Ofensiva bolivariana
Hugo Ch¨¢vez se otorga plenos poderes para gobernar a su antojo durante 18 meses
El presidente venezolano Hugo Ch¨¢vez gobernar¨¢ por decreto durante los pr¨®ximos 18 meses, ignorando los resultados de las legislativas de septiembre, en las que no alcanz¨® los dos tercios de esca?os necesarios para aprobar leyes fundamentales. Para obtener esas competencias, pr¨¢cticamente dictatoriales, el l¨ªder bolivariano hizo aprobar al Parlamento saliente una ley habilitante que limita los poderes de la nueva Asamblea -que entrar¨¢ en funciones el 5 de enero- y que le habr¨ªa negado esa libertad de acci¨®n.
La excusa para una maniobra tan patentemente contraria al esp¨ªritu de la ley ha sido la catastr¨®fica inundaci¨®n que ha causado varias docenas de muertos y m¨¢s de 130.000 damnificados. Pero la ofensiva legislativa de una veintena de decretos que se anuncia para los pr¨®ximos d¨ªas desmiente toda intenci¨®n de resta?ar ¨²nicamente las graves heridas causadas por el clima.
El Gobierno, adem¨¢s de legislar sobre infraestructuras y servicios p¨²blicos, lo har¨¢ sobre tierras ociosas urbanas -para legitimar a posteriori ocupaci¨®n de viviendas y hoteles de lujo-, seguridad, defensa y sistema socioecon¨®mico. En particular este ¨²ltimo apartado permitir¨¢ a Ch¨¢vez hacer de su capa un sayo y aprobar todo lo que crea conveniente.
Y junto a la ley habilitante, un navide?azo. As¨ª, los diputados salientes aprobaban una ley de responsabilidad en radio y televisi¨®n, y cuando Caracas fija responsabilidades ya se sabe que siempre es en detrimento de la libertad de expresi¨®n; cuatro leyes sobre competencias de consejos comunales en los que suelen ser mayoritarios los partidarios del Gobierno, para recortar los poderes de alcald¨ªas y gobernaciones en manos de la oposici¨®n; una enmienda a la ley de telecomunicaciones, terreno en el que Ch¨¢vez lo quiere todo para s¨ª, y una ley bancaria que permitir¨¢ la intervenci¨®n de las entidades por razones de inter¨¦s p¨²blico.
Todo un programa directamente encaminado a sentar las bases del socialismo del siglo XXI, eufemismo del control absoluto de los mecanismos del poder, especialmente a la vista de las presidenciales de 2012. Los recientes resultados electorales pod¨ªan hacer temer a Ch¨¢vez que la org¨ªa de elecciones ganadas desde 1999 estuviera tocando a su fin. La dictadura chavista se divisa ya y no precisamente en la lejan¨ªa. La ofensiva bolivariana enfila su ¨²ltima recta.
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