"Ya era hora de levantar la voz"
A trav¨¦s de la red social, los atletas m¨¢s comprometidos han generado un movimiento ¨²nico
Cuando, en la Operaci¨®n Puerto, la Guardia Civil introdujo el bistur¨ª sin anestesia en el complaciente ciclismo espa?ol, la respuesta solidaria y colectiva de los corredores fue una huelga, pero no para protestar contra los tramposos que ensuciaban su deporte, sino contra la publicaci¨®n en EL PA?S de los papeles de la trama, contra el retrato tan desaseado que se ofrec¨ªa de sus sudores.
Cuatro a?os despu¨¦s, una operaci¨®n similar, sin anestesia y con bistur¨ª, al atletismo espa?ol ha generado tambi¨¦n un movimiento solidario y colectivo de los deportistas, pero esta vez no ha consistido en una huelga corporativa para ocultar sus miserias, sino en un grito de apoyo a las investigaciones por parte de la mayor¨ªa de los atletas, que finalmente se han decidido a trazar p¨²blicamente una l¨ªnea entre ellos y los otros.
"A diferencia de los ciclistas, queremos la investigaci¨®n policial", dice ?ngel Rodr¨ªguez
"El objetivo del comunicado no era hacer una lista de buenos y malos"
"Ya era hora de levantar la voz", dice el maratoniano extreme?o Pablo Villalobos, uno de los generadores a trav¨¦s de mensajes de un movimiento que sum¨® energ¨ªa a trav¨¦s de Facebook y se concret¨® en un manifiesto que, en principio, firmaron 61 atletas y al que luego se sumaron algunas decenas m¨¢s.
"Es que, a diferencia de los ciclistas, nosotros estamos a favor de la investigaci¨®n policial. Se hizo r¨¢pidamente porque quer¨ªamos dar una respuesta inmediata", dice, veloz, el velocista madrile?o ?ngel David Rodr¨ªguez, otro de los inquietos; "as¨ª que no pudimos localizar a muchos que quer¨ªan haber firmado y no salieron en la primera tanda, y no han parado de llamarme, 'oye, que no estoy en la lista y no quiero que piensen que no estoy de acuerdo o, peor, que yo me dopo'. Pero ese no era el objetivo del comunicado, hacer una lista de buenos y malos. No quer¨ªa tampoco ser ofensivo de cara a condenar a nadie".
Entre ambos atletas, a los que enseguida se unieron Arturo Casado, el madrile?o campe¨®n de Europa de 1.500 metros, y, en Sevilla, Luis Alberto Marco, un joven ochocentista, crearon en Facebook un grupo llamado Posible comunicado atletas equipo nacional, en el que empezaron a florecer, como en mayo del 68, ideas y bocetos del manifiesto final, que se puede leer a¨²n en la p¨¢gina web de la Federaci¨®n Espa?ola de Atletismo.
"Hubo un proceso de negociaci¨®n muy libre y muy abierto", dice Villalobos; "varios quer¨ªan esperar a ver si se resolv¨ªa la imputaci¨®n de algunos, pero, como no d¨¢bamos nombres, eso no era ning¨²n problema. Adem¨¢s, la mayor¨ªa quer¨ªamos aprovechar para levantar la voz y decir que estamos a favor de la ley dentro y fuera de las pistas".
"Hicimos finalmente algo moderado que pudiera aglutinar al m¨¢ximo de gente", dice Rodr¨ªguez, quien no piensa que el colectivo creado bajo el manifiesto deba ir m¨¢s all¨¢: "Espero que no genere tensiones entre los atletas y tampoco que se piense que criticamos a la federaci¨®n. La federaci¨®n puede llegar hasta donde llega en la lucha contra el dopaje. Hace controles, pero no analiza los resultados; hay otras autoridades. El problema no es de la federaci¨®n, sino que era de la legislaci¨®n, que ahora s¨ª que persigue el dopaje".
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