"La crisis forma parte del artista, le hace crecer"
Chaos Pamplona, la obra del escultor estadounidense Jedd Novatt, parece que se viene encima cuando uno recorre con la vista los casi seis metros y medio de su estructura forjada con bronce pulido. Ese juego de equilibrio inestable en el aire est¨¢ estudiado al mil¨ªmetro. El escultor present¨® ayer en el taller Alfa Arte de Eibar la hermana gemela de otra escultura que ha sido seleccionada este a?o para formar parte de la exposici¨®n de Sotheby's en Chatsworth House, en Inglaterra.
"Qu¨¦ mejor forma de presentar mi nueva obra que en la nave industrial donde se ha gestado", explica Novatt que quiere convertir el acto en un momento de autenticidad con los que han participado en su fabricaci¨®n en contraposici¨®n a una presentaci¨®n m¨¢s comercial. Aunque seis metros de escultura tampoco son f¨¢ciles de encajar en una galer¨ªa.
El artista presenta en Alfa Arte su ¨²ltimo trabajo, 'Chaos Pamplona'
Jedd Novatt es ya un asiduo en Alfa Arte. Fue en 2005 cuando el artista empez¨® a coquetear con el taller industrial eibarr¨¦s, un estudio en el que opina se trabaja de forma diferente a otros lugares porque puede conf¨ªar mucho en el equipo. Dos a?os despu¨¦s, en 2007 se consolid¨® la relaci¨®n entre el artista y el taller y fruto de esa uni¨®n nacieron 15 obras. "Hay algo en Alfa Arte que es ¨²nico. Est¨¢n obsesionados por ayudar a los artistas a realizar sus sue?os. Hay mucha sensibilidad. Los artesanos son verdaderos artistas y se implican en la experiencia de crear una obra", explica el escultor, justificando los cinco o seis viajes que hace al a?o para dar forma a sus obras de gran formato.
A nadie se le escapa que a Jedd Novatt le encanta el Pa¨ªs Vasco. Solo hay que seguir los nombres de su ¨²ltimas obras; Chaos San Sebasti¨¢n, Chaos Mundaka,... "Cada vez que vengo me gusta m¨¢s este pa¨ªs, porque hay una historia escult¨®rica muy importante". En varias ocasiones ha manifestado su admiraci¨®n por la lucha art¨ªstica entre los dos colosos de la escultura vasca; Oteiza y Chillida.
Novatt divide su tiempo entre sus estudios de Normandia, Nueva York y el Pa¨ªs Vasco. En los tres talleres la obra del escultor tiene el mismo hilo conductor; el caos, entendido como una una liberaci¨®n. "El significado que le doy es el contrario al que tiene. En el caos tambi¨¦n te puedes sentir libre en el arte, en la vida, en el Pa¨ªs Vasco. Es una libertad m¨¢s universal", explica.
Mientras muestra su obra y repasa con la mano la pureza de las l¨ªneas rectas de las aristas, el escultor neoyorquino admite que su obra parece que se tambalea. "Mi objetivo era transmitir esa sensaci¨®n de que se va a caer en cualquier momento. Es como la vida misma", explica.
Respecto a si la crisis aprieta, Novatt responde que hay mucha gente que la sufre y no tiene esperanza: "El artista no debe pensar en la crisis porque sino nunca har¨ªa ninguna obra. La crisis forma parte del artista, le hace crecer".
No le da tiempo a saborear la presentaci¨®n de su ¨²ltima escultura porque ya est¨¢ pensando en la pr¨®xima. "En mis comienzos no ten¨ªa dinero y ten¨ªa que coger cosas del suelo para crear pero estaba igual de excitado que ahora que me puedo permitir venir a Alfa Arte", reconoce.
Su pr¨®ximo Chaos ser¨¢ Madrid, aunque algo m¨¢s horizontal que vertical.
Jedd Novatt
(Nueva York, 1958) estudi¨® Literatura y Escultura en el Sarah Lawrence Collage de su ciudad natal y Escultura en la Lacoste School of the Arts francesa. Trabaj¨® en Manhattan hasta 2002 y actualmente vive en Par¨ªs. El escultor asegura que triunfar en el arte no es solo cuesti¨®n de suerte. "Lo importante es contar con gente que crea en ti. Mi padre s¨ª ha sido una suerte en mi vida porque entendi¨® lo que era importante para m¨ª", explica.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.