Vente a Alemania, ingeniero Pepe

Madrid, mayo de 1961. Jes¨²s Laurido, 18 a?os, acaba de terminar su formaci¨®n de contable y de perder su primer trabajo. Tiene un contacto con un empleado en la oficina de inmigraci¨®n que le cuenta que en el exterior hay posibilidades. Es joven y tiene ganas de aventura, da igual a donde le manden. En Kassel, Alemania, la empresa AEG de energ¨ªa el¨¦ctrica necesita trabajadores invitados. Laurido se va solo, en tren de Madrid a Hendaya, de Hendaya a Colonia, y de Colonia en autob¨²s llega a Kassel. Lo asignan a una residencia donde hay otros 530 espa?oles. M¨¢s tarde vivir¨¢ en Berl¨ªn tanto la construcci¨®n como la ca¨ªda del muro.

Madrid, Junio de 2007. Diego Ruiz del ?rbol, 27 a?os, un t¨ªtulo de ingeniero inform¨¢tico, desarrolla software para el control del tr¨¢fico a¨¦reo para la empresa Indra, pero no est¨¢ satisfecho con las condiciones y el ambiente de trabajo. Una beca Erasmus en Praga le ha abierto las miras acerca de la vida en el exterior. Quiere volver a hacerlo. Encuentra trabajo en Berl¨ªn, como desarrollador de software para juegos. Un mejor sueldo y la perspectiva de otra vida lo empujan hacia una experiencia en Alemania. "Quiz¨¢s solo por dos o tres a?os", se dice a s¨ª mismo.

El 19% de los licenciados entre 19 y 25 a?os est¨¢ en el paro

110.000 personas han emigrado en 12 meses para buscar trabajo

Medio siglo despu¨¦s, los espa?oles vuelven a emigrar a Alemania, aunque sus historias son radicalmente distintas. La realidad de Espa?a ha dado un vuelco desde aquellos a?os de hambre que empujaron a m¨¢s de dos millones de personas a buscarse la vida en Europa sin m¨¢s aval que las ganas de trabajar y sus manos.

Los nuevos emigrantes espa?oles han estudiado. Y mucho. Saben idiomas, han viajado, han vivido la experiencia de una beca Erasmus. Pero en Espa?a tienen dificultades para encontrar un empleo acorde a su formaci¨®n. El 19% de los licenciados de entre 25 y 29 a?os est¨¢ en el paro. Un 44% desempe?a un trabajo por debajo de su cualificaci¨®n (seg¨²n la OCDE). Y sus sueldos est¨¢n a la cola de Europa. Emigran para buscar un empleo que cumpla sus expectativas, para mejorar su situaci¨®n laboral y sus perspectivas. Y la locomotora de Europa -Alemania- sigue siendo uno de sus destinos preferidos.

La crisis ha alejado de Espa?a a 110.000 personas entre abril de 2008 y abril de 2010, seg¨²n un estudio de Adecco, lo que supone un aumento de un 9,2% en el n¨²mero de espa?oles que residen en el extranjero (1.333.693 personas). El perfil del demandante de empleo en el extranjero es un hombre de entre 25 y 35 a?os, altamente cualificado: ingeniero, arquitecto, inform¨¢tico. A ellos se dirige precisamente ahora la canciller alemana Angela Merkel. Seg¨²n adelantaba el semanario Der Spiegel, Merkel tiene intenci¨®n de contratar a j¨®venes cualificados del sur y este de Europa para dar respuesta a las necesidades del mercado alem¨¢n. Es uno de los puntos que la canciller pretende tratar con Rodr¨ªguez Zapatero durante la pr¨®xima cumbre hispano-germana, que se celebra en Madrid el jueves que viene.

A priori, la propuesta suena beneficiosa para ambos pa¨ªses. Mientras que Espa?a ostenta el triste r¨¦cord de desempleo en Europa, Alemania prev¨¦ reducir este a?o el paro del 7,7% al 7% y crecer un 2,3%. Para ello, necesita entre 500.000 y 800.000 trabajadores cualificados.

Klaus Zimmerman, presidente del Instituto Alem¨¢n de Econom¨ªa (DIW) lanz¨® la alarma en octubre. El progresivo envejecimiento de la poblaci¨®n alemana no podr¨¢ dar respuesta al crecimiento econ¨®mico del pa¨ªs. "A partir de 2015 perderemos cada a?o 250.000 trabajadores", dice. "Necesitamos urgentemente trabajadores inmigrantes, como m¨ªnimo 500.000 al a?o para asegurar nuestra econom¨ªa".

De momento, se desconocen los detalles de la posible propuesta de Merkel. ?Ser¨¢ necesario dominar el alem¨¢n para acceder a estos puestos? Los contratos, ?ser¨¢n temporales o indefinidos? Y el proceso de selecci¨®n, ?se har¨¢ en Alemania o desde Espa?a?

Tampoco ha trascendido las profesiones a las que se dirige, pero teniendo en cuenta el peso de la industria en el mercado alem¨¢n, es posible que las ingenier¨ªas sean las carreras m¨¢s solicitadas. En diciembre de 2010 faltaban en Alemania 48.800 puestos de ingeniero por cubrir, seg¨²n estimaciones de la Asociaci¨®n de Ingenieros Alemanes. "Unos 53.000 ingenieros se licencian al a?o en Alemania y se jubilan otros 50.000", explica Tanja Schuman, portavoz de la asociaci¨®n. "En teor¨ªa esto supone un equilibrio, pero no lo es porque no todos los que se licencian se quedan en Alemania y se ponen a trabajar".

Los j¨®venes ingenieros espa?oles est¨¢n entre quienes menos sufren el paro. Diversas estimaciones hablan de una tasa de desempleo del 10% (frente a un 3% o un 5% hace tres a?os). Pero la posibilidad de tener un buen empleo no es el ¨²nico atractivo de trabajar en Alemania. Tambi¨¦n lo es el sueldo de salida de un joven ingeniero. Mientras que en Espa?a lo normal es estrenarse con 25.000 o 30.000 euros al a?o, seg¨²n el Consejo General de Colegios Oficiales de Ingenieros Industriales, en Alemania llegan a los 40.000 o 45.000 euros, seg¨²n la Asociaci¨®n de Ingenieros Alemanes.

Pero, ?qu¨¦ efectos puede tener una fuga de cerebros de este tipo para una Espa?a que necesita ser m¨¢s competitiva para salir de la crisis? Santos Ruesga, catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada de la Universidad Aut¨®noma, cree que pocos: "Si la propuesta finalmente se materializa no creo que se note mucho cuantitativamente, y por desgracia tampoco va a aliviar nuestras enormes tasas de paro, cuyo mayor problema es la mano de obra menos cualificada. Eso s¨ª, visto a peque?a escala, para los j¨®venes licenciados que acaban de terminar una carrera s¨ª supone un beneficio importante".

Jos¨¦ Garc¨ªa-Montalvo, catedr¨¢tico de Econom¨ªa Aplicada de la Universidad Pompeu Fabra, lo analiza desde un punto de vista pragm¨¢tico: "Espa?a es un caso especial, porque produce mucho capital humano pero lo usa de forma ineficiente. La sobrecualificaci¨®n de los j¨®venes espa?oles duplica la media europea, y si no encuentran trabajo es mucho mejor irse a Alemania o a Reino Unido a trabajar de lo suyo que la frustraci¨®n de quedarse y ver que van pasando los meses y nada. Adem¨¢s, la gente que se pasa mucho tiempo trabajando en un empleo por debajo de cualificaci¨®n lo acaba aceptado como algo natural. Es un mecanismo psicol¨®gico muy sencillo y pernicioso por el que vas adaptando tus expectativas a la baja. Saliendo fuera y probando otras cosas se puede evitar".

Carlos Conde, Vicerrector de Ordenaci¨®n Acad¨¦mica y Planificaci¨®n Estrat¨¦gica de la Universidad Polit¨¦cnica de Madrid, espera que la fuga dure poco y que los ingenieros que se sumen a ella, vuelvan, pues "en el medio plazo, Espa?a volver¨¢ a necesitarlos. Estamos atravesando una mala coyuntura, pero cuando se remonte, el pa¨ªs va a necesitar a los j¨®venes cualificados".

En regresar no es precisamente en lo que est¨¢ pensando Diego Ruiz del ?rbol. Tiene una casa nueva y est¨¢ esperando a su primer hijo. "Mi decisi¨®n de venirme a Alemania no fue laboral, fue m¨¢s bien una decisi¨®n vital", relata. "Luego encontr¨¦ aqu¨ª mejores condiciones de trabajo. Gano unos 3.700 euros brutos (2.000 netos) al mes en una empresa alemana que buscaba una persona que hablara castellano para su mercado en Espa?a", dice este ingeniero que en su tiempo libre es redactor de berlunes.com, una plataforma de blogueros espa?oles. "Me siento un poco como si me hubiera tocado la loter¨ªa, porque en Berl¨ªn tambi¨¦n hay paro y los sueldos son m¨¢s bajos que en el resto de Alemania",

Desde la experiencia de los a?os, Laurido aconseja prudencia: "Veo a muchos j¨®venes que llegan sin tener idea, sin conocer la ciudad, ni el idioma. ?Ojo, que aqu¨ª tambi¨¦n hay paro!". El septagenario disfruta ahora de su jubilaci¨®n y asiste a otros espa?oles mayores que lo necesitan dentro de la organizaci¨®n Solidaridad sin Fronteras. "Cuando yo llegu¨¦ a Berl¨ªn se estaba construyendo el muro, las f¨¢bricas del oeste necesitaban trabajadores", contin¨²a. "Hab¨ªa trabajo en cada esquina. Ahora la situaci¨®n es distinta: los que llegan est¨¢n m¨¢s preparados, los tipos de trabajos que se ofrecen son m¨¢s cualificados, pero no est¨¢ todo tan f¨¢cil como entonces".