El soberanismo se impone y da un giro conservador

El soberanismo va calando en Catalu?a. El Centro de Estudios de Opini¨®n de la Generalitat (CEO), el CIS catal¨¢n, marc¨® en su bar¨®metro de octubre que los partidarios de una Catalu?a independiente alcanzaban el 25%. La cifra, la m¨¢s alta desde que el CEO realiza un bar¨®metro trimestral de opini¨®n, se alcanz¨® tras la sentencia del Tribunal Constitucional que recort¨® el Estatuto. Las elecciones del domingo midieron la salud real y el alcance del soberanismo en la c¨¢mara catalana. Y los partidarios de la autodeterminaci¨®n de Catalu?a aumentaron su peso en el Parlamento. Vencieron claramente a los partidos que optan por el federalismo o el autonomismo. El independentismo crece y cada vez es m¨¢s transversal.

1?. Los soberanistas, federalistas y autonomistas.

Los partidos catalanes se pueden dividir en tres, seg¨²n la relaci¨®n que desean con el resto de Espa?a. Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) es soberanista, lo que quiere decir que apuesta por la autodeterminaci¨®n de Catalu?a pero no se moja abiertamente por la independencia; reduce todos sus planteamientos a la defensa del "derecho a decidir sin l¨ªmites". Quien s¨ª lo hace es Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y el nuevo partido del arco parlamentario, Solidaritat Catalana per la Independ¨¨ncia (SI), la coalici¨®n liderada por el ex presidente del Bar?a Joan Laporta. Espoleadas por el crecimiento de CiU, estas fuerzas aumentan siete esca?os respecto a los anteriores comicios, y gozan de una amplia mayor¨ªa, con 76 diputados. El resto de partidos se queda con 59 esca?os, influidos de la p¨¦rdida del Partit dels Socialistes. PSC e Iniciativa per Catalunya defienden un modelo federal; Partido Popular y Ciutadans son partidarios de un autonomismo como el actual, m¨¢s centralista.

2?. El desplome de ERC.

Pese al crecimiento del soberanismo, ERC, habitual aglutinador de estos votantes, pierde apoyos por todos los flancos. Las nuevas fuerzas independentistas han acumulado m¨¢s de 140.000 votos, muchos de ellos procedentes de las arcas republicanas. Parte de los votantes anteriores de ERC se han decantado por CiU, que en esta legislatura ha acentuado su perfil soberanista. Todo ello condena a ERC a ser la quinta fuerza parlamentaria.

3?. El giro conservador.

El batacazo de ERC resta fuerza a la izquierda independentista, que de 21 diputados pasa a diez. El empuje soberanista lo aporta el flanco conservador. El auge de CiU lo explica en gran parte. Pero tambi¨¦n la entrada de SI, partidario de declarar unilateralmente la independencia y cuyo programa, poco definido, es de acento liberal.