Emprender en el carrito de la compra
Rolser tiene previsto facturar casi 15 millones de euros este a?o
Pedreguer es un peque?o pueblo de la provincia de Alicante en el que, desde siempre, las familias han vivido del trenzado de capachos de hoja de palma. Los hijos aprend¨ªan el oficio viendo hacer a sus padres como estos hab¨ªan visto a sus abuelos.
Y as¨ª podr¨ªa haber continuado esta poblaci¨®n cercana a Denia si, hace m¨¢s de cuarenta a?os, a los padres de Joan Server no se les hubiera ocurrido cambiar la tradici¨®n. Primero, la hoja de palma y, despu¨¦s, el capacho convencional, al que pusieron unos ruedines y una empu?adura larga para que naciese el carrito de la compra, un ¨²til creado para facilitar la vida del ama de casa espa?ola de los a?os sesenta y que acabar¨ªa por conquistar el mundo. De hecho, no hay m¨¢s que teclear en Internet el nombre de la empresa de la familia Server, Rolser, para descubir la extensa presencia internacional de la marca: de Jap¨®n a Australia y de Chile a Estados Unidos, pasando por la Uni¨®n Europea.
A sus 51 a?os, el presidente de Rolser ha visto c¨®mo el primigenio taller familiar donde sus padres entrelazaban las hojas de palma se ha convertido en unas instalaciones de 21.000 metros cuadrados, en las que la compa?¨ªa prev¨¦ facturar este a?o casi quince millones de euros, el 20% fuera de Espa?a, gracias a una plantilla que ronda el centenar de trabajadores (adem¨¢s de otros 100 puestos de trabajo indirectos). O sea, que es una voz m¨¢s que autorizada para hablar del pasado, presente y futuro de Rolser, "mis hermanos y yo estamos en la empresa desde que naci¨®".
Tambi¨¦n presente en el mercado de las escaleras met¨¢licas y de los taburetes, Rolser es una empresa de segunda generaci¨®n, que ha apostado por la innovaci¨®n desde la primera. Estar atentos a las tendencias del mercado, a la aparici¨®n de nuevos materiales es algo consustancial a esta firma alicantina y algo que se aprecia hasta en el m¨¢s peque?o de los detalles. "Es evidente que las personas ahora son m¨¢s altas que antes. Por eso antes hac¨ªamos carritos para gente m¨¢s bajita y ahora los fabricamos con un chasis y un asa m¨¢s alta. Para eso tenemos a una decena de personas trabajando en el departamento de innovaci¨®n", asegura Server.
El departamento de dise?o tambi¨¦n tiene mucho que decir en estas innovaciones. Por ello, en la colecci¨®n que actualmente est¨¢ en el mercado hay m¨¢s de diez tipos de carros, para cada tipo de cliente o de uso. "Tenemos desde estructuras superligeras a modelos especialmente dise?ados para llevarlos en el maletero del coche, pues hoy la compra se realiza yendo a las grandes superficies en autom¨®vil; o con un compartimento especial para los congelados".
Adaptar la tradici¨®n de la empresa familiar -"somos el principal motor de la econom¨ªa del pa¨ªs y la Administraci¨®n deber¨ªa cuidarnos m¨¢s", se queja- y el icono de la Espa?a de los sesenta y setenta, el carro de la compra, son los dos pilares de Rolser. El tercer pilar es el cuidado por el medio ambiente, lo que le ha permitido a la compa?¨ªa aprovechar una oportunidad ¨²nica: en 2014 el uso de bolsas de pl¨¢stico en los comercios europeos tiene que reducirse a la mitad, lo que teniendo en cuenta que Espa?a es el primer productor y tercer usuario de la Uni¨®n Europea, la oportunidad se antoja ¨²nica. "Desde julio del a?o pasado, cuando algunas grandes superficies empezaron a reducir su uso de bolsas de pl¨¢stico, se han triplicado nuestros pedidos", mantiene este empresario mientras recuerda las m¨¢quinas de coser que compraron sus padres y los cuatro empleados que contrataron para poner en pie los primeros carritos de la compra.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.