Alfred Kahn, el economista que populariz¨® el avi¨®n

Alfred Kahn sol¨ªa reprender con esta frase a sus empleados: "Si no puedes explicar lo que est¨¢s haciendo en ingl¨¦s sencillo, probablemente es que est¨¦s haciendo algo mal". En opini¨®n del economista estadounidense que abri¨® la senda para popularizar el uso del avi¨®n y los vuelos baratos, hacer comprensible algo a todo el mundo era tambi¨¦n hacerlo "accesible" a todos. Exactamente eso es lo que consigui¨® en el mercado a¨¦reo. Quien ocup¨® el cargo de director de la Junta de Aeron¨¢utica Civil de EE UU en 1977 durante la Administraci¨®n Carter, falleci¨® el 27 de diciembre a los 93 a?os en su casa de Ithaca, Nueva York, debido a un c¨¢ncer, seg¨²n inform¨® la Universidad de Cornell, donde trabaj¨® como profesor.

Dec¨ªa que el servicio ser¨ªa mejor si hab¨ªa competencia entre las compa?¨ªas

El presidente Jimmy Carter apost¨® por la desregulaci¨®n a¨¦rea como un modo de estimular el crecimiento econ¨®mico y Kahn desempe?¨® un papel decisivo a la hora de cosechar el apoyo necesario para aprobar, en 1978, la Ley de Desregulaci¨®n de las Aerol¨ªneas, recoge Associated Press. Hasta ese momento el Estado ejerc¨ªa un rol paternalista sobre unas pocas compa?¨ªas que copaban todo el sector. La Junta de Aeron¨¢utica Civil establec¨ªa d¨®nde pod¨ªan volar las aerol¨ªneas y cuales eran las tarifas en cada ruta en EE UU, lo que imped¨ªa la flexibilidad horaria e impon¨ªa rigidez en los precios. As¨ª, el viaje en avi¨®n era por aquel entonces un lujo reservado principalmente para los altos ejecutivos. Kahn asegur¨® despu¨¦s, cuenta Efe, que la norma benefici¨® a los pasajeros: "Donde es factible la competencia, el Gobierno debe mantenerse al margen". El economista argumentaba que el servicio a los viajeros y a las empresas ser¨ªa mejor si las aerol¨ªneas pod¨ªan competir entre ellas. "Abro la boca y las tarifas bajan", declar¨® al diario Washington Post a comienzos de 1978. Dejando que fueran las aerol¨ªneas, y no el Gobierno, quien decidiese los precios, se provoc¨® una ca¨ªda de las tarifas que dio lugar a una revoluci¨®n en el mercado. Los descuentos consiguieron atraer a muchos m¨¢s viajeros.

En un ensayo de 1998 en The New York Times Kahn calculaba que la medida provocaba un ahorro para los pasajeros de 10.000 millones de d¨®lares al a?o. Sin embargo, la desregulaci¨®n tambi¨¦n provoc¨® la quiebra de algunas compa?¨ªas, mientras otras tuvieron que fusionarse para sobrevivir. Tambi¨¦n aparecieron, a partir de los ochenta, empresas con servicios menos lujosos, pero con precios m¨¢s asequibles.

El trabajo de Kahn fue tambi¨¦n fundamental a la hora de convencer al Congreso para que industrias como el transporte en carreteras, el ferrocarril, los servicios financieros, las telecomunicaciones o la televisi¨®n por cable pudieran fijar los precios sin la participaci¨®n del Gobierno.

Alfred E. Kahn naci¨® el 17 de octubre de 1917 en Paterson, Nueva Jersey, hijo de inmigrantes rusos. Estudi¨® en la Universidad de Nueva York y despu¨¦s en Yale. En 1947 entr¨® como profesor en la Universidad de Cornell, donde paso la mayor parte de su carrera.