La mayor¨ªa del partido veta al "general secretario"
El alcalde de Oviedo y el presidente del PP asturiano vencen al ex ministro
La direcci¨®n del PP asturiano y su presidente, Ovidio S¨¢nchez, al frente; dos tercios del Grupo Popular en el Parlamento aut¨®nomo, las c¨²pulas de 36 de las 78 juntas locales (entre ellas las m¨¢s importantes) y Gabino de Lorenzo, alcalde de Oviedo y principal poder f¨¢ctico en el partido, han sido quienes han puesto fin a la aspiraci¨®n de Francisco ?lvarez-Cascos -el ex secretario general del PP al que Aznar se refiri¨® al despedirle como el "general secretario"- de volver a la primera l¨ªnea de la pol¨ªtica encabezando la candidatura del PP a la presidencia de Asturias.
El veto frontal a Cascos por parte de la estructura de poder del PP regional -en el que conviven sectores heterog¨¦neos, en ocasiones enfrentados- apenas dej¨® otra salida a Rajoy.
Que Cascos aspiraba a volver a la pol¨ªtica asturiana se sab¨ªa desde 1998. Estaba entonces en su cenit -era secretario general del PP y vicepresidente del Gobierno- cuando lo anunci¨®: "Alg¨²n d¨ªa volveremos a trabajar en Asturias. Cualquier buen marinero o monta?ero sabe que mucho m¨¢s importante que la traves¨ªa de ida o la escalada de ascenso es tener preparada la traves¨ªa de vuelta o la cordada de bajada".
Pero, en la pr¨¢ctica, Cascos se fue cerrando todas las posibilidades de retorno. Forz¨® la ruptura del PP asturiano e impuso a dedo a Ovidio S¨¢nchez como presidente. Pero empez¨® a distanciarse de ¨¦l, del resto de la direcci¨®n, de Gabino de Lorenzo y del grupo parlamentario a medida que los casquistas fueron perdiendo influencia. El ex ministro no ocult¨® en p¨²blico su relaci¨®n g¨¦lida con todos ellos, desacredit¨® a la direcci¨®n asturiana (le reproch¨® "esclerosis por acefalia"), descalific¨® y llev¨® ante los tribunales y ante el ¨®rgano disciplinario del partido a la presidenta local de Gij¨®n... y hace dos a?os pidi¨® "cirug¨ªa" en el PP asturiano.
Cascos quer¨ªa volver, pero con lo que se llam¨® "la motosierra": con manos libres para cortar cabezas. Exigi¨® un congreso extraordinario para hacer un partido a su medida y no aceptaba condiciones para dise?ar la lista electoral. Ah¨ª perdi¨® sus posibilidades como candidato.
Diez de los doce alcaldes del PP, un tercio del grupo parlamentario -en su mayor¨ªa, diputados sin futuro en las listas- y un reducido n¨²mero de cargos p¨²blicos afines al ex ministro (Isidro Fern¨¢ndez Rozada, Pelayo Roces, Mercedes Fern¨¢ndez, entre otros) son sus principales defensores. Entre todos reunieron m¨¢s de 7.000 firmas de afiliados.
La inc¨®gnita ahora es si con esos mimbres Cascos crear¨¢ un partido y romper¨¢ por segunda vez el PP asturiano.
Cascos, seg¨²n el PP asturiano
- "Es un gal¨¢ctico".
- "Estaba cansado. Seguir as¨ª en pol¨ªtica debe ser m¨¢s dif¨ªcil que practicar sexo sin ganas".
- "Se alej¨® de la pol¨ªtica en tiempos muy dif¨ªciles para el PP y pretende volver ahora que casualmente las encuestas son favorables".
- "Es un sexagenario".
- "Tendr¨ªa que volver a nacer para ser el candidato".
- "Aqu¨ª estamos haciendo oposici¨®n mientras usted se dedica a la caza y la pesca. Deje de dar la lata".
- "Su arrogancia le impide actuar por la v¨ªa natural dirigi¨¦ndose a quienes han sido elegidos democr¨¢ticamente".
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