As¨ª recorta la derecha
Hay tijeras y hachas. Hay recortes que procuran da?ar lo menos posible a los trabajadores y hachazos que destrozan cada d¨ªa un poco m¨¢s el Estado del bienestar.
El Consejo de Pol¨ªtica Fiscal y Financiera acord¨® el pasado a?o que las comunidades aut¨®nomas deb¨ªan reducir su d¨¦ficit para cumplir con los objetivos marcados por el Gobierno central y Bruselas. No todas han recortado igual. Hay diferencias ideol¨®gicas palpables.
El caso m¨¢s hiriente es el de la Comunidad de Murcia, tantas veces exhibida como modelo de gobierno eficaz por nuestro sin par Javier Arenas.
El hacha popular murciana ha cercenado 75 euros de un complemento de 175 que recib¨ªan los profesores; ha reducido un 10% los complementos de las guardias del personal sanitario; ha incrementado en dos horas y media (de 35 a 37,5) la jornada laboral; ha eliminado el 30% de liberados sindicales. Todo, para ahorrar 300 millones de euros. El presidente Ram¨®n Luis Valc¨¢rcel se niega a subir impuestos.
La otra comunidad que, junto con Murcia, superaba el d¨¦ficit autorizado, Castilla-La Mancha, tambi¨¦n ha hecho su plan de ajuste para ahorrar 1.000 millones. El socialista Jos¨¦ Mar¨ªa Barreda ha recortado gasto, pero ha aumentado los ingresos v¨ªa impuestos.
Algunas de esas medidas de ahorro son: reordenar el sector p¨²blico; control del absentismo (en tres meses, han ahorrado 2,5 millones en Educaci¨®n); recetar el f¨¢rmaco m¨¢s barato; suprimir ayudas (a la televisi¨®n p¨²blica, 10 millones) o cerrar los edificios p¨²blicos a las 5 de la tarde. Ahorrar¨¢ 775 millones.
Adem¨¢s, ingresar¨¢ 200 millones de euros mediante impuestos a los dep¨®sitos bancarios, la energ¨ªa e¨®lica y las actividades que afecten al medio ambiente.
Son tan dispares las f¨®rmulas elegidas por esas dos comunidades que, el pasado 20 de enero, unos centenares de murcianos se manifestaron ante la Consejer¨ªa de Econom¨ªa de Murcia pidiendo ser gobernados por el presidente socialista: "Aqu¨ª una cosa queda, que nos gobierne Barreda", gritaban.
Otras comunidades del PP han seguido la senda murciana: Galicia ha despedido a 113 veterinarios de la empresa p¨²blica Seaga; ha recortado 220 millones en Sanidad; ha suprimido la gratuidad de los libros de texto; ha eliminado el complemento de 200 euros a las pensiones mas bajas.
La ultraliberal Esperanza Aguirre ha reducido el 5% del presupuesto en Educaci¨®n, m¨¢s en la p¨²blica que en la concertada; ha ampliado la devoluci¨®n en el IRPF por gastos educativos, lo que beneficia a los padres que llevan a sus hijos a colegios privados; ha despedido a 1.500 profesores; ha congelado las becas de comedor... No es de extra?ar que Madrid sea la comunidad que menos gasta por alumno en la escuela p¨²blica. Adem¨¢s, ha suprimido un centenar de empresas p¨²blicas y eliminar¨¢ unos 2.000 de los 3.400 delegados sindicales.
La guinda la ha puesto el pasado domingo el jefe de cocinas del PP, Mariano Rajoy. En su peri¨®dico de cabecera anunciaba que, si llega a la presidencia del Gobierno, "cerrar¨¢ o privatizar¨¢" 4.000 empresas p¨²blicas. Comenzando por las televisiones p¨²blicas auton¨®micas.
El plan andaluz de reorganizaci¨®n del sector p¨²blico, aunque suprimir¨¢ 111 empresas, no privatizar¨¢ ning¨²n servicio. Ni siquiera Canal Sur. No restringir¨¢ los derechos laborales o sindicales. No habr¨¢ despidos. Ni reducci¨®n de salario o incentivos. Ni enchufados convertidos en funcionarios. La reforma ha sido pactada con los dos m¨¢s importantes sindicatos del pa¨ªs, CC OO y UGT, y se tramita en el Parlamento.
?No ven esta diferencia los sindicatos corporativos que se enfrentan a la Junta? ?O es que prefieren seguirle el juego al PP, que critica las reformas de aqu¨ª, mientras reparte hachazos, y estos s¨ª que afectan a los trabajadores, all¨¢ donde gobierna?
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