Todo contra Dalglish menos la historia
Un penalti en contra y la expulsi¨®n de Gerrard derrotan al Liverpool en Old Trafford
Veinticuatro horas despu¨¦s de conseguir el banquillo del Liverpool, 20 a?os despu¨¦s de haber dejado la direcci¨®n de Anfield y tras 10 a?os sin entrenar, a Kenny Dalglish (Glasgow, 1951) se le ech¨® encima el Manchester United en Old Trafford, en la tercera ronda de la Copa inglesa (1-0). Sin tiempo para aleccionar al capit¨¢n de los reds, Steven Gerrard, expulsado en el minuto 32 por un par de esas entradas absurdas -su pasi¨®n por los tackles- que le llevaron a la ducha antes del descanso. Ni para evitar que Agger, el central dan¨¦s del Liverpool, cometiera un penalti sobre Berbatov que Howard Webb tard¨® unos segundos en se?alar. Y que transform¨® Giggs en el minuto 2 para firmar la victoria del United. A¨²n as¨ª, la adversidad sac¨® lo mejor del Liverpool, acechante por momentos sobre la porter¨ªa de Kuszczak.
"Me quedo con el compromiso de mis jugadores", resalt¨® Dalglish, que trata a partir de ahora de recuperar las esencias de Anfield, la m¨ªtica Boot Room, la caseta donde Bill Shankly, Bob Paisley y Joe Fagan forjaron las ideas de la leyenda del Liverpool.
Hac¨ªa tiempo que King Kenny quer¨ªa volver al banquillo de Anfield. Y cuando, en verano, los directivos le pidieron consejo para sustituir a Rafa Ben¨ªtez, les respondi¨®: "Yo mismo". Pero entonces no creyeron en ¨¦l, sospechando que se le hab¨ªa pasado el arroz despu¨¦s de tan larga ausencia, como si se le hubieran atrofiado los m¨²sculos de entrenador, apostando por Roy Hodgson, art¨ªfice de que el modesto Fulham llegara a la final de la Liga Europa. Fracasado Hodgson, en el peor arranque liguero desde la campa?a 1953- 1954, los dirigentes recurrieron a dos mitos en el banquillo de Anfield: Ian Rush es el segundo entrenador.
En contra de Dalglish est¨¢ una plantilla muy devaluada en los ¨²ltimos a?os y un club sin rumbo desde la final de Champions perdida ante el Milan en 2007. Mientras el Liverpool cambiaba de due?os, no pod¨ªa construir un estadio nuevo y despachaba a Ben¨ªtez y a Hodgson, el Manchester City y el Tottenham lo han superado. Tampoco hay dinero, por lo que los hinchas se preguntan si podr¨¢n retener a Torres y a Reina o si podr¨¢n volver a fichar jugadores como Xabi Alonso, que escribi¨® en su twitter un mensaje de bienvenida para el nuevo t¨¦cnico. "Buena suerte, King Kenny", dijo el jugador del Real Madrid, siempre tan atento a la cultura de Anfield.
Y a lo que supone de vuelta a los or¨ªgenes. Al Liverpool que gan¨® con Dalglish en el banquillo su ¨²ltima Liga, en 1990, despu¨¦s de haberla conseguido en 1986 y 1988. Afectado por el estr¨¦s y por la tragedia de Hillsborough, en la que fallecieron aplastadas 96 personas en un Liverpool-Nottingham de Copa en 1989, Dalglish renunci¨® en 1991 y se fue de vacaciones con la familia a Orlando. Pero antes de volver, cuando le hab¨ªan dado su puesto a Graham Souness, ya se hab¨ªa arrepentido. "No ten¨ªa ning¨²n derecho a que el Liverpool volviera a llamarme", escribi¨® en su autobiograf¨ªa. "Adem¨¢s, Houness era el hombre adecuado. Pero si el Liverpool hubiese esperado, habr¨ªa vuelto como un disparo".
Despu¨¦s, Dalglish construy¨® un Blackburn Rovers campe¨®n de la Premier en 1995, el ¨²nico intruso en el reinado del United, Arsenal y Chelsea. Y prob¨® en el Newcastle y el Celtic antes de su decenio de abstinencia. Conoce a los j¨®venes de la cantera -es necesario un relevo para Gerrard y Carragher-, y forma parte del esp¨ªritu de Anfield.
Por otro lado, David Bechkam se entrenar¨¢ en el Tottenham tres semanas, aunque no jugar¨¢.
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