Espa?a da prioridad a la relaci¨®n con Rabat

La posici¨®n espa?ola sobre la crisis desatada por el desmantelamiento violento del campamento de saharauis cercano a El Aai¨²n hab¨ªa sido fijada ayer en Se¨²l por el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero: "La relaci¨®n con Rabat es un tema prioritario, un tema de Estado... Los intereses de Espa?a es lo que el Gobierno tiene que poner por delante...". Y as¨ª lo hizo ayer la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jim¨¦nez, que solo pronunci¨® algunas palabras sobre la "grave crisis" y sobre la distinta visi¨®n de Espa?a y Marruecos sobre la libertad de prensa que podr¨ªan molestar muy levemente en Rabat. Tambi¨¦n exigi¨® que se esclarezca "urgentemente" la muerte de un saharaui con nacionalidad espa?ola. Pero no es previsible que las aguas se salgan del cauce. "Marruecos es un socio clave" y las relaciones entre Espa?a y este pa¨ªs del Magreb son "s¨®lidas", declar¨® la jefa de la diplomacia.

"Marruecos es clave y las relaciones con ese pa¨ªs son s¨®lidas", dice Jim¨¦nez

"Ning¨²n Gobierno ha condenado lo sucedido en el S¨¢hara. Ninguno"

Siempre con esta premisa en mente, Jim¨¦nez llev¨® ayer a cabo un ejercicio de equilibrismo respecto a uno de los v¨ªnculos bilaterales m¨¢s delicados para la diplomacia espa?ola. Tras varias jornadas de total indulgencia hacia el reino de Marruecos, Jim¨¦nez se limit¨® a definir la toma violenta por la polic¨ªa marroqu¨ª del campamento saharaui, el pasado lunes, como "una crisis grave". Eludi¨® la ministra as¨ª toda condena expl¨ªcita al Gobierno de Rabat por el desenlace de una protesta que ha provocado una quincena de muertes, entre ellos un saharaui con nacionalidad espa?ola, en un territorio sobre el que Espa?a tiene una responsabilidad especial como ex potencia colonial. La mecha diplom¨¢tica, no obstante, puede encenderse en cualquier instante a cuatro d¨ªas de la visita a Madrid del ministro del Interior marroqu¨ª.

Jim¨¦nez lament¨® "profundamente" la p¨¦rdida de vidas humanas, se solidariz¨® con las v¨ªctimas, envi¨® un llamamiento a la "contenci¨®n" de los beligerantes, y proclam¨® "el compromiso del Gobierno espa?ol en la defensa de los derechos humanos". Pero respecto a la crisis desatada en El Aai¨²n, Marruecos no debe albergar temor a reacciones pol¨ªticas contundentes. La ministra, al igual que Zapatero horas antes, hizo especial hincapi¨¦ en la importancia estrat¨¦gica del v¨ªnculo Madrid-Rabat y en los intereses de Espa?a. "Es una relaci¨®n esencial que debemos preservar por razones de seguridad, de combate contra el terrorismo, de control de los flujos de inmigraci¨®n y del narcotr¨¢fico, y por las relaciones comerciales y econ¨®micas", afirm¨® Jim¨¦nez, que dot¨® de cierta solemnidad a su comparecencia. "No tenemos", a?adi¨®, "ning¨²n temor a que frenen su colaboraci¨®n en materia de terrorismo e inmigraci¨®n porque las relaciones son s¨®lidas".

En la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, la jefa de la diplomacia espa?ola asegur¨® que "hasta el momento hay cierta confusi¨®n sobre el alcance de los acontecimientos tanto en un lado como en el otro". A la pregunta de por qu¨¦ no condena el Gobierno espa?ol lo sucedido en el campamento de Agdaym Izik, Jim¨¦nez respondi¨®: "Para condenar habr¨ªa que tener un conocimiento muy concreto" de lo sucedido. Tambi¨¦n se escud¨® en la necesidad de tener cautela. "No queremos apresurarnos. Ning¨²n Gobierno lo ha condenado, ninguno". [Horas despu¨¦s de esta declaraci¨®n, el Gobierno de Venezuela del presidente Hugo Ch¨¢vez emiti¨® un comunicado para condenar "represi¨®n marroqu¨ª" contra los saharauis].

Jim¨¦nez tan solo se mostr¨® m¨¢s contundente a la hora de reclamar al Ejecutivo marroqu¨ª que esclarezca "urgentemente las circunstancias de la muerte" de un ciudadano espa?ol -Babi Hamday Buyema- durante los disturbios. La ministra a?adi¨® que se est¨¢ a la espera de que alg¨²n organismo internacional elabore un informe que esclarezca lo ocurrido a comienzos de semana en el campamento montado a 15 kil¨®metros de la capital saharaui.

Ese esclarecimiento puede hacerse esperar. El bloqueo informativo es casi total y a organizaciones de derechos humanos que trabajan en el S¨¢hara se les ha prohibido el acceso a la zona de los disturbios. "Hemos reiterado al Gobierno marroqu¨ª la solicitud de que se deje trabajar a los periodistas. Lamentamos la expulsi¨®n de los periodistas de la cadena SER y pedimos que se restituya la acreditaci¨®n al corresponsal de Abc", dijo Jim¨¦nez. Hasta el momento, sus demandas caen en saco roto.

En el ¨¢mbito pol¨ªtico espa?ol, todo apunta a un debate agrio. El PP pidi¨® la comparecencia de Jim¨¦nez en el Senado. Le preguntar¨¢n por las medidas que pueda adoptar el Ejecutivo y si este piensa condenar el asalto marroqu¨ª al campamento saharaui.