ICV se queda sin aliados en la defensa de la 'zona 80'

La denominada zona 80, el conjunto de v¨ªas de la primera corona de Barcelona donde el l¨ªmite de velocidad es de 80 kil¨®metros por hora, vuelve a ser fuente de controversia a las puertas de las elecciones. ICV-EUiA, que se encarg¨® de implantarla, se ha quedado sola en su defensa. La oposici¨®n reclama eliminar la medida, mientras que sus socios del Gobierno quieren flexibilizarla, sobre todo el PSC, que la ha incluido en su programa, contentando as¨ª a los alcaldes del Baix Llobregat.

En los dos primeros a?os de la implantaci¨®n de la medida, entre enero de 2008 y diciembre de 2009, la Direcci¨®n General de Tr¨¢fico ha impuesto 170.499 multas de entre 100 y 600 euros a conductores que no pisaron el freno mientras circulaban por las zonas 80. El elevado n¨²mero de sancionados demuestra que se trata de una medida impopular que puede pasar factura electoral, lo cual no pasa por alto ni a los partidos ni a los alcaldes del ¨¢rea metropolitana.Solo ICV-EUiA, al frente del Departamento de Medio Ambiente y Vivienda, impulsor de la medida, defender¨¢ en campa?a mantener la zona 80 sin abrir la posibilidad de flexibilizarla, como defienden sus socios de Gobierno. "El l¨ªmite permanente de 80 kil¨®metros por hora como velocidad m¨¢xima se implant¨® precisamente en las zonas de alta contaminaci¨®n atmosf¨¦rica, donde es necesario reducir cualquier foco de emisi¨®n de part¨ªculas incluso por la noche y en fines de semana", sostiene el diputado de ICV Salvador Mil¨¤.

La calidad del aire debe mejorar en el Barcelon¨¨s, Vall¨¨s y Baix Llobregat

"Los l¨ªmites ayudan a reducir el problema", afirma un profesor del CSIC

Los ecosocialistas a?aden que solo podr¨ªan plantearse modificar el l¨ªmite de los 80 km/h en estas zonas si se lograra rebajar la contaminaci¨®n a los l¨ªmites fijados por la UE. Y en el caso del di¨®xido de nitr¨®geno (NO2), a¨²n se rebasan con creces en Barcelona y su ¨¢rea metropolitana, seg¨²n un informe que Medio Ambiente.

Con su f¨¦rrea defensa de la zona 80, ICV se queda sola y se desmarca de sus socios de gobierno, especialmente del PSC, que ya en su d¨ªa apost¨® por flexibilizar el l¨ªmite de velocidad en estas v¨ªas abriendo una brecha en el seno del tripartito y que ahora lo ha incorporado a su programa electoral, complaciendo as¨ª a sus alcaldes del Baix Llobregat. "Los 80 km/h podr¨ªan modificarse al alza o a la baja, o incluso eliminarse en determinadas horas, en funci¨®n de factores como la congesti¨®n del tr¨¢fico o la contaminaci¨®n medioambiental", explica el diputado Jordi Terradas.

ERC ha adoptado una postura intermedia y defiende los beneficios de la zona 80, aunque, a diferencia de ICV, no cierra la puerta a flexibilizarla. "Estamos dispuestos a hablarlo siempre y cuando lo decidan los t¨¦cnicos. Es una medida pol¨¦mica que cost¨® mucho implantar, por lo que antes de introducir cualquier cambio hay que meditarlo mucho y explicarlo muy bien", asegura la diputada republicana Laura Vilagr¨¤. Los partidos de la oposici¨®n -CiU, PP y Ciutadans- lo tienen claro: hay que eliminar la zona 80. CiU sostiene que la medida, aunque ha permitido reducir a la mitad las muertes en accidentes en estas v¨ªas, no ha logrado reducir la contaminaci¨®n a los niveles esperados. El diputado Ramon Espadal¨¦, al igual que el l¨ªder de Ciutadans Albert Rivera y el diputado del PP Josep Llobet, considera que el ¨²nico beneficio ha sido "para las arcas de la Generalitat".

Las multas impuestas durante los dos primeros a?os en estas v¨ªas suman al menos 17 millones de euros, aunque Tr¨¢fico se niega a revelar la cifra exacta. Espadal¨¦ considera que la reducci¨®n de la contaminaci¨®n deber¨ªa lograrse con medidas alternativas, como un plan de ayudas para la colocaci¨®n de filtros en los camiones y los autobuses m¨¢s antiguos y para la renovaci¨®n de la flota de autom¨®viles.

Con la controvertida zona 80, que afecta a 77 kil¨®metros de varias v¨ªas r¨¢pidas de acceso a Barcelona, no solo hay en juego miles de votos. CC OO advierte que los partidos deben sopesar tambi¨¦n lo que hay en el otro lado de la balanza: los beneficios para la salud de los ciudadanos. CC OO pide a los partidos que no banalicen la medida "por la necesidad de conseguir votos" y advierte que la flexibilizaci¨®n del l¨ªmite de velocidad es "populista, electoralista y un acto de terrorismo medioambiental".

Si bien Barcelona y su ¨¢rea metropolitana han reducido los niveles de part¨ªculas a menos de 10 micras (PM 10), los de di¨®xido de nitr¨®geno siguen a¨²n por encima de los l¨ªmites admitidos por la UE. El tope se sit¨²a en 40 microgramos por metro c¨²bico de aire, pero 14 de las 25 estaciones de medici¨®n arrojan cifras superiores, seg¨²n la Generalitat.

Medio Ambiente asegura que entre el 40% y el 50% de las emisiones de part¨ªculas PM10 y de di¨®xido de nitr¨®geno en el ¨¢rea metropolitana es atribuible al tr¨¢fico de veh¨ªculos. En los tramos donde se ha implantado el l¨ªmite de los 80 por hora, estos elementos contaminantes, que pueden afectar gravemente al sistema respiratorio, han descendido el 11%, a¨²n lejos del 17% que se hab¨ªa fijado la Generalitat.

ICV se vale de estas cifras para exigir que la prohibici¨®n siga intacta, al menos hasta que se cumplan los niveles de contaminaci¨®n permitidos por la UE. La Comisi¨®n Europea tiene abierto un procedimiento de infracci¨®n contra Espa?a, que podr¨ªa acabar en una multa millonaria, por incumplir la directiva sobre la calidad del aire en el ¨¢rea del Barcelon¨¨s, Baix Llobregat y Vall¨¨s. Fuentes de la Comisi¨®n aseguran que est¨¢n analizando la documentaci¨®n requerida a Espa?a, que debe demostrar que est¨¢ tomando medidas para cumplir la directiva.

Xavier Querol, profesor de investigaci¨®n del CSIC en el Instituto de Diagn¨®stico Ambiental y el Agua (IDAEA) de Barcelona, opina que la zona 80 "no es una gran medida que resuelve por s¨ª sola el problema de la contaminaci¨®n", pero s¨ª "es un granito de arena que contribuye a rebajarla". El cient¨ªfico no ve mal la idea de suavizar el l¨ªmite de 80 km -por ejemplo, permitiendo los 100 km durante la noche-, pero considera que ser¨ªa m¨¢s efectivo emplear medidas que incidan en el centro de la ciudad. En otras ciudades ha dado resultado, seg¨²n Querol, prohibir o poner tasas para acceder a determinados barrios en autom¨®vil.