Espa?a, a la cola europea en aborto farmacol¨®gico
Solo un 4% de las interrupciones se realiza por este m¨¦todo, mientras en la UE se acercan a la mitad
Abortar en Espa?a implica hacerlo en un quir¨®fano. La t¨¦cnica instrumental o quir¨²rgica supone casi el 95% de las interrupciones voluntarias del embarazo (IVE). Viendo las cifras, parece que no exista otra opci¨®n. Pero s¨ª la hay. Es el aborto farmacol¨®gico y hace 10 a?os que se legaliz¨® la sustancia que lo permite, la mifepristona, m¨¢s conocida como RU486. Esta opci¨®n, que se usa solo el 4,3% de las veces, se supone que es m¨¢s barata y menos invasiva, pero no se usa. Los contrarios dicen que tiene efectos secundarios y que hay una inercia interesada para no utilizarlo.
Basta ver las estad¨ªsticas de los pa¨ªses vecinos. En Portugal, el 67% de las IVE son farmacol¨®gicas. En Francia, el 49%. En Inglaterra y Gales, suponen el 40%. Un porcentaje que sube hasta el 70% en Escocia y Finlandia. Solo Italia lo usa menos que Espa?a, pero porque no se vend¨ªa hasta diciembre del a?o pasado. Antes la empleaban algunas cl¨ªnicas, pero apenas hay datos, seg¨²n reconoce el Ministerio de Sanidad italiano.
Usar la RU486 abaratar¨¢ la prestaci¨®n, dice la consejera catalana
Sanidad afirma que es potestad de los m¨¦dicos elegir el sistema que usan
"Es una pena que no se est¨¦ utilizando en Espa?a. El farmacol¨®gico tiene muchas ventajas con respecto al quir¨²rgico", afirma Javier Mart¨ªnez Salme¨¢n, jefe de Ginecolog¨ªa del hospital Severo Ochoa (Legan¨¦s) y asesor del Ministerio de Sanidad. El m¨¦todo qu¨ªmico m¨¢s habitual, indicado solo hasta la semana ocho o nueve de gestaci¨®n, consiste en administrar la RU486 y, a los dos d¨ªas, otra pastilla, el misoprostol, que provoca contracciones en el ¨²tero. "As¨ª se expulsa [el feto] como una menstruaci¨®n un poco m¨¢s abundante", explica.
Como el instrumental, este sistema tiene alguna contraindicaci¨®n (alergia al f¨¢rmaco, dolencia suprarrenal grave). Adem¨¢s, el aborto puede tardar en producirse varias horas. Y a veces -entre el 1% y el 2%, seg¨²n el ginec¨®logo Josep Llu¨ªs Carbonell, especialista de referencia en aborto farmacol¨®gico- no funciona y hay que hacer un legrado igualmente.
Varias causas explican esta falta de uso. Ezequiel P¨¦rez Campos, presidente de la Fundaci¨®n de la Sociedad Espa?ola de Contracepci¨®n, apunta a la costumbre: "La tradici¨®n en las cl¨ªnicas que practican abortos es el m¨¦todo instrumental". Y como en Espa?a el 98% de las IVE se realizan en centros privados, lo que ellas hacen se convierte en norma. Algunos expertos, que pidieron anonimato para no buscarse problemas con sus colegas, se?alaron las p¨¦rdidas econ¨®micas que puede suponer para las cl¨ªnicas la generalizaci¨®n del aborto farmacol¨®gico.
A falta de una estrategia nacional -como ha sucedido en la mayor¨ªa de pa¨ªses europeos-, son las comunidades aut¨®nomas las que empiezan a tomar posiciones. La consejera de Sanidad catalana, Marina Geli, anunci¨® hace unos meses su intenci¨®n de promover el aborto farmacol¨®gico. Su previsi¨®n es que en 2011 supongan la mitad de las IVE (ahora son el 0,1%) en su autonom¨ªa. All¨ª, ser¨¢n los ginec¨®logos de los centros p¨²blicos de salud sexual y reproductiva los que administren los f¨¢rmacos. Algo que, seg¨²n Geli, abaratar¨¢ la prestaci¨®n (las pastillas cuestan 50 euros). Las mujeres podr¨¢n seguir eligiendo el m¨¦todo quir¨²rgico si es lo que quieren.
Tambi¨¦n el Pa¨ªs Vasco estudia generalizar la RU486, seg¨²n anunci¨® el consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, en septiembre. En esta comunidad ya hay centros p¨²blicos -tambi¨¦n privados- que practican aborto farmacol¨®gico. All¨ª supone una de cada tres intervenciones. Hay, pues, enormes diferencias entre comunidades, que a¨²n pueden crecer m¨¢s cuando unas empiecen a fomentar el m¨¦todo. El Ministerio de Sanidad no entra a valorar la posible inequidad que puede generar esto para las mujeres de distintos territorios. "Es potestad de los m¨¦dicos elegir el m¨¦todo", se limita a responder.
Carbonell, que en su cl¨ªnica de Valencia realiza un 50% de abortos con el m¨¦todo farmacol¨®gico, sostiene que el hecho de que hasta fechas muy recientes el aborto, de cualquier tipo, estuviera "restringido" ha dificultado que se pudiera abordar el debate de los distintos sistemas. Adem¨¢s, con el farmacol¨®gico, "el rol del m¨¦dico pasa a un segundo o tercer plano", asegura para tratar de explicar la excepci¨®n espa?ola. "Unas pastillas lo hacen todo. Es una revoluci¨®n comparable a la p¨ªldora anticonceptiva".
P¨¦rez Campos tambi¨¦n est¨¢ a favor del m¨¦todo. "Si se le puede evitar a la mujer la intervenci¨®n quir¨²rgica, ?por qu¨¦ no hacerlo? Las Administraciones tienen que implicarse", invita. "El Ministerio de Sanidad se puede plantear darle un empuj¨®n", coincide Mart¨ªnez Salme¨¢n.
Del otro lado est¨¢ Santiago Barambio, presidente de Acai, la asociaci¨®n que agrupa a una treintena de cl¨ªnicas de IVE en todo el pa¨ªs: "Si en Espa?a se ha utilizado poco es porque las mujeres no lo quer¨ªan". Asegura que, en su cl¨ªnica de Barcelona, cobra lo mismo por un m¨¦todo que por otro. En su opini¨®n, los efectos adversos del f¨¢rmaco -"los hay en un 40% de los casos", afirma- superan a las ventajas. Y le augura poco ¨¦xito al plan de Geli: "Cuando aparezcan los efectos adversos un porcentaje importante de mujeres ir¨¢ a las urgencias de los hospitales, y acabar¨¢ saliendo m¨¢s caro".
Mientras, los expertos, como los que elaboraron el informe sobre aborto de 2008 en Madrid, siguen asombr¨¢ndose de la excepci¨®n espa?ola. "Llama la atenci¨®n", dijeron, las "enormes diferencias con el resto de pa¨ªses europeos". M¨¢s a¨²n cuando el 63% de las IVE en Espa?a son de ocho semanas o menos.
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