Il Cavaliere se juega su Gobierno en una moci¨®n de censura
La ruptura del virtual empate en la votaci¨®n de hoy en la C¨¢mara depende de dos legisladores indecisos y dos diputadas embarazadas
Una vez fracasadas las negociaciones entre los emisarios del presidente de la C¨¢mara, Gianfranco Fini , y el primer ministro, Silvio Berlusconi, el Gobierno italiano se juega hoy su suerte pol¨ªtica en la C¨¢mara de Diputados del Parlamento italiano. Las dos mociones de censura, una presentada por la oposici¨®n de centro-izquierda y otra por los democristianos y el grupo disidente de Fini, Futuro y Libertad (FLI), se votar¨¢n juntas a las cinco de la tarde.
Las fuerzas se presentan extremadamente igualadas. Seg¨²n las ¨²ltimas cuentas de anoche, se producir¨ªa un dram¨¢tico empate a 311 votos. As¨ª, el futuro judicial de Berlusconi y la supervivencia de la que hasta julio fue la mayor¨ªa de Gobierno m¨¢s amplia de la historia republicana depender¨¢n hoy, salvo sorpresa o trampantojo de ¨²ltima hora, de un peque?o pu?ado de diputados . La clave ser¨¢n dos parlamentarios del grupo de Futuro y Libertad, de apellidos Moffa y Siliquini, y dos diputadas embarazadas, una del Partido Dem¨®crata y otra adscrita al FLI.
El primer ministro dice que desatar una crisis es "una locura pol¨ªtica"
La Fiscal¨ªa de Roma ha abierto una causa por compra de diputados
Si cualquiera de ellas se pone de parto hoy, la suerte del pa¨ªs y del Gobierno de Berlusconi podr¨ªa bailar en el ¨²ltimo segundo. Una tercera diputada embarazada, la finista Giulia Bongiorno, est¨¢ en la cama y no podr¨¢ asistir. Una vez m¨¢s, la sentencia del escritor Ennio Flaiano cobra actualidad: "La situaci¨®n es grave, pero no seria".
Las 48 horas m¨¢s largas para el Ejecutivo de centro-derecha comenzaron ayer en el Senado, donde esta ma?ana se votar¨¢ una cuesti¨®n de confianza presentada por el propio Pueblo de la Libertad que Berlusconi tiene garantizado ganar por amplio margen.
El problema serio est¨¢ en la C¨¢mara de Diputados, donde los 35 diputados de FLI que abandonaron el Pueblo de la Libertad con el presidente de la C¨¢mara tienen en teor¨ªa la llave de la victoria, si no fuera por sus dos indecisos y porque Berlusconi lleva semanas tocando a otros parlamentarios de la oposici¨®n (la Fiscal¨ªa de Roma ha abierto una investigaci¨®n por la compraventa de diputados) para que se cambien de chaqueta.
Haciendo de tripas coraz¨®n, y por si fallan las fren¨¦ticas negociaciones de las ¨²ltimas horas, el primer ministro intent¨® ganarse ayer para la causa a los democristianos de la UDC, con un discurso conciliador pero muy amenazador para la alianza, el llamado Tercer Polo, forjada en las ¨²ltimas semanas entre Gianfranco Fini y Pierferdinando Casini, l¨ªder de la UDC.
Como hab¨ªa previsto Fini el d¨ªa anterior, Berlusconi toc¨® m¨²sica celestial para los o¨ªdos de sus cr¨ªticos: ofreci¨® "un nuevo pacto de legislatura a los centristas y a todos los moderados", se mostr¨® dispuesto a "renovar todo cuanto sea necesario, tanto en el programa como en la coordinaci¨®n del Ejecutivo", y les invit¨® a formar un equipo, argumentando que la apertura de una crisis para la que "no hay soluci¨®n previsible" ser¨ªa una "locura pol¨ªtica".
"Necesitamos continuidad, eficiencia perfecta, capacidad de decisi¨®n; de todo, salvo una crisis con un salto a lo desconocido", agreg¨® el presidente del Gobierno, haciendo hincapi¨¦ en la necesidad de "estabilidad" ante las turbulencias que azotan los mercados financieros europeos. La respuesta de Casini fue m¨¢s bien g¨¦lida: "Si es verdad que Berlusconi quiere abrir una nueva fase, que dimita antes de votar ma?ana; si no lo hace, sus palabras seguir¨¢n siendo solo charlas e hipocres¨ªa", zanj¨®.
Dirigi¨¦ndose a los diputados de Futuro y Libertad (FLI), Berlusconi dijo: "Se puede hacer de todo menos traicionar el mandato de los electores". Y a?adi¨®: "No pueden sumarse de forma grotesca los votos sustra¨ªdos al PDL a los de las fuerzas opositoras del Partido Dem¨®crata (PD) y de Italia de los Valores (IDV)".
En su r¨¦plica final, se encomend¨® de forma c¨ªnica a "los amigos de FLI, dese¨¢ndoles que pasen una noche llena de reflexi¨®n que les d¨¦ discernimiento". Y subray¨® que es "el pueblo" el ¨²nico que puede decidir si un Gobierno ha actuado bien o debe dimitir.
Fini contest¨® reuniendo a sus fieles y presentando una contraoferta: "Nosotros nos abstenemos en la cuesti¨®n de confianza en el Senado, y Berlusconi dimite antes de la moci¨®n de censura". La componenda, que servir¨ªa para alejar la ruptura del centro-derecha, fue rechazada por el socio de la Liga del Norte, Umberto Bossi, que desea m¨¢s que nadie que el Gobierno caiga y el jefe del Estado convoque elecciones. "Se acab¨®, no se negocia m¨¢s", enfatiz¨® Bossi, que amenaz¨®: "Si ganamos la moci¨®n de censura por un solo voto, tampoco seguiremos adelante".
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