"Por supuesto que no soy de fiar"
Pregunta. ?Qu¨¦ tal por la RAE?
Respuesta. Me han asignado una comisi¨®n de trabajo, la de Cultura, y me he estrenado. Mi comisi¨®n revisa las palabras relativas a la cultura. A m¨ª me toc¨® impresionismo, gongorismo...
P. No nos habr¨¢ cambiado el significado, a base de meter mano.
R. He hecho todo lo posible por cambiar, ya que estaba ah¨ª.
P. No me diga m¨¢s: ahora el impresionismo se llama cubismo.
R. Qui¨¦n sabe [r¨ªe].
P. ?Ha tenido tiempo de limpiar, fijar y dar esplendor?
R. S¨ª, s¨ª. Asombrosamente, da tiempo. Se discute sobre una palabra, y puede pasar que los dem¨¢s acepten lo que t¨² dices que te parece adecuado. Y te vienes a casa diciendo: "He hecho algo".
P. ?Los acad¨¦micos son tan finos como dicen?
R. Son fin¨ªsimos. Pero yo tambi¨¦n soy muy fina.
P. ?No son bastante mayores y un poco antiguos?
R. S¨ª, s¨ª. Eso hace tambi¨¦n que sean tan finos. Pero yo prefiero ya la buena educaci¨®n, aunque venga unida a la edad.
P. ?No se siente muy sola con la ausencia de mujeres?
R. Yo en mi casa he vivido siempre con hombres, mis hijos y mi marido. Y es muy agradable llevarte bien con las pocas mujeres que hay en la Academia, Margarita [Salas] y Carmen Iglesias.
P. ?Hay algo que le haga decir "No tengo palabras"?
R. El problema es que esa frase es uno de mis clich¨¦s continuos, con lo cual all¨ª voy a tratar de reprimirme.
P. ?Cree m¨¢s en la bondad humana o en la pericia del Gobierno?
R. Yo me ilusiono, por ejemplo, con la bondad. Pero estoy desilusionada con el g¨¦nero humano. Y con la pericia del Gobierno... veo que no tiene pericia.
P. "Escribir es como un parto". Se debe de pasar la vida embarazada.
R. Ay, s¨ª, el embarazo es lo mejor. El parto ya es m¨¢s duro. Pero estar generando cosas, que se est¨¦n formando ideas, esa sensaci¨®n de plenitud me encanta.
P. Se dijo dispuesta a meditar la supresi¨®n de la letra hache. Si van quitando y llegan a la zeta, ya no podr¨¢ ser usted de Zaragoza.
R. Es verdad. Tengo que revisar esas declaraciones m¨ªas un poco apresuradas.
P. Su compa?era In¨¦s Fern¨¢ndez-Ord¨®?ez dice que la lengua no es sexista. ?Lo comparte?
R. Bueno, es que la lengua es lo que queramos que sea. S¨ª comparto la idea de que el lenguaje nos expresa. Pero la lengua es moldeable y se adapta a cualquier circunstancia. Los sexistas ser¨ªamos nosotros. En la historia de la RAE s¨ª parece que ha pre-dominado la actitud mis¨®gina.
P. En su ingreso habl¨® de los personajes secundarios de El Quijote. Marcela, uno de ellos, prefiere la vida pastoril a casarse. ?Mejor las ovejas que los hombres?
R. Para Marcela, desde luego. Para m¨ª, no. Ahora, me gustan las ovejas tambi¨¦n, ?eh?
P. ?Alguien como usted, capaz de hacer una novela sobre la p¨¦rdida de un abrigo, puede ser de fiar?
R. No. Por supuesto que no soy de fiar. Escudri?o mucho, juzgo mucho, robo vida, incluso a m¨ª misma.
P. ?Qu¨¦ le predice su echadora de cartas para 2011?
R. Mi echadora de cartas soy yo misma. Es un don oculto. Y las cartas prev¨¦n algunos cambios en mi entorno y un par de alegr¨ªas importantes para abril.
P. "No entiendo qu¨¦ es madurar". ?Est¨¢ verde?
R. S¨ª, en cierto modo estoy verde todav¨ªa.
P. Dice ser mejor cuentista que novelista. ?En qu¨¦ es una cuentista de cuidado?
R. Pues en que, en medio de todo, me hago de querer.
P. ?Qu¨¦ personaje de cuento se ha quedado m¨¢s en usted?
R. Blancanieves y los siete enanitos creo que casi es el que m¨¢s me ha gustado. Ten¨ªa la ambig¨¹edad que te dan los cuentos infantiles. Te fascinaba su inocencia, c¨®mo todos la quer¨ªan, pero a la vez te daba miedo.
P. ?Cree que hab¨ªa rollo con los enanitos?
R. Por supuesto [r¨ªe].
P. Dos de sus fantasmas personales son la locura y el insomnio. ?Toma algo para la locura?
R. No, para la locura, no. Creo que la literatura puede ser un cauce. Si la locura es como ser varias personas y estar habitada por varias cosas, la literatura es lo mismo.
P. ?Qu¨¦ le aburre m¨¢s: hablar de los acentos o de pol¨ªtica?
R. De pol¨ªtica. La pol¨ªtica est¨¢ aburrid¨ªsima.
P. De buena cocinera, supongo que bordar¨¢ la sopa de letras.
R. No la hago, y siempre le he tenido mucha man¨ªa de peque?a. Aquellas sopas de cocido eran espantosas.
P. Disc¨ªpula de Ch¨¦jov, amante de Cervantes. ?Es b¨ªgama?
R. S¨ª, claro. ?No ve que soy muchas personas? Como poco, b¨ªgama.
P. ?Y qu¨¦ dice P¨ªo Baroja, el tercero en discordia?
R. A P¨ªo Baroja le gusta much¨ªsimo la compa?¨ªa femenina. Con tal de tener una mujer en su grupo, aceptar¨ªa todas mis debilidades. A m¨ª las suyas me encantan.
Perfil
Tiene 63 a?os, dos hijos y un nieto que la fascina, al que reinventa el cuento de La gallina petirroja que a ella le le¨ªa su madre. Ahora lo adapta y matiza, porque siempre crey¨® que lo de petirroja era algo inconfesable, dado que la tal gallina, trasunto del patito feo, era desgraciad¨ªsima. Nada con frecuencia, cose mucho
y le gusta la m¨²sica, cocinar, leer y pasear con sus perros. "Me gusta casi todo. Tengo el d¨ªa muy lleno", afirma.
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