La utop¨ªa seg¨²n el artista Adri¨¤ Juli¨¤
La galer¨ªa Soledad Lorenzo expone una lectura sobre la doctrina de Fourier
Los sue?os ut¨®picos dejan a veces curiosas estelas. Como en un viaje de ida y vuelta, la galer¨ªa Soledad Lorenzo acoge desde ayer la exploraci¨®n del artista Adri¨¤ Juli¨¤ tras los pasos del m¨¦dico franc¨¦s Beno?t Jules Mure en Brasil, donde este seguidor de Charles Fourier cre¨® los falansterios de Sa¨ª y Palmital a mediados del siglo XIX. El intento de inventar una nueva armon¨ªa social, tal y como propon¨ªa el ideal fourierista, no dur¨® m¨¢s de un a?o, pero Juli¨¤ (Barcelona, 1974) ha recuperado las huellas de aquel experimento en su obra Las ruinas del habla, que ya se mostr¨® en la 7? Bienal de Mercosur, celebrada en Porto Alegre en 2009, y en el Museo Tamayo de la capital mexicana el pasado abril.
El proyecto recupera la historia de un falansterio brasile?o
El proyecto consta de dos pel¨ªculas, una escultura y una performance (que se realiz¨® ayer). Uno de los filmes reconstruye la historia del falansterio de Sa¨ª a trav¨¦s de cuatro hilos narrativos: un grupo de teatro que en 1992 realiz¨® una obra sobre la experiencia, un especialista en el fourierista disidente Michel Derrion, una historiadora que escribe un diccionario propio para leer cartas y manuscritos de los colonos, y el descendiente de la ¨²nica familia de colonos que permaneci¨® en la zona. "La colonia solo dur¨® un a?o y no queda casi nada de aquel experimento. Yo miro hacia la historia a trav¨¦s de estos cuatro elementos y con cada uno recupero un momento de aquel proceso", explicaba el pasado mi¨¦rcoles el artista, residente en Los ?ngeles.
El segundo filme es una secuencia de fotograf¨ªas tomadas por un bi¨®logo de la Universidad de la Regi¨®n de Joinville, que evoca el protagonismo de la naturaleza en el ideal fourierista. Igual que el saltamontes que, gracias a un procedimiento electroqu¨ªmico, se ha convertido en una escultura de cobre que tambi¨¦n forma parte de la muestra. La propuesta de Juli¨¤ se completa con la performance que tuvo lugar ayer, en la que cuatro actores escenificaron uno de los di¨¢logos del primer filme en distintas estancias de la galer¨ªa, como si tratasen de acentuar la descomposici¨®n de las dimensiones de espacio y tiempo. La grabaci¨®n del audio quedar¨¢ incorporada a la instalaci¨®n.
Juli¨¤ se niega a aceptar interpretaciones ¨²nicas de la historia. En este caso, de la de los falansterios brasile?os: "Me interesa la utop¨ªa y quer¨ªa hablar de las distintas lecturas de una historia, c¨®mo a trav¨¦s de documentos te puedes apropiar de la misma. Pero yo intento cuestionar el documento, pienso en ello como algo en movimiento con lo que puedo trabajar. Es cuestionar la verdad, desvelar que hay diferentes historias de una historia".
Esta visi¨®n no lineal, fragmentada, de la realidad recuerda la suerte que tuvieron las doctrinas del socialista ut¨®pico: "Tanto la obra de Fourier como los diferentes intentos de llevar a cabo los falansterios alrededor del mundo se han divulgado de una forma irregular casi invisible, eclipsada. [...] Es interesante pensar en la vigencia de Fou-rier desde este estado de desaparici¨®n constante", explicaba Juli¨¤ en un texto publicado con motivo de la exposici¨®n de Ruinas del habla en M¨¦xico.
Ruinas del habla, exposici¨®n de Adri¨¤ Juli¨¤. Galer¨ªa Soledad Lorenzo. Orfila, 5.
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