La C¨¢mara de Comercio despedir¨¢ al 25% de su plantilla

Uno de cada cuatro empleados, fuera. La C¨¢mara de Comercio de Madrid prescindir¨¢, "seguro", del 25% de su plantilla actual, formada por 312 personas. El c¨¢lculo lo hace su presidente, Arturo Fern¨¢ndez, tambi¨¦n a la cabeza de la patronal CEIM. "Queremos hacerlo de la manera menos traum¨¢tica, con prejubilaciones y bajas voluntarias", afirma. La cifra final de despidos depender¨¢ del plan de negocio que ultima el organismo para adaptarse al cambio que ha aprobado el Gobierno y que elimina la obligaci¨®n de que las empresas est¨¦n asociadas a estas corporaciones.

Hasta ahora, en torno al 60% de los ingresos de la c¨¢mara madrile?a (75 millones en 2009) proven¨ªan de las cuotas que abonan las compa?¨ªas, sobre todo las grandes (la cuant¨ªa del pago iba en funci¨®n de los beneficios). Al convertirse la afiliaci¨®n en algo voluntario, seg¨²n la norma aprobada el pasado diciembre, es preciso replantear la situaci¨®n. De ah¨ª que la c¨¢mara madrile?a ultime un plan de negocio para captar recursos y reducir gastos. El proyecto estar¨¢ listo este mes, seg¨²n el presidente. Deber¨¢ contar con el visto bueno del pleno del organismo, del Consejo Superior de C¨¢maras de Comercio (agrupa a las 88 que existen en Espa?a) y de la Comunidad de Madrid.

Fern¨¢ndez ya insinu¨® los despidos en una carta enviada a los empleados en la segunda quincena de diciembre, seg¨²n public¨® Expansi¨®n. Una misiva en la que advert¨ªa que es imprescindible acometer "una urgente contenci¨®n del gasto, as¨ª como una adecuaci¨®n de la estructura al nuevo proyecto".

Sobre los trabajadores, puntualizaba: "Los que permanezcan en la instituci¨®n tendr¨¢n que adaptarse a cambios sustanciales en los m¨¦todos de trabajo, exigencias de cumplimiento, medios m¨¢s austeros, recursos escasos, mayor dedicaci¨®n, etc¨¦tera".

La carta cay¨® como un rayo entre los empleados. Llov¨ªa sobre mojado. Antes de la reforma del Gobierno, se hab¨ªa aprobado una reducci¨®n de 27 empleados, seg¨²n fuentes de los trabajadores. La pol¨ªtica de austeridad llev¨® a suspender la copa navide?a, pero s¨ª se hizo la adjudicaci¨®n a una empresa del obsequio de Navidad para "miembros del pleno, el comit¨¦ ejecutivo y la alta direcci¨®n de la c¨¢mara", seg¨²n la web de la instituci¨®n. En esos escalones hay m¨¢s de 70 personas."Tenemos que mantenernos con nuestros ingresos. Si no hacemos caja tendremos que cerrar", plantea Fern¨¢ndez. "Antes recoloc¨¢bamos el dinero que recib¨ªamos de nuestros asociados. Se lo devolv¨ªamos en forma de servicios. Ahora tenemos que ver c¨®mo obtenemos esos fondos".

La c¨¢mara estudia c¨®mo rentabilizar los servicios que ofrece (algunos de ellos gratuitos), ver cu¨¢les pueden ser m¨¢s rentables y decidir qu¨¦ se hace con el resto. La vista est¨¢ puesta en los cursos de formaci¨®n, que financia en gran medida, y las certificaciones, por ejemplo, seg¨²n el presidente de la corporaci¨®n.

Tambi¨¦n busca oportunidades de negocio, por ejemplo en la anunciada privatizaci¨®n de Barajas (desea entrar en un eventual sistema de cogesti¨®n) o en Ifema, la instituci¨®n ferial de cuyo accionariado forma parte. La corporaci¨®n estudia adem¨¢s los modelos de funcionamiento de instituciones similares en Europa y Estados Unidos, asegura Fern¨¢ndez.

La C¨¢mara de Comercio de Madrid tiene m¨¢s de medio mill¨®n de asociados (hasta ahora deb¨ªan pertenecer a ella todas las personas naturales o jur¨ªdicas que ejercen una actividad comercial, industrial o de servicio sujeta al Impuesto de Actividades Econ¨®micas). Ofrece servicios que abarcan desde la formaci¨®n y el asesoramiento hasta la promoci¨®n exterior. Adem¨¢s de su sede central, en el Campo de las Naciones, dispone de una docena de oficinas en otras tantas localidades madrile?as y tambi¨¦n de un autob¨²s-oficina m¨®vil.

La decisi¨®n del Gobierno de suprimir la afiliaci¨®n obligatoria a las c¨¢maras (organizaciones con 125 a?os de historia) se plasm¨® v¨ªa real decreto ley el pasado 3 de diciembre. Forma parte del paquete de medidas orientado a estimular la actividad econ¨®mica de las peque?as y medianas empresas (pymes), que forman el grueso del tejido productivo.

El Consejo Superior de C¨¢maras critic¨® la medida, tomada "sin ning¨²n tipo de informaci¨®n ni de consulta previa y sin el tiempo necesario para analizar las consecuencias".

En una nota difundida el pasado 17 de diciembre, el organismo aseguraba que el fin de la afiliaci¨®n obligatoria pon¨ªa en peligro "servicios esenciales" que ninguna otra instituci¨®n puede ofrecer en mejores condiciones a las pymes.

El consejo ha pedido la apertura de "un periodo de reflexi¨®n" entre c¨¢maras, empresas y Administraciones p¨²blicas y un plazo de adaptaci¨®n "adecuado y prudente".