Andaluc¨ªa abre la v¨ªa contra los concertados que imponen cuotas
Sanciona con 546.000 euros a cuatro colegios por una pr¨¢ctica muy extendida
El cobro de cuotas a las familias de alumnos de los colegios concertados es una pr¨¢ctica generalizada en toda Espa?a. Estos centros reciben fondos p¨²blicos para impartir sus ense?anzas, pero la ley les abre una puerta para que puedan recaudar aportaciones privadas por actividades extraescolares, complementarias y algunos servicios, que han de ofrecerse con car¨¢cter voluntario. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n de Andaluc¨ªa ha encontrado en la provincia de Almer¨ªa cuatro centros concertados en los que se cobraban de forma irregular esas cuotas. Las sanciones impuestas suman 546.800 euros. Las irregularidades las detect¨® la inspecci¨®n educativa el curso pasado. La Junta abre as¨ª un pulso con los colegios que previsiblemente llegar¨¢ a los tribunales y sentar¨¢ precedente.
La Salle justific¨® la petici¨®n de 20 euros en la insuficiente subvenci¨®n
Las escuelas cat¨®licas denuncian falta de recursos frente a las p¨²blicas
El INE cifra en 247 euros anuales el coste de los pagos extras en Primaria
El consejo escolar vasco alerta de que la ense?anza no es de verdad gratuita
El primer multado fue el colegio La Salle, en Almer¨ªa. Tras la denuncia de una familia, se abri¨® una investigaci¨®n y Educaci¨®n sancion¨® al centro con 279.000 euros. A ra¨ªz de este caso, seg¨²n fuentes de la Administraci¨®n auton¨®mica, se detectaron tres casos m¨¢s en esta provincia de cobros irregulares de cuotas. Al colegio Divina Infantita, en El Ejido, le impusieron 95.600 euros. Al centro La Salle Chocillas, 86.100, y al Divina Infantita de la capital almeriense, 86.100. La diferencia en las sanciones se debe al n¨²mero de unidades concertadas.
La Junta de Andaluc¨ªa sostiene que los cuatro centros de Almer¨ªa incumplieron la norma establecida en la Ley Org¨¢nica de Educaci¨®n (LOE) en su art¨ªculo 88: no se puede cobrar por las clases ordinarias y en ning¨²n caso las no lectivas han de ser obligatorias. Ante el recurso presentado por el centro La Salle, un juez ha paralizado la multa. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n ya hab¨ªa comenzado a cobrar los 279.000 euros a trav¨¦s de la subvenciones del concierto. "La Junta, sorprendentemente, no est¨¢ ejecutando la suspensi¨®n dictada por el juez", se quejan en la Federaci¨®n Espa?ola de Religiosos de la Ense?anza (FERE).
Las cuotas que cobran sistem¨¢ticamente los centros concertados (el INE las cifra en 247 euros anuales en Primaria y 220 en Secundaria) no son en s¨ª ilegales. El problema surge cuando se toman represalias contra los padres que no pagan o cuando las familias desconocen que esas actividades son voluntarias. Entonces entienden que para matricular all¨ª a sus hijos habr¨¢n de pagar por determinadas cosas. A veces esas actividades voluntarias est¨¢n en medio de las clases obligatorias y los padres optan por matricular a sus hijos en ellas con tal de que sus hijos no tengan que sufrir horas muertas. Este peri¨®dico visit¨® el a?o pasado una quincena de colegios en varias comunidades y pudo comprobar c¨®mo se ped¨ªa como algo obligatorio la aportaci¨®n a la fundaci¨®n del centro o por determinados refuerzos o servicios extraescolares. Con mucho descaro en algunos casos.
La actuaci¨®n de la Junta de Andaluc¨ªa tiene un precedente en Murcia, en el colegio Antonio de Nebrija de la pedan¨ªa de Cabezo de Torres. La Consejer¨ªa de Educaci¨®n de esta regi¨®n entendi¨® que se hab¨ªa marginado en la fiesta de fin de curso a una alumna porque sus padres no pagaron la cuota. Se le impuso en 2009 una sanci¨®n de 317.000 euros.
Las escuelas cat¨®licas (absolutamente mayoritarias en la red concertada) insisten en que "siempre se recomienda a los centros que sean totalmente transparentes y que, si tienen que solicitar donaciones, expliquen a los padres el grav¨ªsimo d¨¦ficit econ¨®mico que sufren", explica Luis Centeno, del departamento jur¨ªdico de la FERE. "Siempre les hemos recomendado que no amenacen sobre esta situaci¨®n, que les expliquen, sin m¨¢s, que la escuela p¨²blica dispone de m¨¢s recursos, ordenadores o pizarras digitales porque las administraciones priman la p¨²blica y le dan m¨¢s recursos. Que si ellos quieren tenerlos quiz¨¢ se puede conseguir con la aportaci¨®n de todos". Centeno cree que el mayor apoyo que recibe la escuela p¨²blica est¨¢ "dejando rezagada a la concertada, que tiene que pedir ayuda a las familias".
Y la piden, pero no siempre de las mejores maneras, muy lejos, en algunos casos, de la transparencia que solicita la patronal a sus centros. Tan es as¨ª que las familias m¨¢s humildes optan por no matricularse ante el aluvi¨®n de "cuotas voluntarias" que les solicitan. Y algunas no tan humildes est¨¢n pagando un caro peaje por tener a dos o tres hijos en estas escuelas cat¨®licas subvencionadas con fondos p¨²blicos.
La patronal se ha defendido siempre de estas acusaciones negando que se enga?e a nadie, y a?adiendo despu¨¦s que la subvenci¨®n p¨²blica que reciben se queda muy corta. "Apenas cubre el 60% del coste real de la impartici¨®n de las ense?anzas. Y nos acabamos de enterar de que los resupuestos presentados rebajan un 5% el m¨®dulo de los conciertos. No podemos imputar esta rebaja al sueldo de los profesores, as¨ª que los titulares de los centros tendr¨¢n que pedir ayudas", dice Centeno. Efectivamente, la subvenci¨®n de la escuela concertada nunca ha estado acorde con el coste de las ense?anzas. El incremento de esta financiaci¨®n siempre ha estado presente en las negociaciones con las administraciones.
El Consejo Escolar de Euskadi, en su ¨²ltimo informe, correspondiente al periodo 2006-2008 aseguraba que causa preocupaci¨®n "la falta de gratuidad de la ense?anza b¨¢sica. El derecho de los ni?os y adolescentes a recibir una escolarizaci¨®n gratuita en las etapas obligatorias est¨¢ garantizado por ley, pero no en la pr¨¢ctica". Pero la Administraci¨®n vasca no ha registrado denuncias de los padres. Tampoco parece haberlas en otras regiones. Los padres no suelen denunciar, as¨ª que es dif¨ªcil perseguir las malas pr¨¢cticas. El colegio La Salle, de Almer¨ªa, cometi¨® el error de mandar una carta en la que se ped¨ªa una cuota "voluntaria" de 20 euros y se criticaba abiertamente a la Junta por la subvenci¨®n que recibe el centro. Una de las familias asegura que en la misiva pon¨ªa, expresamente, "recibo extraordinario". El pago se domiciliado en el banco.
?Y qu¨¦ dice el Ministerio de Educaci¨®n de todo esto? Poca cosa: remiten a la ley y dicen que esto es una cuesti¨®n auton¨®mica.
Con informaci¨®n de Carmen Mor¨¢n y Ania Elorza.
Lo que dice la ley
El art¨ªculo 88 de la Ley Org¨¢nica de Educaci¨®n (LOE) se titula Garant¨ªas de Gratuidad y dice as¨ª:
1. Para garantizar la posibilidad de escolarizar a todos los alumnos sin discriminaci¨®n por motivos socioecon¨®micos, en ning¨²n caso podr¨¢n los centros p¨²blicos o privados concertados percibir cantidades de las familias por recibir las ense?anzas de car¨¢cter gratuito, imponer a las familias la obligaci¨®n de hacer aportaciones a fundaciones o asociaciones ni establecer servicios obligatorios, asociados a las ense?anzas, que requieran aportaci¨®n econ¨®mica, por parte de las familias de los alumnos. En el marco de lo dispuesto en el art¨ªculo 51 de la Ley Org¨¢nica 8/1985, de 3 de julio, reguladora del Derecho a la Educaci¨®n, quedan excluidas de esta categor¨ªa las actividades extraescolares, las complementarias, y los servicios escolares, que, en todo caso, tendr¨¢n car¨¢cter voluntario.
2. Las Administraciones dotar¨¢n a los centros de los recursos necesarios para hacer posible la gratuidad de las ense?anzas de car¨¢cter gratuito.
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