El refugio de los lectores
Letras y n¨²meros han mantenido siempre una estrecha relaci¨®n a lo largo de la historia, compleja a veces, imposible en otras, pero siempre muy pendientes las unas de los otros. La crisis ha hecho que esta vez hayan optado por cogerse de la mano y taparse las verg¨¹enzas. Esto se traduce en un mercado literario cuyo paisaje ha empezado a transformarse en busca de un lugar seguro. "Los grandes autores venden ahora m¨¢s que nunca y cuesta m¨¢s lanzar a los reci¨¦n llegados", dice Anik Lapointe, editora de RBA, para ilustrar c¨®mo el mar de libros intenta calmar el oleaje impuesto por una situaci¨®n financiera inestable.
"La literatura cl¨¢sica se vende muy poco, mucho menos que antes", comenta Eva Cuenca, de Mondadori, con un poso de decepci¨®n en la voz. Cervantes y Shakespeare sufren ahora el peso de la econom¨ªa sobre sus espaldas mientras que otros, que hasta ahora vend¨ªan lo suficiente como para resultar rentables, simplemente desaparecen. Algo en lo que coinciden todos los editores consultados es, precisamente en lo que llaman "la desaparici¨®n de la clase media". Esa nebulosa poblada por escritores que resultaban clave para matizar los cat¨¢logos y con una s¨®lida base de lectores se tambalea ahora a medida que el mercado vira y se inclina hacia uno u otro extremo. "Pongamos La mec¨¢nica del coraz¨®n, por ejemplo. Es un libro que nos ha sorprendido por su nivel de ventas. Es dif¨ªcil decir que sea por la crisis, pero sea como sea su ¨¦xito es sorprendente al tratarse de un escritor desconocido para el p¨²blico espa?ol". La mec¨¢nica del coraz¨®n, del franc¨¦s Mathias Malzieu, es un libro amable, pero lejos de los territorios de la autoayuda. "Creo que a la gente le gusta leer algo que pueda reconfortarle", remata Cuenca.
"Los grandes autores venden ahora m¨¢s que nunca y cuesta m¨¢s lanzar a los reci¨¦n llegados", dice Anik Lapointe
Mondadori apuesta tambi¨¦n por el g¨¦nero policiaco con su colecci¨®n Roja & Negra, que ha puesto a autores de la talla de Michael Marshall en manos del p¨²blico espa?ol. "Nos parece una buena apuesta por un g¨¦nero que funciona muy bien y apostando por desconocidos con una gran calidad". Adem¨¢s, Cuenca ense?a orgullosa otro de los grandes triunfos de la casa: "El libro ilustrado est¨¢ en alza y nuestros libros con Juanjo S¨¢ez, por ejemplo, que no tienen un precio bajo, se han vendido de forma excelente". En otras palabras, la segmentaci¨®n, un concepto de moda desde finales de los noventa, se ha colado tambi¨¦n en la ¨®rbita literaria.
Para Anik Lapointe, de RBA, el ya mencionado g¨¦nero negro es el gran beneficiado de la actual situaci¨®n econ¨®mica: "Como editor es todo un placer ver c¨®mo los grandes autores finalmente llegan ahora -en esta situaci¨®n de mercado- a sus lectores. En nuestro caso han sido muchos a?os (casi diez) introduciendo a autores como Ian Rankin, Dennis Lehane, Harlan Coben, Maj Sj?wall, Jo Nesbo, Arnaldur Indridason en el mercado y es ahora cuando vemos los resultados". La cuesti¨®n es que las sagas detectivescas jam¨¢s hab¨ªan sido tan populares como ahora, y nombres como los de John Connolly o los mencionados son los aut¨¦nticos reyes..., siempre tras el fen¨®meno Stieg Larsson, el hombre que ha abierto el tarro de las esencias n¨®rdicas, otro fen¨®meno que trasciende la crisis para comerse el universo de papel. "La literatura europea de g¨¦nero, y sobre todo la n¨®rdica, tiene mucha fuerza ahora mismo, y adem¨¢s ha abierto un mercado femenino que funciona muy bien", insiste Lapointe. La editora de RBA apunta tambi¨¦n a otro de esos factores que no beben en la sequ¨ªa econ¨®mica y que conectan con otro boom reciente: "Los libros que pertenecen a una serie, en la que el protagonista se repite de un volumen a otro, tambi¨¦n generan un rendimiento excelente y en cierta forma recuerdan al formato epis¨®dico de la televisi¨®n, que es algo que engancha mucho".
Los peque?os tambi¨¦n tienen algo que decir. Nordica es una de esas micro-editoriales concebida y ejecutada por un solo hombre, lo que los anglosajones llamar¨ªan "one man army". Su editor, Diego Moreno, no solo navega por la crisis sino que hasta se atreve a hacer piruetas, disfrutando de un crecimiento superior al 50% respecto al pasado ejercicio. Moreno se ha volcado con la literatura del norte de Europa, pero desde una perspectiva distinta: "Nos hemos apartado del g¨¦nero negro y hemos apostado por otra literatura de m¨¢s calidad. Lo curioso es que gracias a lo policiaco mucha gente ha empezado a descubrir a los autores de esos pa¨ªses, as¨ª que podemos estar agradecidos". Para este emprendedor, la crisis es un factor que no afecta a su trabajo, "la gente no quiere hacer experimentos, tiene menos dinero y no se arriesga a comprar un libro de un autor al que no conoce, as¨ª que lanzar escritores desconocidos para p¨²blicos masivos se ha convertido en algo casi imposible". Moreno reconoce que "los libros de gran formato, m¨¢s caros, se venden menos y por eso desde Nordica hemos optado por sacar una serie de minilibros a ocho euros. Con ese precio hemos conseguido muy buenas ventas". El editor tambi¨¦n pone sobre la mesa el asunto digital: "A nosotros la tecnolog¨ªa nos parece imprescindible, a trav¨¦s de ella podemos comunicarnos directamente con el lector y personalizar nuestra oferta".
Finalmente, Pablo ?lvarez, director de Suma de Letras, remata el vistazo a la librer¨ªa con un discurso realista: "El mundo editorial en Espa?a ha cambiado mucho en los ¨²ltimos a?os; a finales de los ochenta, los autores hispanos funcionaban muy bien y la gente ten¨ªa un concepto muy claro de lo que se deber¨ªa leer. Esto cambi¨® con la incorporaci¨®n del marketing y el concepto de best seller. Ahora lo que hacemos es asomarnos a la calle y crear nuevas estrategias. Creo que la crisis ha afectado relativamente, el cambio b¨¢sico se aglutina en los de siempre y no se arriesga. Adem¨¢s, la rumorolog¨ªa del libro digital hace que la gente se pregunte si deber¨ªa esperar a hacerse con el libro electr¨®nico en Navidad". ?lvarez reconoce la influencia del cine y de la televisi¨®n en los gustos del gran p¨²blico ("arrasamos con los libros de True Blood y Come reza ama") y se rinde al peso del g¨¦nero negro: "Es entretenido, engancha y a la gente le encanta. Justamente lo que buscamos".

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.