El hombre con el Rolex de Bu?uel
El veterano montador ha trabajado en m¨¢s de 200 pel¨ªculas con 60 directores
A los 28 a?os, hab¨ªa logrado dos cosas: ganar una Palma de Oro en Cannes en 1961 (la ¨²nica espa?ola de la historia) y ser excomulgado. El responsable de ambas fue Luis Bu?uel, para quien mont¨® Viridiana, la primera pel¨ªcula que el aragon¨¦s rod¨® en Espa?a a?os despu¨¦s de haberse exiliado a M¨¦xico tras la Guerra Civil. Con ella, Pedro del Rey (Madrid, 1931) consigui¨® -adem¨¢s de que L'Osservatore Romano la declarara "sacr¨ªlega y blasfema"- el m¨¢ximo galard¨®n en el Festival de Cine de Cannes de 1961. Un hito temprano en la carrera de un montador que es a estas alturas un aut¨¦ntico manual del cine espa?ol del siglo XX.
Del Rey iba para tornero, pero su cu?ado Jos¨¦ Antonio Rojo (montador de cine) torci¨® su destino. "Toda mi formaci¨®n se la debo a ¨¦l", explica. Empez¨® en el oficio desde abajo. Primero, como meritorio y luego como primer ayudante en t¨ªtulos como Jerom¨ªn, de Luis de Lucia; Morena clara (Flori¨¢n Rey) o Recluta con ni?o (Pedro Luis Ram¨ªrez). Hasta que en 1956 se gan¨® el cr¨¦dito de montador jefe en Suspenso en comunismo, de Eduardo Manzanos. Desde entonces, y hasta el final del pasado siglo, el curr¨ªculo de Del Rey suma unas 200 pel¨ªculas y una n¨®mina de m¨¢s de 60 directores: Carlos Saura, Marco Ferreri, Basilio Mart¨ªn Patino, Jos¨¦ Mar¨ªa Forqu¨¦, Jaime Ch¨¢varri, Manuel Summers, Francisco Regueiro, Miguel Picazo, Vicente Escriv¨¢, Juan de Ordu-?a... O, lo que es lo mismo, Los golfos, El cochecito, La gran familia, La t¨ªa Tula, Nueve cartas a Berta, Carmen, El amor brujo, El Dorado, Atraco a las tres...
Su primer encuentro con el director de 'Viridiana' fue en la calle del Arenal
"Cuando le¨ª el gui¨®n pens¨¦: 'Esto es sacr¨ªlego, no va a pasar en Espa?a"
"Los directores necesitan una persona que les contradiga"
"Lazaga, Mariano Ozores o Forqu¨¦ hac¨ªan pel¨ªculas que la gente entend¨ªa"
Del Rey se siente parte de una edad de oro que ya no existe: "Veo poco cine espa?ol y lo confieso. Por una raz¨®n fundamental: hay una cuesti¨®n de gui¨®n, de textos. Yo veo el cine de otra manera. Cuando hoy hacen comedias no las entiendo. En Atraco a las tres, Solo un caballero, o incluso en las pel¨ªculas que hac¨ªa Escriv¨¢, que ten¨ªan un poquito de picante, los di¨¢logos eran correctos, no se insultaba a nadie. Las pel¨ªculas ten¨ªan gracia y la gente lo pasaba muy bien". Y reivindica sin etiquetas el cine que se hizo en su ¨¦poca: "Hubo un tiempo en que se critic¨® a La gran familia como una pel¨ªcula del r¨¦gimen. No es cierto, no era del r¨¦gimen: era un invento del maravilloso se?or [Pedro] Mas¨® y de un director, Fernando Palacios, tambi¨¦n maravilloso. Hicimos esa pel¨ªcula y luego una segunda y funcion¨® exactamente igual de bien. Y es que aquellos se?ores, Pedro Lazaga, Mariano Ozores, Jos¨¦ Mar¨ªa Forqu¨¦..., todos hac¨ªan historias que la gente entend¨ªa porque entraba en la historia. Hoy es muy dif¨ªcil entrar en la historia".
Se apasiona recordando su relaci¨®n con Bu?uel. "Me marc¨® de por vida", asegura. El reloj que lleva en su mu?eca, un Rolex del director de El perro andaluz que le regal¨® hace 40 a?os, lo atestigua. Su primer encuentro tuvo lugar en 1960 en una oficina de la calle del Arenal. Bu?uel le entreg¨® el gui¨®n de Viridiana y lo cit¨® para el d¨ªa siguiente. "Yo lo le¨ª y pens¨¦: esto es una pasada, esto es sacr¨ªlego, esto no va a pasar en Espa?a. Al d¨ªa siguiente, Bu?uel me pregunt¨® qu¨¦ me hab¨ªa parecido".
-?Le contesto en broma o en serio? -le dije.
-Se lo pregunto en serio -me respondi¨®.
-?Usted cree que se va a hacer esta pel¨ªcula?
-Estoy seguro -dijo.
-?Y en este pa¨ªs?
-Esto es una pel¨ªcula blanca por completo -argument¨®.
"Y yo, claro que s¨ª: cogemos un crucifijo, una corona de espinas, la echamos a una hoguera, no llegamos a la violaci¨®n pero casi, luego se quedan jugando al tute...".
-Un momento, pero todo esto es limpio...
"Le dije: tiene raz¨®n".
-Pues empezamos a rodar el lunes en El Pardo. Le espero a las ocho de la ma?ana -le inform¨® Bu?uel.
A pesar de que la tecnolog¨ªa ha facilitado notablemente el montaje, la figura del montador sigue teniendo un lugar, asegura: "Los directores necesitan una persona que les contradiga porque de esa confrontaci¨®n salen aportaciones que redondean una pel¨ªcula. Si quien lo monta es el director o el montador trabaja a sus ¨®rdenes, simplemente cortando y empalmando, al final ser¨¢ la idea del director y en algunos casos puede ser acertada, pero en otros la equivocaci¨®n puede ser total". Palabra de un veterano montador.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.