidad y atractivo del mobiliario original. Pero sus sobrios y rigurosos edificios resultaron poco monumentales para el r¨¦gimen, que lo fue marginando. Tras cuatro a?os combatiendo en el frente de los Balcanes, vuelve destrozado f¨ªsica y ps¨ªquicamente, lo tratan con electroshock y el 19 de julio de 1943 muere a causa de una ca¨ªda libre por el hueco de la escalera. La versi¨®n oficiosa es que se suicid¨®, pero la verdad sigue sin esclarecerse. El pintor Alvaro Molteni, ¨²nico superviviente de aquel movimiento, en plena actividad, con 90 a?os y 47 kilos de peso, afable y hablador, sella el pacto de silencio: "No se lo puedo decir". La oficina de turismo de Como(3) (Piazza Cavour, 17; 00 39 031 33 00 11 28) organiza visitas guiadas.
11.00 Tres en uno
En el casco antiguo de Como todo te sale al paso. Compras en tiendas singulares como Lopez - (4) (Vitani, 26; www.lopez.como.it), una fant¨¢stica joyer¨ªa, o Ubik (5) (Piazza San Fedele, 32; www.ubiklibri.it), una moderna librer¨ªa en la casa m¨¢s antigua de la ciudad. En un paseo se suceden el Duomo (6), el teatro Sociale (7), con una programaci¨®n de primera bajo la ¨¦gida de La Scala de Mil¨¢n, y San Fedele (8), que fue catedral, o la Torre medieval - I. En el arrabal, la bas¨ªlica rom¨¢nica de Sant Abbondio (10) y, al borde del lago, Villa Olmo (11) (www.grandimostrecomo.it), con grandes exposiciones. De camino, desayuno en Cremeria Bolla (Via Pietro Boldoni, 6). Y despu¨¦s, aperitivo en Il Cortiletto (Via Bonanomi, 21), como hacen los comascos, incluido el futbolista Zambrotta, y a comer pescado en La Cucina di Elsa (Via Carcano Paolo, 11; www.lacucinadielsa.com ). Otra opci¨®n es el centenario y refinado Navedano (Via G. Velzi; www.ristorantenavedano.it), tambi¨¦n muy recomendable para la cena.
13.00 Refugio de Churchill
Salimos de la ciudad para descubrir el lago. En sus orillas (www.lagodicomo.com), cada personaje encuentra su sitio. George Clooney tiene dos villas en Laglio (12), que se convierten en su centro de operaciones durante varios meses al a?o. El actor estadounidense frecuenta el restaurante Il Gatto Nero (Via Monte Santo, 69; www.il-gatto-nero.it), en Cernobbio (13), no muy lejos del concurrido Harry's Bar (Via Alessandro Volta, 5). Tambi¨¦n en Cernobbio se encuentra Villa d'Este (www.villadeste.com), donde se suele alojar Jos¨¦ Mourinho. La trattoria favorita de Robert de Niro es Belvedere (Piazza Casartelli, 3), en la aldea de Torno (14), donde vivieron Verdi, Stendhal y Manzoni. Churchill se refugi¨® en villa Le Rose, en Montrasio (15). Entre arqueolog¨ªa y edificios racionalistas, la isla de Comacina(16) fue rebelde y poderosa hasta que, en el siglo XII, Federico Barbarroja y los guerreros comascos la arrasaron. El emperador promulg¨® un decreto prohibiendo cualquier reconstrucci¨®n. Y el obispo de Como, Vidulfo, la excomulg¨® augurando muerte violenta a los que volvieran a habitarla. Nadie volvi¨® a vivir all¨ª hasta que en el siglo XX se convirti¨® en lugar de reposo de artistas. No faltan los casos de otros personajes que se instalaron all¨ª y no vivieron mucho para contarlo. Hoy esta isla de f¨¢bula est¨¢ animada gracias a Benvenuto Purinelli y su famoso restaurante, Locanda dell'Isola. En Tremezzo - Q, la gran atracci¨®n es Villa Carlotta (del siglo XVII).
14.30 La cara oculta
Donde convergen los tres palos de la Y, Bellagio (18) es un bomb¨®n. Entre Villa Melzi (www.giardinidivillamelzi.it), donde se hosped¨® Napole¨®n, y Villa Serbelloni (www.villaserbelloni.com), sede de la Fundaci¨®n Rockefeller, los turistas brujulean por tiendas y restaurantes. Pero a la espalda de todo eso est¨¢ Pescallo, el barrio de pescadores que se derrama hacia un puerto. All¨ª, comer bajo el emparrado del modesto hotel La P¨¦rgola (www.lapergolabellagio.it ) s¨ª que es una bendici¨®n.
16.00 Sospechas y verdades
Pendiente del acantilado, en el d¨¦dalo de callejuelas de Varenna (19) se descubre el Albergo Milano (www.varenna.net). El hotel respira naturalidad, la misma con la que su due?o, Egidio, aborda temas espinosos. Benito Mussolini y su amante Claretta Petacci murieron cerca de Dongo, en la aldea de Giulino di Mezzegra - (20), en la otra orilla, y ya muertos los trasladaron a Mil¨¢n para colgarlos en la plaza p¨²blica. Pero los historiadores todav¨ªa discuten sobre c¨®mo y qui¨¦nes los ejecutaron. "De peque?o encontr¨¦ en el desv¨¢n un peri¨®dico alem¨¢n con una foto de los partisanos que participaron en la ejecuci¨®n, mi padre estaba en ese grupo. Ese no soy yo, me dijo, y no hubo m¨¢s que hablar". Corre la historia de que en Dongo desapareci¨® el oro con el que supuestamente el Duce pensaba huir a Suiza y que ese tesoro yace en el fondo del lago. Esc¨¦ptico, el padre de Egidio lo ten¨ªa claro: "Antes esta gente no ten¨ªa nada y ahora tienen villas". La sombra de la historia es alargada y los supuestos diarios del Duce han estado a punto de desvelarse en Como recientemente. Verdaderos o falsos, se publicar¨¢n en Italia este oto?o.
18.30 El c¨®digo Bellini
Hace cien a?os que no se construye un nuevo hotel de lujo en las bien protegidas orillas del lago. La excepci¨®n es el Casta Diva Resort 21 (www.castadivaresort.com ), inaugurado en junio. Ocupa la villa que fue de la famosa cantante de ¨®pera Giudita Pasta (Casta Diva), para quien compuso Bellini. Entre escalinatas y verandas se escuchan conciertos y ¨®pera en vivo. El edificio hist¨®rico interact¨²a con la geometr¨ªa del nuevo y su atrezo contempor¨¢neo. Con una piscina que flota en el lago, dique propio, spa a la ¨²ltima y buen restaurante, el conjunto recrea el escenario de los amores de la diva y el compositor, que, seg¨²n cuentan, se comunicaban con un c¨®digo secreto a trav¨¦s de su m¨²sica.
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