El nuevo jurado declara culpable al asesino de dos gais

Apu?al¨® 57 veces a dos hombres provoc¨¢ndoles la muerte, pero en el primer juicio fue absuelto de asesintato porque aleg¨® que lo hizo en defensa propia a causa del "miedo insuperable" a ser violado. El veredicto exculpatorio de Jacobo Pi?eiro, emitido en febrero de 2009 por un jurado popular, dio la vuela a Espa?a. Arreciaron las condenas por la apariencia hom¨®fobo de la resoluci¨®n (dos de los miembros del jurado se emocionaron al o¨ªr al acusado pedir perd¨®n a su familia por lo que hab¨ªa hecho). La fiscal¨ªa y la acusaci¨®n particular recurrieron el fallo y el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia orden¨® repetir el proceso por las evidentes contradicciones entre las pruebas y el resultado.

Ayer, otro jurado popular declar¨® a Pi?eiro culpable de dos delitos de asesinato y uno de incendio, por lo que se enfrentar¨¢ a una pena de entre 40 y 60 a?os. El tribunal, formado por cinco hombres y cuatro mujeres, consider¨® por unanimidad que el 12 de julio de 2006 asest¨® 35 pu?aladas a Isaac P¨¦rez Trivi?o y 22 a Julio Anderson Luciano y que aument¨® "deliberada e inhumanamente" el dolor de ambos, que murieron a causa de las heridas. El fallo descarta que actuase en defensa propia o afectado por las drogas. Tampoco admite la versi¨®n de que reaccion¨® "fuera de s¨ª", preso de un "miedo insuperable a ser violado". Seg¨²n el informe de los forenses, las v¨ªctimas no pudieron atacarle porque estaban indefensas y malheridas. Prueba de ello es que Pi?eiro apenas sufri¨® cortes en el forcejeo. Excepto por el veredicto del jurado, el segundo juicio a Jacobo Pi?eiro fue un calco del primero.

La estrategia de la defensa se bas¨® en intentar demostrar que Jacobo Pi?eiro no era due?o de sus actos por la gran cantidad de alcohol y coca¨ªna que hab¨ªa ingerido. Aunque con lagunas por los cuatro a?os que han transcurrido desde el suceso, los testigos tambi¨¦n prestaron testimonios similares, describiendo a las v¨ªctimas como "unos t¨ªos muy honestos y confiados con los dem¨¢s".

Pero la pol¨¦mica que arrastra este caso no acab¨® ayer. Pese al veredicto y a causa de que no se ha dictado sentencia, Jacobo abandon¨® libremente los juzgados. La anulaci¨®n del primer proceso provoc¨® que haya agotado el tiempo en prisi¨®n provisional, lo que significa que esperar¨¢ en su casa a que el juez determine la pena. Por la gravedad del hecho y ante la presi¨®n de la familia, la sala ha admitido la petici¨®n del fiscal de imponer nuevas medidas cautelares. Ante el riesgo de fuga tendr¨¢ que presentarse dos veces al d¨ªa en los juzgados de Vigo para firmar.

Tras el fallo, Marta P¨¦rez, madre de una de las v¨ªctimas, respir¨® por fin aliviada: "Se ha hecho justicia", dijo. Entre l¨¢grimas se abraz¨® a sus allegados sin parar de repetir que no se lo pod¨ªa creer. M¨¢s tarde confes¨® estar agotada y calific¨® la reacci¨®n de Pi?eiro de "fr¨ªa y c¨ªnica", por recibir "con una sonrisa", el veredicto. "Parece que le dio igual", dijo antes de exigir que se le imponga la condena m¨¢xima.

Su abogado, Tom¨¢s Santodomingo, aplaudi¨® que se le haya dado la vuelta al primer veredicto: "Dos chicos que Pi?eiro hab¨ªa querido convertir en violadores eran en realidad las v¨ªctimas de un crimen execrable". Por cada asesinato se le puede aplicar una condena de 15 a 20 a?os.

El jurado tambi¨¦n lo cree culpable de haber prendido fuego en el piso donde cometi¨® el crimen, lo que a?ade una pena de entre 10 y 20 a?os. El acusado fue en todo momento "consciente del riesgo de que el fuego se extendiese a los restantes pisos. Al abrir la espita del gas, ten¨ªa intenci¨®n de provocar una explosi¨®n". Seg¨²n la reconstrucci¨®n del fiscal y la acusaci¨®n, su ¨²nico objetivo era destruir las pruebas. Por eso intent¨® sin ¨¦xito quemar los cad¨¢veres semidesnudos de Isaac y Julio. Y por eso se llev¨® una maleta con objetos personales de ambos, para simular un robo.

Pi?eiro sali¨® ayer por la puerta de atr¨¢s del edificio judicial. Cuando se marchaba se encar¨® con varios fot¨®grafos, a los que insult¨® y amenaz¨®.

Fuentes judiciales apuntan a que la pena se conocer¨¢ "muy pronto", por la repercusi¨®n social que ha tenido el caso.