Cientos de gitanos 'zamoranos' vuelven de su destierro
Recibidos con j¨²bilo en Porri?o, donde algunos acudieron al mercadillo
Las calles de Torneiros, en Porri?o, recuperaron ayer un ambiente de sana alegr¨ªa con un menudeo de saludos euf¨®ricos y convites en los bares a los gitanos conocidos como zamoranos que el pasado 26 de noviembre huyeron en estampida. Algunos incluso se reincorporaron a sus puestos en el mercadillo que se celebr¨® ayer - del que han faltado dos semanas- donde recibieron an¨¢logas muestras de satisfacci¨®n de su clientela. Nadie aludi¨®, sin embargo, a las motivaciones de su hu¨ªda.
Los zamoranos -de 120 a 130 familias radicadas desde hace 35 a?os en Torneiros y otras 20 en Tui, de 600 a 800 personas en total- abandonaron abruptamente y con llantos sus domicilios, el pasado 26 de noviembre, camino del destierro, despu¨¦s de una semana de tensiones y negociaciones en las que participaron los patriarcas gallegos de la etnia, de Ferrol a Tui pasando por A Coru?a y Lugo, bajo la presidencia del rey gallego, Olegario Gim¨¦nez Salazar.
Hay voluntad de arreglo, pero el problema de fondo est¨¢ sin resolver
La Asociaci¨®n del Pueblo Gitano, que preside su hijo, Sina¨ª Gim¨¦nez, descart¨® "tajantemente" que la ra¨ªz del conflicto fuera econ¨®mica, por una pugna en el control de los mercadillos, y la atribuy¨® a un l¨ªo amoroso -una zamorana que manten¨ªa relaciones con dos j¨®venes de familias distintas- en el que insist¨ªa ayer. Pero ese oscuro episodio no fue la causa ¨²ltima de la estampida, seg¨²n las dem¨¢s fuentes consultadas por este peri¨®dico, que lo consideran un "argumento para despistar".
Los zamoranos, pese a las d¨¦cadas transcurridas desde su asentamiento en Porri?o, no hadejaron nunca de reconocer el ascendente sobre ellos de las familias gallegas, cuya hegemon¨ªa est¨¢ documentada desde la incursi¨®n en Galicia de la primera, a finales del siglo XIX. Olegario Gim¨¦nez, el rey, es el pen¨²ltimo descendiente directo de aquella familia, que hoy re¨²ne a m¨¢s de 300 miembros. Y los zamoranos, porque tambi¨¦n est¨¢ en la tradici¨®n de la etnia, acataron la soluci¨®n del destierro antes que llevar el conflicto a mayores situaciones de violencia.
Huyeron hacia sus lugares de origen -Benavente, Zamora, Valladolid, Burgos, Cantabria..., donde conservaran familiares pr¨®ximos- el ¨²ltimo viernes de noviembre y comenzaron a regresar a sus domicilios el domingo por la noche, "despu¨¦s de obtener plenas garant¨ªas sobre sus vidas y haciendas", seg¨²n han se?alado fuentes pr¨®ximas a la investigaci¨®n, que realiza con especial atenci¨®n la Guardia Civil desde los primeros momentos del conflicto. Esas garant¨ªas les fueron ofrecidas por el consejo de ancianos y patriarcas gallegos, a instancias de la Asociaci¨®n del Pueblo Gitano, y han sido ratificadas por otros patriarcas de la etnia en distintas demarcaciones de Castilla y Le¨®n. Pero no hay constancia de que hayan regresado todos y se duda de que algunos lo hagan.
Solo a la ciudad de Zamora fueron a parar 30 familias, m¨¢s de 100 personas, que reclamaron ayuda al Ayuntamiento. Unas expresaron su confianza en poder volver a Galicia y otras se?alaron que no lo har¨ªan. El jueves ¨²ltimo, al menos media docena de ni?os ya hab¨ªan sido escolarizados en la ciudad.
EL PA?S no ha podido conocer los t¨¦rminos del arreglo que ha permitido el regreso, aunque todas las fuentes coinciden en que los problemas de fondo, que afectan a unas 2.500 personas en Pontevedra, est¨¢n sin resolver. Los dirigentes ¨¦tnicos siguen trabajando para lograrlo.
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