Mi voto en las primarias
Como afiliado al Partido Socialista de Madrid he seguido con el l¨®gico inter¨¦s la campa?a electoral de los dos aspirantes a encabezar la lista del PSOE en las elecciones auton¨®micas. He de confesar, sin embargo, que en v¨ªsperas de las primarias no s¨¦ a qui¨¦n votar. Dudo entre abstenerme o bien, para cumplir con el deber de buen militante, elegir a cara y cruz. Explicar¨¦ la raz¨®n de mis dudas.
Para inclinarse por una persona en unas elecciones primarias, cabe tener en cuenta dos cosas. Una de ellas es la afinidad ideol¨®gica con cada aspirante, ya que son varias las posiciones posibles dentro del PSOE, que es plural. Hay que saber as¨ª si esa persona est¨¢ en el ala izquierda del partido socialista o en el sector moderado, o en el centro. Pues bien, ninguno de los dos candidatos a las primarias de Madrid se ha retratado en ese aspecto. Amigos m¨ªos de Izquierda Socialista, el ¨²nico grupo organizado dentro del PSOE y que como su nombre indica son partidarios de un socialismo m¨¢s radical, me dicen que Tom¨¢s G¨®mez est¨¢ m¨¢s cerca de ellos que Trinidad Jim¨¦nez, pero en el seno de esta corriente no hay unanimidad.
Ning¨²n candidato se ha retratado ideol¨®gicamente. Ni ha abordado el futuro de la izquierda
La otra raz¨®n para inclinarse por este o aquel aspirante es su curr¨ªculo, para as¨ª acreditar su capacidad. El de Trinidad Jim¨¦nez es m¨¢s dilatado, pero tambi¨¦n el de Tom¨¢s G¨®mez es adecuado. Tampoco aqu¨ª hay razones de peso para decidirse.
Queda, claro est¨¢, el hecho de las encuestas que favorecen, quiz¨¢ injustamente, a Jim¨¦nez, ya que una ministra tiene m¨¢s proyecci¨®n medi¨¢tica que un secretario regional. Injusto como es, se trata de un argumento de peso, pues la dif¨ªcil e importante batalla de Madrid requiere que los socialistas se presenten con las mejores armas posibles. Con dudas, ya que las encuestas pueden variar o equivocarse, ello inclinar¨ªa la balanza a favor de la ministra.
Si las cosas est¨¢n as¨ª, ?por qu¨¦ hay tantos en el Partido Socialista de Madrid que apoyan a Tom¨¢s G¨®mez? Es cierto que este, que ha sido un muy activo secretario general madrile?o, ha estado en contacto con muchos militantes. Tambi¨¦n hay ilustres personajes que apoyan a G¨®mez, creo yo, para as¨ª enfrentarse a Zapatero, que, como es bien sabido, prefiere a Jim¨¦nez. El presidente del Gobierno, cuando, antes de serlo, lleg¨® a la secretar¨ªa general, cambi¨® a casi toda la c¨²pula del PSOE, con lo que ha quedado un buen n¨²mero de personas que se han sentido preteridas y buscan ahora un arreglo de cuentas. Otros quiz¨¢ piensen que Zapatero, sobre todo desde el ajuste frente a la crisis, no hace las cosas bien y se ha vuelto poco socialista.
Esto ¨²ltimo me lleva a la conclusi¨®n de que el PSOE, siendo como es un gran partido, adolece de algunos defectos serios. Uno es que casi nunca se plantean en su seno discusiones ideol¨®gicas, muy lejana ya la pol¨¦mica sobre el marxismo de 1979. Desde entonces es un partido parad¨®jico, que presume de ser de izquierdas, cuando su teor¨ªa y su pr¨¢ctica son casi siempre de centro-izquierda. Tal contradicci¨®n conduce a que predomine la indefinici¨®n entre sus miembros, sobre todo en el caso de sus dirigentes. Para poner ejemplos de figuras que han desempe?ado papeles destacados, ?son Alfonso Guerra, Gregorio Peces-Barba o Javier Solana, socialdem¨®cratas moderados como los laboristas brit¨¢nicos o m¨¢s bien radicales como muchos socialistas franceses? Es dif¨ªcil decirlo, como tambi¨¦n lo es adjudicar una etiqueta, dentro del socialismo, a Trinidad Jim¨¦nez o a Tom¨¢s G¨®mez. En una entrevista que ese buen periodista que es I?aki Gabilondo hizo en televisi¨®n al segundo, el entrevistado dijo que quer¨ªa ser candidato, ganar a Esperanza Aguirre y, si es presidente de la Comunidad de Madrid, mejorar la salud, la educaci¨®n y el transporte, cosas todas ellas de caj¨®n. Pero no contest¨® a la pregunta de si est¨¢ enfrentado con Zapatero, al que, sin reciprocidad alguna, parece apoyar y de cuya pol¨ªtica social y econ¨®mica no dijo ni palabra.
Al fin y a la postre, lo que cabe decir de las primarias es que en un partido pol¨ªtico que tambi¨¦n ha presumido siempre de democracia interna y que a menudo no la ha practicado, sus ventajas superan a sus inconvenientes, entre ellos la falta de definici¨®n de los candidatos. Sin embargo, los problemas del PSOE, puestos de manifiesto en estas elecciones, son de car¨¢cter general y ata?en a casi todos los partidos de nuestro pa¨ªs. Est¨¢ demasiado jerarquizado, rara vez admite la libre discusi¨®n interna, para ascender dentro de ¨¦l hay que ser un poco tiralevitas y es muy cr¨ªtico con sus adversarios y poco o nada autocr¨ªtico. ?Por qu¨¦ no se vota, por ejemplo, por los militantes, adem¨¢s del cabeza de lista, el que se propugnen cambios legislativos para que esta sea abierta? ?O por qu¨¦ no se otorga libertad de voto a los diputados nacionales o auton¨®micos y a los senadores, tal como ocurre en pa¨ªses parlamentariamente m¨¢s avanzados como Estados Unidos o Reino Unido? El resultado ser¨ªa un partido m¨¢s din¨¢mico y atractivo.
Francisco Bustelo es rector honorario de la Universidad Complutense y ha sido diputado y senador del PSOE.
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