Los socialistas buscan a la desesperada movilizar 300.000 votos en Catalu?a

El PSOE afrontan esta semana en Catalu?a el m¨¢s duro de sus combates para evitar volver a caer al pozo justo cuando los recientes cambios en el Gobierno hab¨ªan conseguido imprimir una t¨ªmida imagen de remontada. Las elecciones auton¨®micas del pr¨®ximo domingo ser¨¢n el term¨®metro para las municipales y auton¨®micas de mayo. Una derrota estrepitosa como la que prev¨¦n las encuestas ser¨ªa un precedente desastroso. De ah¨ª que los socialistas catalanes se hayan lanzado a la desesperada a movilizar a los aproximadamente 300.000 votantes que en 2006 les dieron su apoyo y que ahora, seg¨²n sus estimaciones, no est¨¢n seguros de hacerlo.

Los sondeos internos apuntan que un 40% de los votantes del Partit dels Socialistes (PSC) no sabe si acudir a votar el domingo, y de estos incluso hay quien sopesa no hacerlo esta vez por Jos¨¦ Montilla. Este no se cansa de apelar al mill¨®n y medio de personas que dicen las encuestas publicadas que no ir¨¢ a votar. La abstenci¨®n beneficia a la derecha, y de la crisis hay que salir por la izquierda, clama mitin tras mitin. "Quiero que la Catalu?a silenciosa hable, no quiero un pa¨ªs de izquierdas con un Gobierno de derechas", proclam¨® ayer, para a?adir que esta vez el PSC tiene "bolsas de voto oculto" y que todav¨ªa "hay partido".

El cabeza de lista por Lleida llama "gilipollas" a CiU y luego pide perd¨®n

Los socialistas catalanes celebraron ayer su segundo gran acto de campa?a con el presidente del Gobierno, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Todos llamaron a la movilizaci¨®n. Saben que tienen enfadados a varios colectivos. El ala catalanista del partido est¨¢ desmovilizada por el recorte del Estatuto auton¨®mico, y a la espera de pasar a la acci¨®n si la previsible debacle empuja a Montilla a marcharse a corto plazo. Colectivos que han votado tradicionalmente al PSC, como profesores, m¨¦dicos y funcionarios, est¨¢n ahora en pie de guerra por las rebajas salariales. A los socialistas no les quedan aliados en el sector p¨²blico.

En las auton¨®micas de 2006, el PSC obtuvo 796.173 votos. En las generales de 2008, Zapatero sumo 1,6 millones. A una semana de esta cita electoral, Montilla asegura en los actos que est¨¢ animado, aunque alguno de sus gestos le contradice. Y desde el viernes pasado est¨¢ convocando a la militancia "a un combate, a una movilizaci¨®n general" para llenar el pr¨®ximo jueves el Palau Sant Jordi de Barcelona, su recinto fetiche, en el acto final de campa?a. El partido est¨¢ invirtiendo grandes esfuerzos para que militantes y simpatizantes abarroten el pabell¨®n, como en 2008 con Carme Chac¨®n como cabeza de lista. Sobre todo porque CiU tambi¨¦n se ha atrevido con este recinto. Celebrar¨¢ all¨ª su mitin final el viernes, 24 horas despu¨¦s. "Queda una semana de trabajo", anim¨® Zapatero. Los responsables de la campa?a socialista esperan despertar a esos 300.000 votantes desmovilizados con dos o tres anuncios de impactos. El primero fue el de Montilla el pasado viernes, cuando adelant¨® que es la ¨²ltima vez que se presenta a la presidencia de la Generalitat. La interpretaci¨®n de fuentes socialistas es que quiere dejar claro que solo pide una segunda oportunidad. Pero externamente tambi¨¦n se ha le¨ªdo como un intento de ganar votos a la desesperada. Involuntariamente, un segundo impacto lo caus¨® ayer el cabeza de lista por Lleida, Joaquim Llena. Llam¨® "gilipollas" a sus rivales de CiU. Luego, se disculp¨®, forzado por el compromiso de hacer una campa?a "limpia".