Deseo del buen gobierno
La voladura controlada de las pol¨ªticas del Bipartito ha terminado. Ya no queda mucho de inter¨¦s por desmontar. Todo es austeridad en Br¨¦tema (copyright, Marina Mayoral). Y como todo el mundo sabe, cuando la austeridad entra por la puerta, la diversi¨®n salta por la ventana. Salir de gira por Madrid ya no resulta tan evasivo ni excitante como anta?o, ahora que socialistas y nacionalistas han pospuesto el adelanto electoral que ha de devolver el poder a qui¨¦n le corresponde por usucapi¨®n, como ya ha sucedido en Galicia, siempre a la vanguardia de la pol¨ªtica estatal.
Machacarle el h¨ªgado a Zapatero aburre. Existe overbooking para ese trabajo. Adem¨¢s, por mucho que corras, los problemas tienen la p¨¦sima costumbre y la peor educaci¨®n de seguirte a partir de la segunda mitad de la legislatura, no importa d¨®nde corras. Llega un momento en que la en¨¦sima salida parlamentaria de Rueda a recordarnos los mojitos del viaje a Cuba de Anxela Bugallo ya no funciona como tapadera para las becas fantasma, las oposiciones loter¨ªa, los concursos sorpresa o las listas de espera.
La ecuaci¨®n asfalto, subsidio e intervenci¨®n debe cambiarse por gente, ideas y capital social
Dos a?os prometiendo libertad y repartiendo austeridad no parece un buen plan ?Qu¨¦ hacer ahora que han sido manumitidos los castellanoparlantes, esclavizados a matem¨¢ticas y fuego por la implacable secta de los gallegoparlantes? ?En qu¨¦ desaf¨ªo embarcarse hoy que ha quedado desarticulado el peligros¨ªsimo consorcio, que amenazaba con llenar Galicia de ni?os ataviados con mandilones y dotados de superpoderes tan inquietantes como recitar a Rosal¨ªa de Castro o saberse el himno gallego, tan pol¨ªticamente incorrecto como nos sali¨®? ?A qu¨¦ metas consagrarse cuando el viento, las cajas, las subvenciones, los convenios publicitarios o un buen cacho de los servicios p¨²blicos ha sido o van a ser devueltos a sus leg¨ªtimos propietarios, siendo conjurado el peligro de que la gente piense que le pertenecen o que tiene derecho a participar en los beneficios que generan?
La respuesta es obvia. Puede probarse a gobernar. Aunque parezca dif¨ªcil, gobernar es m¨¢s sencillo de lo que parece. S¨®lo es cuesti¨®n de elegir. M¨¢s o menos, sabemos todos lo que hay que hacer aunque prefiramos fingir que lo desconocemos. A la Xunta le sobra de todo, menos ideas. Sobra dinero, sobra tama?o, sobran subvenciones. Lo que faltan son proyectos. Bastar¨ªa con dejar de hacer lo que sobra y ponerse a trabajar en cuanto falta. Galicia puede gestionarse con la mitad de la conseller¨ªas, secretar¨ªas, direcciones, agencias, consorcios y fundaciones. Este pa¨ªs corre el riesgo de acabar sepultado bajo tantas carreteras, variantes y circunvalaciones que enlazan ninguna parte con qui¨¦n sabe d¨®nde, varias veces y por tantas rutas alternativas que hasta el Tom Tom enloquece. Sobran la mayor¨ªa de las ayudas a-lo-que-quiera-que-sea-que-usted-haga-y-dice-usted-que-crea-mucho-empleo-aunque-no-sabemos-donde-pero-la-esperanza-es-lo-¨²ltimo-que-se-pierde.
El buen gobernante posee una visi¨®n para el futuro de su pa¨ªs y trabaja sobre aquello que la posibilita. A falta de conocer la visi¨®n de la democracia feijoniana, m¨¢s all¨¢ del "bipartito caca, Zapatero pis", tampoco es preciso ser muy original para saber qu¨¦ necesita un pa¨ªs que se muere de viejo, no factura muchas cosas que los clientes nos quiten de las manos y cada a?o pierde productividad, competitividad y capacidad para a?adir valor a cu¨¢nto produce. La vieja e insostenible ecuaci¨®n que conforman asfalto, subsidio e intervenci¨®n, debe ser sustituida por la ecuaci¨®n gente, ideas y capital social. Para ellos, precisamos un gobierno que habilite el talento para que no tenga que buscarse la vida fuera. Un poder que financie las oportunidades para que no se pierdan s¨®lo porque no hay alguien para aprovecharlas. Un liderazgo que apueste sus recursos a la innovaci¨®n, porque tiene el inconveniente de resultar tan cara como imprescindible para competir en un futuro donde si t¨² no tienes la idea, la dise?as, la produces, la distribuyes y la comercializas, otro lo har¨¢ mejor y m¨¢s r¨¢pido. Este buen gobierno es un deseo de a?o nuevo. Si falla, siempre quedar¨¢n los Reyes Magos.
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