Merkel respalda las reformas de Zapatero pero le pide nuevos ajustes

La estancia hoy en Madrid de la canciller alemana, Angela Merkel, solo durar¨¢ seis horas, pero a¨²n as¨ª esta cita ser¨¢ "la m¨¢s importante de los ¨²ltimos a?os entre Espa?a y Alemania", en palabras de Zapatero. Y no solo por la participaci¨®n de seis ministros por cada parte -los titulares de Exteriores; Econom¨ªa; Finanzas; Trabajo y Asuntos Sociales; Transporte e Infraestructuras; y Educaci¨®n y Ciencia- o por la novedosa participaci¨®n en el almuerzo de Moncloa de responsables de grandes empresas -como Cesar Alierta (Telef¨®nica); Jos¨¦ Ignacio S¨¢nchez Gal¨¢n (Iberdrola); o Jos¨¦ Manuel Entrecanales (Acciona)-, dirigentes sindicales y patronales -Ignacio Fern¨¢ndez Toxo (CC OO); C¨¢ndido M¨¦ndez (UGT); Michael Sommer (Confederaci¨®n Alemana de Sindicatos); o Juan Rosell (CEOE)- y responsables de las respectivas confederaciones de cajas de ahorros.

Espa?a, dispuesta a sumarse al pacto entre Alemania y Francia

Merkel -que llega a Madrid un d¨ªa despu¨¦s de la firma del anhelado pacto social y en v¨ªsperas del Consejo Europeo de ma?ana en Bruselas- dar¨¢ un fuerte espaldarazo a las medidas adoptadas por Zapatero: de la reforma de las pensiones a la reordenaci¨®n del sistema financiero.

Pero las palabras de elogio vendr¨¢n acompa?adas por una advertencia de que Espa?a debe hacer todav¨ªa m¨¢s, que a¨²n hace falta una nueva vuelta de tuerca en el ajuste. Merkel trae bajo el brazo un "plan de competitividad", a cuya aprobaci¨®n condiciona la ampliaci¨®n del fondo europeo de estabilizaci¨®n de 750.000 millones; as¨ª como su flexibilizaci¨®n para permitir, por ejemplo, que los pa¨ªses m¨¢s vulnerables puedan recomprar bonos en el mercado secundario y aliviar la presi¨®n sobre su deuda.

El plan con el que Merkel quiere avanzar hacia la armonizaci¨®n de las pol¨ªticas econ¨®micas y fiscales -pactado con el presidente franc¨¦s Nicolas Sarkozy- incluye medidas ya adoptadas por Espa?a, como el retraso de la edad de jubilaci¨®n hasta los 67 a?os, pero tambi¨¦n otras nuevas, como la desvinculaci¨®n de los aumentos salariales y la inflaci¨®n, o la prohibici¨®n legal o incluso constitucional de incurrir en d¨¦ficit, a imitaci¨®n de lo que ha hecho Alemania.

En declaraciones a varios peri¨®dicos alemanes, publicadas ayer, Zapatero se ha mostrado dispuesto a discutir con Merkel "las bases de un pacto de competitividad". Sin entrar en detalles sobre las propuestas de la canciller, argumenta que "el solo hecho de que este proyecto sea lanzado y que los grandes pa¨ªses, como Alemania, Francia, Espa?a e Italia se adhieran totalmente dar¨¢ m¨¢s confianza a los mercados que las discusiones sobre la flexibilidad y el tama?o del fondo de rescate europeo".

"El euro se basa en una pol¨ªtica monetaria com¨²n, pero falta el otro pilar, debemos hacer converger nuestras pol¨ªticas de competitividad", agrega Zapatero.

La reforma del fondo de rescate no se aprobar¨¢ hasta el Consejo Europeo de finales de marzo y, con el alivio que supone la tendencia a la baja de la prima de riesgo de la deuda espa?ola, el Gobierno insiste en que puede financiarse en el mercado y no necesitar¨¢ el paraguas europeo.

Alemania es la primera interesada en que sea as¨ª. No solo porque deber¨ªa correr con gran parte de la factura de un eventual rescate, sino porque Alemania es uno de los pa¨ªses m¨¢s expuestos al riesgo espa?ol: en sus manos hay bonos del Tesoro espa?ol por unos 22.000 millones de euros, pero la porci¨®n de la deuda privada espa?ola que atesoran los bancos alemanes es muy superior: 167.000 millones, seg¨²n el Banco Internacional de Pagos.

Olvidados est¨¢n ya los reproches del Gobierno a Merkel por alentar con sus declaraciones, en oto?o pasado, los ataques especulativos contra la solvencia de la deuda espa?ola.